- Este 6 de julio celebramos el aniversario 114 del nacimiento de Frida Kahlo, artista mexicana reconocida internacionalmente.
- Las pinturas de Kahlo a menudo se definen por eventos que sucedieron en su vida, como el accidente de autobús que sufrió en 1925 o su matrimonio con Diego Rivera en 1929.
- A continuación te mostramos una mirada a sus pinturas más icónicas.
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Este 6 de julio se festeja el aniversario 115 del nacimiento de Frida Kahlo, artista mexicana conocida por sus coloridos autorretratos.
Sus pinturas a menudo se definen por eventos que sucedieron en su vida: cuando era adolescente (en 1925) resultó gravemente herida en un traumático accidente de autobús; y en 1929 se casó con Diego Rivera, otro famoso artista mexicano. Su volátil matrimonio se vio empañado por el adulterio, los abortos espontáneos y las peleas.
El trabajo de Kahlo también es intrínsecamente mexicano, ya que representa las tradiciones indígenas y la cultura de la nación que tanto amó.
Hoy, las obras de la artista se exhiben en museos de todo el mundo, pero muchas de ellas residen permanentemente en el Museo Frida Kahlo en la Ciudad de México.
Para honrar su natalicio, recopilamos algunas fotografías de sus pinturas más icónicas.
“Autorretrato con collar de espinas y colibrí” (1940)
Kahlo es famosa por sus autorretratos. La mexicana una vez dijo: “Me pinto porque a menudo estoy sola y porque soy el sujeto que mejor conozco”.
“Yo y mis pericos” (1941)
La frente de Kahlo y su característica distintiva están representadas de manera prominente en todos sus autorretratos.
“La columna rota” (1944)
En 1925, Kahlo sufrió un terrible accidente de autobús, el cual la le rompió la columna vertebral, la clavícula, la pelvis y algunas costillas. La mexicana pasó meses recuperándose con un yeso de cuerpo completo.
“Hospital Henry Ford” (1932)
Durante el accidente, una barandilla de hierro atravesó el abdomen y el útero de Kahlo, dejándola estéril. Muchas de sus obras lidian con este tema.
“Frida y Diego Rivera” (1931)
Kahlo se casó con el reconocido pintor mexicano Diego Rivera en 1929. Indudablemente, él influyó en su estilo de pintura y la alentó a seguir su carrera como artista.
“Las dos Fridas” (1939)
La relación de Kahlo con Rivera fue volátil. Se cree que su pintura más grande representa su dolor después de perder a su esposo. En esta pintura, la Frida de la izquierda se rasga y expone su corazón.
“Mi nana y yo” (1937)
Kahlo se ha convertido en un ícono feminista, célebre por su representación de las mujeres, la forma y las experiencia femenina.
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