- Elon Musk retiró el martes su demanda contra OpenAI y su CEO, Sam Altman.
- Musk acusó a OpenAI de violar su misión sin fines de lucro cuando presentó la demanda en febrero.
- Pero abandonar el caso no significa que Musk esté enterrando el hacha con Altman todavía.
- ¡Nos vemos en TikTok!
Elon Musk retiró su demanda contra OpenAI y dos de sus cofundadores, Sam Altman y Greg Brockman, el martes; sin embargo, aún no se ha dado por vencido en su intento de ganar la carrera de la inteligencia artificial.
El voluble multimillonario presentó una demanda contra el fabricante de ChatGPT en febrero, acusando a OpenAI de violar su misión sin fines de lucro al asociarse con Microsoft. Musk cofundó OpenAI con su actual CEO, Sam Altman, pero dejó su junta directiva en 2018.
«Más sobre esto más adelante», dijo Musk sobre el retiro de la demanda a OpenAI el miércoles por la mañana.
Pero la decisión de retirar la demanda, apenas un día antes de que un juez considerara la solicitud de OpenAI de desestimarla, probablemente no sea una señal de que Musk está haciendo las paces con Altman.
Por un lado, Musk pareció furioso cuando Apple dio a conocer el lunes su asociación con OpenAI. Poco después del anuncio, Musk amenazó con prohibir los dispositivos Apple en sus empresas.
«Si Apple integra OpenAI a nivel de sistema operativo, entonces los dispositivos Apple serán prohibidos en mis empresas», escribió Musk en una publicación de X. «Esa es una violación de seguridad inaceptable».
Musk dijo esto a pesar de las garantías de Apple de que «las protecciones de privacidad están integradas para los usuarios que acceden a ChatGPT». El fabricante de iPhone dijo que OpenAI no podría rastrear las direcciones IP de sus usuarios ni almacenar sus solicitudes.
Los representantes de Musk y OpenAI no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios de Business Insider enviadas fuera del horario laboral habitual.
Musk no necesita la demanda para enfrentarse a OpenAI
Alejándonos de todo el drama, el objetivo de Musk con la demanda de OpenAI podría haber tenido menos que ver con ganar el caso y mucho más con arrastrar públicamente a Altman y OpenAI.
«Este tipo de demandas pueden sacar a la luz muchos trapos sucios y pueden ser una distracción importante que podría afectar sus operaciones diarias», dijo David Hoffman, experto en derecho contractual de la Universidad de Pensilvania, a Business Insider en Marzo.
Y por si sirve de algo, Musk parece haber pasado el periodo intermedio reposicionando sus empresas para la era de la inteligencia artificial.
Musk ha pasado los últimos meses presentando a los inversionistas su visión de Tesla como una «empresa de inteligencia artificial o robótica».
Además de adelantar un nuevo concepto de robotaxi, Musk también ha promocionado los robots Optimus de Tesla como «más valiosos que todo lo demás combinado».
«Si valoras a Tesla como una compañía automotriz, fundamentalmente, es simplemente el marco equivocado, y si haces la pregunta equivocada, entonces la respuesta correcta es imposible», dijo Musk en una conferencia telefónica sobre resultados en abril.
Luego, a finales de mayo, Musk reveló que su startup de inteligencia artificial xAI recaudó 6,000 millones de dólares (mdd) para su ronda de financiación Serie B, lo que le da una valoración total de 24,000 mdd. Esto convierte a xAI de Musk en la segunda empresa de IA más valiosa detrás de OpenAI, que está valorada en alrededor de 80,000 mdd.
Con las piezas de ajedrez en su lugar, Musk parece listo para enfrentarse a OpenAI. Ahora la pelota está en la cancha de Altman.
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