- Dos herederos de Birkenstock ahora valen 3,400 millones de dólares después de la salida a bolsa de la empresa, informó Bloomberg.
- La marca alemana de sandalias, de la que durante mucho tiempo se ha criticado por producir zapatos "feos", ha experimentado un auge en las ventas en los últimos años.
- Birkenstock cotizó en Nueva York el miércoles, pero las acciones abrieron 11% por debajo de su precio de oferta.
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Dos de los herederos del fabricante alemán de sandalias Birkenstock ahora tienen un valor combinado de 3,400 millones de dólares (mdd) después de que la empresa salió a bolsa, informó Bloomberg.
Esto a pesar de que la apertura de la compañía fue la peor en más de dos años para una compañía que cotiza en bolsa por 1,000 mdd o más en Nueva York.
Las acciones abrieron a 41 dólares el miércoles, 11% por debajo de su precio de oferta de 46 dólares.
La empresa de casi 250 años de antigüedad cotiza en la Bolsa de Valores de Nueva York a través de una oferta pública inicial (IPO), cotizando bajo el símbolo «BIRK» e impulsando las fortunas de Alex y Christian Birkenstock.
Insider se ha puesto en contacto con la empresa para comentar sobre el patrimonio neto de Alex y Christian Birkenstock.
¿Cuál fue el origen de las sandalias Birkenstock?
Los hermanos se involucraron en el negocio familiar de sandalias, cuyos orígenes se remontan a la Alemania central rural en 1774, cuando eran adolescentes en la década de 1980 y más tarde se les unió su hermano mayor Stephan.
En 2002, su padre, Karl Birkenstock, dimitió y transfirió la dirección a los hermanos. Aproximadamente una década después, la familia Birkenstock cedió el control, se convirtió en una corporación y nombró codirectores ejecutivos, sus primeros líderes no familiares. Stephan vendió sus acciones, informó Bloomberg.
Alex y Christian Birkenstock, que hasta entonces habían sido las partes controladoras finales de la empresa, vendieron una participación mayoritaria a la firma de capital privado L Catterton en 2021 en un acuerdo que valoró Birkenstock en 4,900 mdd.
Los hermanos obtuvieron más de 3,200 mdd de esa transacción, informó Bloomberg.
L Catterton tiene el respaldo del conglomerado de lujo LVMH
Desde entonces, Christian Birkenstock mantuvo una participación minoritaria en la empresa y obtuvo una rentabilidad de más del 100%, informó Bloomberg, mientras que Alex Birkenstock ya no es un accionista que cotiza en bolsa.
L Catterton cuenta con el respaldo del conglomerado de lujo LVMH del multimillonario Bernard Arnault. En una presentación presentada en octubre, Birkenstock nombró a su hijo, Alexandre Arnault, miembro de la junta directiva de la empresa.
Según Bloomberg, la riqueza combinada de los hermanos los coloca en el Índice de multimillonarios de Bloomberg.
No están entre las 500 personas principales de la lista, que figuran públicamente en línea, y la persona número 500 más rica de esa lista, Charles Dolan, tiene un valor de más de 5,000 mdd.
Grandes pasos rumbo a la OPI
Birkenstock dijo que vendió alrededor de 30 millones de unidades en 2022, con unos ingresos de 1,320 mdd.
Las ventas directas al cliente representaron 38% de los ingresos en el año fiscal 2022, frente al 18% en el año fiscal 2018, lo que, según dijo, se debió principalmente al crecimiento del comercio electrónico. La empresa tiene alrededor de 45 tiendas, casi la mitad de las cuales están en Alemania.
En su prospecto de oferta pública inicial, decía que 72% de sus clientes eran mujeres, más de la mitad de sus ingresos procedían de América y más de un tercio procedían de Europa.
Los baby boomers, los millennials y la Generación X representaban cada uno alrededor de 30% de sus clientes, mientras que los de la Generación Z representaban solo el 12%, dijo.
De los hippies a ser un símbolo de estatus, en los últimos años
El prospecto de la OPI de Birkenstock detalla cómo a lo largo de los años las sandalias se convirtieron en un pilar para varios grupos: los hippies en los años 1960 y 1970, las personas con conciencia ecológica en los años 1980 y las mujeres en los años 1990.
La marca ortopédica alemana, de la que durante mucho tiempo se han burlado por producir zapatos «feos», se ha convertido en un símbolo de estatus en los últimos años.
Celebridades como Kendall Jenner y la YouTuber Emma Chamberlain usaron su zueco Boston de 160 dólares, que posteriormente se agotó, y sus sandalias aparecieron en el éxito de taquilla «Barbie» de Greta Gerwig como símbolo del mundo más allá de Barbielandia.
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