• Los CEO han pasado mucho tiempo amenazando con reemplazar con IA a sus trabajadores flojos.
  • Sin embargo, son justo ellos los reemplazables por la tecnología actual.
  • ¿No lo crees? Pregúntale a cualquier CEO que te defina su aporte a la empresa.
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Desde escritores y profesores hasta banqueros y abogados, la mayoría de los trabajos parecen estar listos para ser reemplazados por inteligencia artificial, con una notable excepción. El único trabajo que parece estar a salvo del auge de ChatGPT y otras tecnologías de IA es, curiosamente, el más costoso y fácilmente automatizable: el CEO.

Los directores ejecutivos han pasado mucho tiempo amenazando con reemplazar con IA a sus trabajadores flojos, con derechos y poco productivos, pero nunca parecen enfrentar el mismo nivel de escrutinio que otros empleados.

Sin embargo, al observar más de cerca, está claro que el papel del CEO no solo está roto, sino que podría ser fácilmente desempeñado por la tecnología actual.

Los CEO son los que más cobran por tareas que la IA podría sacar adelante sin problema

Los principales CEO de Estados Unidos ganan más de 300 veces más que el trabajador promedio, a pesar de que su deber principal es tomar decisiones de optimización fácilmente replicables basadas no en una comprensión real del negocio, sino en datos proporcionados por consultores.

Lejos de ser un contribuyente real a los resultados de una empresa, el movimiento del «CEO superestrella» de finales del siglo XX ha introducido una generación de ejecutivos que operan principalmente como cabeza visible sin una verdadera responsabilidad o rendición de cuentas.

La solución es bastante simple: debemos responsabilizar a los CEO de la misma manera que lo hacemos con sus empleados o disolver completamente el papel.

Un director ejecutivo debe contribuir de manera significativa, que sea medible y entregue un valor claro para la empresa. De lo contrario, argumentaría que el opaco papel del CEO debería ser el primero en ser reemplazado por inteligencia artificial.

La IA puede dar soluciones mucho más rápidas que un CEO

Un modelo de IA probablemente daría respuestas más rápidas, estaría en un estado continuo de auto-mejora, recibiría retroalimentación instantánea y proporcionaría el mismo tipo de «eficiencia operativa» por la que los actuales CEO reciben millones de dólares al año.

Como dijo el comediante Scott Seiss de manera concisa en una publicación de TikTok a finales de julio: «Reemplacemos a nuestros empleados con IA. Reemplacemos a nuestros CEO con IA. En realidad, la IA es demasiado avanzada para ese trabajo, todo lo que necesitas es una grabadora Fisher Price cargada con un mal montón de ideas».

A los CEO les gusta proyectar una imagen de invulnerabilidad; sin ellos, la empresa sin rumbo se desmoronará. «No puedes reemplazarme», grita la actitud, «soy demasiado valioso».

Entonces, ¿qué es exactamente lo que estos ejecutivos hacen a diario que crea tanto valor? Un estudio de Harvard de 2018 sobre 27 CEO intentó responder a esta pregunta.

Ya, en serio, ¿qué hace un CEO?

El informe final clasificó las diversas tareas de los ejecutivos en cubos que suenan impresionantes como «personas y relaciones», «revisiones funcionales y de unidades de negocio» y «estrategia».

Pero, profundizando, está claro que estas asignaciones vagas de tiempo están ocultando el hecho de que los ejecutivos tienen dificultades para decirte qué hacen para ganarse la vida.

La mayor parte del tiempo se derrocha en reuniones, hablando sobre «estrategia» y tomando decisiones importantes en lugar de contribuir de manera significativa a la organización, ya sea a través de la experiencia o la ejecución real.

Incluso cuando a los principales CEO se les da la oportunidad de explicar claramente el valor que aportan a una empresa, suena como un discurso de palabras vacías.

Los CEO modernos: caros y rolleros

El ex CEO de Procter & Gamble, A.G. Lafley, escribió un artículo en la Harvard Business Review en 2009 titulado «Lo que solo el CEO puede hacer». Una vez descrito como el «CEO más exitoso en la historia de P&G», Lafley ganó hasta 19.5 millones de dólares al año en su cargo.

