- El Chelsea FC puede volver a vender boletos para sus partidos.
- El club tenía prohibido hacerlo como por las sanciones del gobierno del Reino Unido contra su propietario, Roman Abramovich.
- El dinero de la venta de boletos podría destinarse a una organización benéfica que apoye a las víctimas de la guerra en Ucrania.
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El Chelsea FC tiene permitido vender nuevamente boletos para sus partidos, después de que el gobierno del Reino Unido modificó la licencia de funcionamiento del club.
Esta es la primera vez que esto sucede desde que el gobierno impuso restricciones estrictas a sus operaciones tras la sanción al propietario ruso Roman Abramovich.
Abramovich recibió sanciones tras la invasión de Rusia a Ucrania y desde entonces el club no podía vender boletos nuevos.
Con el cambio de licencia, los aficionados ahora podrán comprar entradas para los partidos de visitante, los de copa y los disputados por su equipo femenil. Además, los aficionados rivales también podrán asistir a duelos en el Stamford Bridge.
Sin embargo, el club todavía no puede vender boletos para sus partidos locales de la Premier League, a los que solo pueden asistir los abonados para la actual temporada.
El dinero de la venta de boletos para juegos locales no irá al club ni a a Abramovich. Será recaudado por la Premier League o la UEFA, de acuerdo con la liga, y distribuido a un tercero autorizado, que podría ser una organización benéfica que apoya a las víctimas de la guerra en Ucrania, informó BBC Sport.
Los ingresos de los tickets para los partidos de visitante irán al equipo anfitrión.
Esta medida significa que el Chelsea podrá vender boletos para los cuartos de final de la UEFA Champions League. El equipo londinense recibirá al Real Madrid el 6 de abril.
Lo mismo sucederá con la semifinal de la FA Cup contra el Crystal Palace, que se jugará en el Estadio Wembley el 16 de abril.
“Actualizaremos a los fans sobre el proceso de venta de entradas que seguirá el club a su debido tiempo”, dijo el Chelsea.
Abramovich —un oligarca ruso multimillonario que estrechó vínculos con Vladimir Putin, presidente de Rusia— puso a la venta el Chelsea tras la invasión de Ucrania.
Sin embargo, su intento de vender al club se detuvo cuando se congelaron sus activos.
Desde entonces, a la firma de inversión estadounidense Raine Group se le encomendó la venta del Chelsea. Sin embargo, debe esperar a que el gobierno del Reino Unido proporcione una licencia que permita realizar la venta.
Varios grupos han hecho ofertas por el club, incluyendo la familia Ricketts, propietaria de los Cubs de Chicago, y un grupo liderado por el magnate inmobiliario británico Nick Candy.
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