• Algunos factores como los roles de género, costumbres y estereotipos inculcados en la infancia han impedido que más mujeres elijan carreras relacionadas con ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.
  • Los datos apuntan a que la mayoría de las mujeres se deciden por carreras relacionadas a la educación, artes, salud, bienestar, ciencias sociales, periodismo, negocios y leyes.
  • La poca demanda de las STEM entre las mujeres no es un fenómeno que sea único en México o Latinoamérica, se trata de una tendencia marcada en todo el mundo.

¿Alguna vez te has preguntado por qué existen más hombres científicos, emprendedores tecnológicos e inventores que mujeres?, ¿cuáles son los factores que influyen para que las mujeres no elijan carreras en ciencia y tecnología?

De acuerdo con un estudio realizado por el Centro de Investigación de la Mujer en Alta Dirección (CIMAD) del IPADE y Movimiento STEM, algunos factores, como los roles de género, costumbres y estereotipos, inculcados en la infancia, han impedido que más mujeres elijan carreras relacionadas con ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.

La presencia de mujeres en carreras STEM (Science, Technology, Engineering and Mathematics) está muy por debajo la de los hombres. Las profesiones ligadas a estos campos de estudio siguen siendo un reino masculino y no por la falta de esfuerzos para atraer talento femenino, sino por factores que tienen que ver más con la crianza.

Pocas mujeres en el campo de las ciencias

En tanto el Foro Económico Mundial habla de que este fenómeno se debe a que existen pocos esfuerzos para incentivar a que mujeres y niñas se enrolen en programas educacionales de STEM, el Estudio Internacional en Matemáticas y Ciencias Avanzadas de 2015, indicó que en gran parte de los países sigue siendo un reto atraer a mujeres en las áreas STEM, pues muchas de ellas no están interesadas en dichas disciplinas.

Prueba de ello es que en datos mundales, la mayoría de los estudiantes inscritos en cursos avanzados en matemáticas y física son varones.

Lo que lleva a pensar que no es un tema de pocas oportunidades, si no de elección. De acuerdo con un reporte de la UNESCO de 2019, del total de la población femenina en educación superior a nivel mundial, sólo 30% elige disciplinas STEM. La matrícula de las estudiantes es especialmente baja en tecnología, información y comunicaciones con solo 3% del total; ciencias naturales, matemáticas y estadísticas apenas acumula el 5% e ingeniería, manufactura y construcción se queda con el 8%.

Los datos apuntan a que la mayoría de las mujeres se deciden por carreras relacionadas a la educación, artes, salud, bienestar, ciencias sociales, periodismo, negocios y leyes.

Pxhere

La familia influye en sus decisiones

La poca demanda de las STEM entre las mujeres no es un fenómeno que sea único en México o Latinoamérica, se trata de una tendencia marcada en todo el mundo.

Es por lo que no solo el CIMAD ha intentado explicar este fenómeno, la Universidad Stanford también intentó dar con las claves del por qué hay pocas mujeres en el campo de las ciencias.

Ambas investigaciones descubrieron que algunos de los culpables son los prejuicios sociales y la influencia de la familia. Además, en este sentido, un estudio realizado por la UNESCO indica que las niñas en América Latina y el África subsahariana, por los estereotipos de género, pueden tener mayores retos para incluirse en carreras STEM.

Pero, no solo eso, en México, por ejemplo, la desigualdad de género en la educación y en el seno familiar es persistente, de acuerdo Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) 28% de los chicos tienen la expectativa de seguir una carrera como un profesional de las ciencias o ingeniería, comparado con 9% de las chicas.

Por otro lado, 26% de las chicas esperan seguir una carrera como una profesional de la salud, comparadas con un 13% de los chicos.

Entonces, ¿por qué sucede? El estudio sugiere que hay dos grandes barreras.

Factores individuales

Según el estudio del CIMAD existen dos barreras importantes que provocan este fenómeno. La primera se trata de factores individuales como la autopercepción, la eficacia personal y el interés por ciertas materias.

Esto se relacionan directamente con la percepción que tienen las niñas sobre su propia capacidad intelectual y desempeño en las ciencias. Estos factores están fuertemente influenciados por estereotipos de género que se adquieren en el proceso de socialización durante la infancia, como el simple hecho de decir que la ciencia “no es cosa de niñas”.

El estudio encontró que durante la escuela secundaria, por ejemplo, 31% de las niñas cree que los trabajos que requieren codificación y programación «no son para ellas». En la escuela preparatoria, ese porcentaje sube a 40. Para cuando están en la universidad, 58% de las niñas ya no consideran esos trabajos.

mujeres carreras ciencia tecnología | Business Insider México
Unsplash

Factores sociales

En un segundo nivel se identifican los factores sociales como la motivación por parte de los padres y profesores a que las niñas no se incluyan en materias STEM, muchas veces por la existencia de estereotipos de género, la influencia de los compañeros y la falta de modelos a seguir.

El estudio encontró que cuando, tanto padres como docentes, estimulan en las niñas el interés por las áreas STEM (que es el caso de aproximadamente 46% de las jóvenes en secundaria y preparatoria), éstas tienen más del doble de probabilidades de considerar estudiar carreras relativas a ciencias de la computación en la escuela secundaria.

Asimismo, en el entorno escolar se identifican factores como los materiales educativos, que muchas veces están diseñados con orientación de género; también influyen la falta de recursos y equipo para potenciar el interés en STEM entre las niñas, así como la escasez de experiencias de aprendizaje que les permitan aplicar el conocimiento en la práctica.

LEE MÁS: La universidad no debe ser el fin de tu preparación profesional – aquí te decimos por qué la educación en línea es una buena opción para ti

TAMBIÉN LEE: Formar mejores ciudadanos desde la niñez; así es como trabaja Educación para Compartir, una organización comprometida con el planeta

Descubre más historias en Business Insider México

Síguenos en FacebookInstagram y Twitter.