• Las frases que antes nos decían las abuelas: "El peor enemigo de una mujer es otra mujer" o "el amor es para siempre" ya no tienen cabida en el amor propio y la sororidad.
  • El laboratorio de tendencias, Tlacuache, y la editorial, Malvestida, realizaron un estudio donde identificaron seis tendencias de las mujeres.
  • Las marcas deben conocerlas para poder tener mejores productos que vayan de acuerdo a las creencias de su mercado.

Las frases que antes nos decían las abuelas : «El peor enemigo de una mujer es otra mujer», «el amor es para siempre» y «mastubarse es del diablo» ya no tienen cabida dentro de la sororidad.

El laboratorio de tendencias Tlacuache y la editorial Malvestida realizaron un estudio llamado Mujer-es Ahora, donde identificaron seis tendencias —o energías como lo llamaron— de las nuevas generaciones de mujeres.

Las marcas deben reconocer que las nuevas generaciones buscan autenticidad ante los productos que ofrecen, por lo que Tlachuache y Malvestida sugieren a las compañías poner atención en estos cambios.

«Las mujeres saben muy claro lo que quieren, ellas trabajan en ello y tanto las empresas como las marcas están siendo muy lentas en escucharlas, en entender cómo van sus cosmovisiones, sus necesidades, su forma de pensar y aspiraciones», dijo Daniela Buenfil, de Tlacuache.

Escuchar y entender estas energías podría ayudar a crear nuevos productos y/o servicios que beneficien la vida de las mujeres.

Las mujeres se buscan a sí mismas con sororidad y amor propio

El estudio se realizó a 700 mujeres que van desde millennials hasta centennials, dejando claro que estas tendencias se relacionan entre sí y coexisten entre ellas.

«Las mujeres están buscando su bienestar en todo sentido y están organizándose y activando para poder lograrlo. Y bienestar no solo es la salud física, [también va de] la salud emocional, la salud amorosa, sexual, entre congeneres, a la salud laboral y la salud en todos los sentidos», agregó.

Alejandra Higadera, de Malvestida, asegura que las mujeres no están buscando la aprobación de la mirada masculina o cualquier otra aprobación, simplemente porque ahora se busca estar bien con ellas mismas.

«Se empieza a romper este miedo de lo que muchas veces nos dijeron que no estaba bien», comentó.

A continuación enlistamos las seis energías de las mujeres:

1. Cuerpo: apropiación y significación

Las mujeres ahora buscan apropiarse completamente de su cuerpo, sin estigmas sociales o canones de belleza impuestos que las agredan de una forma o las hagan sentir mal con ellas mismas.

«Buscan honrarlo (el cuerpo) no bajo dictámenes del capitalismo que exige y hace sentir a las mujeres viejas, feas y gordas; nos hacen sentir de muchas formas para consumir de esa manera y estar exapropiadas de nuestro cuerpo», dijo Daniela.

Ahora las generaciones ya no buscan cumplir con canones de peso, piel y físico perfecto, simplemente las mujeres buscan amar a su cuerpo tal y como es.

«Cuestionan y desmontan las creencias culturales y sociales alrededor de la belleza, la edad y la perfección», se lee en el estudio.

Sin embargo, el proceso no es fácil, o al menos, así lo reconocieron las cientos de mujeres del estudio. «Lo que empezó como body positive, ahora se transformó con movimientos sociales de liberación», dijo Daniela.

2. Amor propio y libre

Las mujeres cuestionan ahora el amor romántico; es decir, la idea de que «el amor puede con todo» o conceptos de «hasta que la muerte los separe», por la simple razón de que se toma como eje rector el amor propio, que define las otras relaciones.

Además, las mujeres están apostando por otras formas de amar que incluya hacerlo en libertad.

«Buscar ser mujeres autónomas y vivir bajo nuestras propias normas», dijo Daniela.

3. Bienestar: salud y autocuidado

De acuerdo con Daniela, muchas veces se liga a las mujeres solo con su salud física; sin embargo, la salud mental, la salud con el trabajo, entre congeneres y en colectividad se busca el bienestar.

Ahora, más mujeres buscan estar bien consigo mismas en todos los ambitos de su vida, por lo que buscan situaciones que propicien a este autocuidado y evitan las que no sumen a ello.

«Ponen el autocuidado personal y el cuidado colectivo como estandarte», dice el estudio.

4. Colectividad: sororidad y resistencia

Ambas expertas señalan que gran parte de estas energías giran entorno a la sororidad, a la organización entre mujeres y la apuesta por acompañarse unas a otras y dejar de luchar por la atención masculina.

«Las mujeres siempre hemos tenido la capacidad de organizarnos; desde las señoras que arman la tanda y los grupos de amigas, esto tiene que ver con la socialización desde pequeñas», comentó Alejandra.

Según Daniela, mientras a los hombres los separaban para jugar deportes, a las mujeres las sentaban para platicar, por lo que las herramientas de socialización las tenemos más desarrolladas.

Por esto cada vez más mujeres crean espacios de sororidad, beneficio y contención con otras mujeres, para así tomar las luchas como colectivo y no como individuales.

5. Sexualidad: autoconocimiento y autogestión

Más mujeres no temen hablar de su cuerpo, de su salud sexual e incluso de mostrar sus juguetes sexuales, y es que la sexualidad para estas nuevas generaciones debe dejar de ser un símbolo de vergüenza para convertirse en uno de resistencia y amor.

Por esto, los estereotipos moralistas respecto al sexo han quedado atrás y ahora las mujeres buscan mejorar su salud sexual para el bienestar propio y sin el objetivo de satisfacer a una pareja.

«Creo que lo sorprende es que, probablemente, hace unos años no hubiéramos pensado que una mujer hablara publicamente de su sexualidad; que mostrara sus juguetes, que hablara sobre masturbación con otras mujeres», dijo Daniela.

6. Espiritualidad: sabiduría y plenitud

Las mujeres ahora apuestan por los saberes ancestrales, la naturaleza y su intuición para encontrar un equilibrio y armonía con su ambiente.

Incluso de forma colectiva las mujeres se organizan para llegar a este conocimiento y compartir esta información.

«Estas energías no nacieron ayer, vinieron cociéndose a fuego lento desde hace un rato como todas las tendencias. Y lo que vemos hoy es que las manifestaciones que estamos reportando ya son tangibles», dijo Daniela.

«Las marcas deben entender que todas las acciones que hagan deben ser coherentes con lo que sucede dentro de las empresas, no puedes adaptar una estrategia de marketing de equidad de género, si no hay equidad dentro de tu equipo», concluyó Alejandra.

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