- Nvidia es aún el rey de la Inteligencia Artificial.
- Gracias a sus chips, la empresa se ha vuelto fundamental para las firmas desarrolladoras de modelos de IA.
- Pero el dominio de Nvidia no está garantizado con sus rivales tratando de arrebatarle un pedazo de la gloría.
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Han habido pocas apuestas tan seguras en la era de la inteligencia artificial como Jensen Huang.
El veterano de Silicon Valley de 61 años, que dirige Nvidia, ha supervisado un aumento de 2 billones de dólares en su valor desde principios del año pasado. El viaje de la compañía de 1 billón a 2 billones de dólares tomó solo nueve meses, y ahora vale 2.35 billones de dólares, solo detrás de Microsoft y Apple.
Esa historia de crecimiento tiene una explicación simple: Nvidia ha jugado un papel crucial en el suministro de los chips necesarios para impulsar la revolución de la IA generativa, lo que la convierte en fundamental para las ambiciones de Sam Altman, Mark Zuckerberg y todos los demás que buscan enriquecerse con la IA.
Así que no es de sorprender que se esperen resultados explosivos mientras Nvidia se prepara para compartir sus ganancias del primer trimestre después del cierre del mercado el miércoles. Como dijo el analista de Wedbush, Matt Bryson, espere un «enjuague y repita» de los recientes trimestres de éxitos.
Pero como un CEO que vio a su empresa al borde de la bancarrota en la década de 1990, Huang sabe que el éxito no está garantizado. Y aunque Nvidia está en la cima, se avecinan desafíos en el horizonte.
El dominio de Nvidia enfrenta amenazas
El hype detrás de los chips de Nvidia no es una broma.
En marzo, Huang se subió al escenario en San José, California, para un evento apodado el «Woodstock de la IA» (él parecía preferir las comparaciones con Taylor Swift) mientras el mundo esperaba la revelación de los chips de próxima generación de Nvidia, o GPUs, llamados Blackwell.
Blackwell ofrece avances tecnológicos sobre su predecesor, la GPU H100 que los CEOs de tecnología como Zuckerberg han estado buscando activamente acumular, y que han sido discutidos en la industria desde su anuncio.
Huang dijo que Blackwell sería el doble de potente, lo que lo convierte en una compra obvia para las empresas que buscan construir modelos de IA más grandes, inteligentes y eficientes.
Pero los competidores han estado ocupados desarrollando sus propios chips de IA para reducir la dependencia de las ofertas cada vez más costosas de Nvidia. Las estimaciones de precios para el chip Blackwell más poderoso, el GB200, son de alrededor de 70,000 dólares cada uno, aproximadamente el doble del precio de un H100.
La CEO de AMD, Lisa Su, que es prima de Huang, está buscando quitar clientes a Nvidia con un chip llamado MI300X que cuesta entre 10,000 y 15,000 dólares. Los mismos clientes de Nvidia, como Google, Microsoft y Meta, también están diseñando sus propios chips.
Aún no está claro cuán exitosos serán esos esfuerzos. Lo que realmente ha hecho que el hardware de chips de Nvidia funcione tan bien para sus clientes es el software en el que se ejecuta, CUDA.
Tiempo de Triton
CUDA es un sistema plug-and-play que tiene como objetivo hacer que las GPUs de Nvidia sean fáciles de usar con cualquier carga de trabajo de IA. Pero los rivales también están buscando enfrentarse a CUDA en un intento por destronar a Nvidia.
El Financial Times reportó que las empresas tecnológicas que buscan alternativas al CUDA de Nvidia han estado explorando Triton, software lanzado por OpenAI, el creador de ChatGPT, en 2021.
Si tienen éxito en el uso de Triton, podrían estar un paso más cerca de un futuro en el que las alternativas a los chips de Nvidia sean más fáciles de usar.
Llevar a cabo estas iniciativas de una manera que realmente amenace a Nvidia aún está a cierta distancia. Pero los inversores estarán ansiosos por anticipar cómo responderá Nvidia en un momento en que el crecimiento parece estar desacelerándose.
La acción casi se ha duplicado este año, aunque ha habido tambaleos en el camino, como una caída de un 10% en un día después de un pánico más amplio del mercado.
Nvidia está lista para mantener su corona por ahora, pero Huang sabe que los rivales están buscando su trono en la IA.
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