Así es como describió el papel del CEO: «El CEO experimenta solo el mundo exterior de manera significativa a nivel empresarial y es responsable de comprenderlo, interpretarlo, defenderlo y presentarlo para que la empresa pueda responder de una manera que permita el crecimiento sostenible de ventas, ganancias y retorno total para el accionista (TSR, por sus siglas en inglés)».

También afirmó incorrectamente que «el CEO puede ver oportunidades que otros no ven» y «tomar decisiones y llamadas difíciles que otros no pueden tomar» gracias a que «la persona cuyo jefe no es otro empleado de la empresa».

Por menos de eso te ganas un regaño

¿Puedes imaginarte a un empleado de Procter & Gamble presentando una respuesta tan vacía y genérica a su gerente? ¿Puedes imaginarte decirle a tu jefe que lo que hiciste hoy fue «interpretar el mundo exterior significativo»?

Lafley parece resumir su posición y valor para la empresa como alguien que en realidad no hace ni tiene ninguna responsabilidad en nada, mientras que tiene más poder que cualquier otra persona en la organización.

Alternativamente, imagina preguntarle a cualquier modelo de IA ordinario que describa el trabajo de un CEO. Probablemente arrojaría algo mucho mejor que «equilibrar un rendimiento suficiente en el presente con una inversión necesaria en el futuro».

No es que los ejecutivos no puedan ser útiles para una empresa. Un CFO se enfoca en el flujo de efectivo, asegura el pago de impuestos y garantiza que los estados financieros estén a punto. Un director de seguridad se asegura de que los empleados no sean hackeados o garantiza la seguridad física de los trabajadores. En contraste, un CEO se ha convertido en un figura que toma decisiones basadas en impresiones con la ocasional reunión o aparición en los medios.

¿Reemplacemos a los trabajadores con IA? Empecemos por los CEO

No me malinterpreten: una empresa, en general, necesita un figura importante, y necesitas a alguien con una perspectiva de toda la empresa que pueda guiar una organización y tomar decisiones. Necesitas a alguien que defina la misión y luego mantenga a la empresa en esa misión.

Pero si el único papel del ejecutivo es tomar estas decisiones sin ninguna otra contribución o responsabilidad por los resultados, el papel pierde gran parte de su valor.

Los directores ejecutivos se han convertido en los «gerentes finales», tipos de «ideas» –desconectados como Elon Musk– que reciben crédito por cada gran éxito sin ser despedidos por un solo gran fracaso.

Sin conectar su salario desproporcionado con los resultados de sus decisiones, no hay motivo para tener un CEO.

Si el trabajo de un director ejecutivo consiste simplemente en tomar datos y regurgitar extrapolaciones que ofrecen «eficiencia», no puedo pensar en un papel más apropiado para la sustitución por IA.

El CEO que tiene paralizado Hollywood

David Zaslav, el CEO de Warner Bros. Discovery, es en gran medida la razón por la que las huelgas de Hollywood se han alargado durante meses. Zaslav, quien ganó 39 millones de dólares el año pasado, junto con los otros miembros de la Alliance of Motion Picture and Television Producers, ha ayudado a sacar hasta 5,000 millones de dólares de la economía de California (y de la industria del entretenimiento).

Y no es como si sus decisiones comerciales en su propia empresa estuvieran recibiendo altas calificaciones de los inversores: desde la fusión de Warner Bros. y Discovery en 2022, la capitalización de mercado combinada de la empresa ha caído 20,000 millones de dólares.

«Un ejecutivo que nunca ha tenido que contribuir directamente al producto que genera los ingresos para pagar su salario es el trabajo más fácilmente automatizable de todos los tiempos».

Quizás la parte más indignante de su liderazgo en uno de los estudios insignia de Hollywood es el hecho de que parece que nunca ha estado involucrado en el proceso de creación de una película, serie de televisión, podcast o cualquier otra empresa creativa.

¿Dónde quedó la pasión? ¿El amor a la camiseta?

Zaslav comenzó su carrera como abogado y ha pasado décadas trabajando en los medios de comunicación en diversas capacidades «estratégicas», pero su completa desconexión del proceso de la creatividad ha ayudado a prolongar esta costosa y dolorosa huelga.

Él y los otros jefes de estudio parecen creer que el entretenimiento es una mercancía que se puede automatizar y producir a voluntad. Desde la fusión, las decisiones creativas más notables del CEO han sido cancelar programas, retirar contenido de los servicios de streaming de la empresa y archivar películas ya terminadas, todo en nombre del ahorro de dinero.

Estas no son las acciones de un ejecutivo apasionado por la creación de entretenimiento de alta calidad que ganará los dólares del público; es el tipo de análisis numérico que podría hacerse alimentando una hoja de cálculo de Excel en un modelo de IA.

Un ejecutivo que nunca ha tenido que contribuir directamente al producto que genera los ingresos para pagar su salario es el trabajo más fácilmente automatizable de todos los tiempos.

CEO vs. IA: un trabajo ya automatizado que ejecuta un humano

Los ejecutivos que solo «toman decisiones», firman contratos o dan entrevistas mediáticas sin sustancia no están haciendo un trabajo; son software de productividad glorificado, una máquina de regurgitación apenas relevante construida desde un núcleo de privilegio y explotación.

Estos CEO no hacen el trabajo, simplemente consultan una base de datos de otros ejecutivos y trabajadores reales para tomar decisiones sin experiencia práctica o convicción real detrás de la decisión, como ChatGPT.

La diferencia es que cuando los CEO «alucinan», tiende a costar miles de empleos. Y casi todos esos anuncios de despidos hacen referencia a la eficiencia o a los «cambios necesarios», pero nunca mencionan el gasto más grande y estúpido de todos: un administrador público vagamente definido que gana más que cualquier otra persona en la empresa.

Los directores ejecutivos se han convertido en parte del complejo industrial de gestión, una sección entera de la economía para personas que no contribuyen en nada más que exigir que otros hagan su trabajo.

Para gestionar algo, primero hay que saberlo hacer

«La gestión» no es un trabajo a menos que tengas la experiencia básica en la cosa que estás gestionando a un nivel en el que realmente podrías hacerlo tú mismo.

El CEO de una empresa tecnológica debería poder programar, construir o diseñar. El CEO de una empresa de entretenimiento debería haber estado directamente involucrado en la creación de películas o programas de televisión exitosos.

Incluso llegaría tan lejos como para decir que el CEO de una aerolínea debería ser capaz de pilotear un avión o trabajar en múltiples turnos al año como asistente de vuelo. ¿Qué mejor manera de responsabilizar a un director ejecutivo que asegurarse de que realmente ejecute?

Un CEO debería ser alguien que tenga un papel activo en la generación de beneficios para el negocio, ya sea construyendo activamente la empresa o cerrando acuerdos y asociaciones que generarán esos ingresos.

Estos directores ejecutivos también deben ser responsables directamente de métricas reales y tener su salario vinculado directamente al éxito de la empresa, la satisfacción de los clientes de la empresa y la satisfacción de sus empleados.

Nada como tener al frente un líder capaz y entregado

Desde mi propia experiencia, las empresas prosperan (y los buenos trabajadores se quedan) cuando sienten que su jefe trabaja tan duro como ellos y puede expresar realmente lo que hacen en su día a día.

En mi propia vida dirigiendo una agencia de relaciones públicas tecnológicas, me hago responsable de nuevos negocios, de las presentaciones, la redacción y la capacitación en medios: los mismos trabajos que hacen las personas que trabajan para mí, porque ningún trabajo en una empresa está por debajo de su director ejecutivo.

Define lo que es un CEO, establece los términos de su éxito y luego responsabilízalos. Si no puedes hacer eso, no necesitas un CEO. O tal vez tu CEO necesita ganar un salario más modesto. O tal vez los directores ejecutivos deben temer mucho más perder sus empleos ante robots igualmente capaces.

* Ed Zitron es el CEO de EZPR, una agencia nacional de relaciones públicas en tecnología y negocios. También es el autor del boletín de tecnología y cultura «Where’s Your Ed At» y el presentador del podcast «15 Minutes in Hell».

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