- Ángeles Ortiz es una de las atletas del deporte adaptado más conocidas de México.
- La lanzadora de bala es ganadora de tres medallas paralímpicas (dos de oro y una de plata) y actualmente es la número uno del mundo dentro de su disciplina.
- El próximo objetivo de la mexicana es participar en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2021, pero la desaparición del Fodepar complica su futuro.
- Business Insider México platicó en exclusiva con Ángeles Ortiz sobre su carrera deportiva, los retos que debe enfrentar para llegar a Tokio 2021 y que deben hacer los atletas ante un futuro tan incierto.
Ángeles Ortiz es una de las atletas del deporte adaptado más conocidas de México. Además de ser ganadora de tres medallas paralímpicas (dos de oro y una de plata), la lanzadora de bala actualmente es la número uno del mundo dentro de su disciplina.
El próximo objetivo de la nacida en Tabasco —pero que se considera veracruzana de corazón— es participar en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2021 y llevar a México nuevamente a la gloria.
Sin embargo, la desaparición del Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento (Fodepar) amenaza el futuro del deporte adaptado en nuestro país, ya que los atletas desconocen si tendrán dinero suficiente para continuar practicando su disciplina.
Ni hablar de participar en unos Juegos Paraolímpicos que se encuentran a la vuelta de la esquina.
Business Insider México platicó en exclusiva con Ángeles Ortiz sobre su carrera deportiva, los retos que debe enfrentar para llegar a Tokio 2021 y qué deben hacer los atletas para proteger sus derechos ante un futuro tan incierto.
La carrera de Ángeles Ortiz en el deporte adaptado comenzó tras un accidente
En 2004, Ángeles Ortiz estudiaba el último cuatrimestre de la carrera en Comercialización Internacional cuando sufrió un accidente que le cambió la vida. Un joven alcoholizado la arrolló y perdió una de sus piernas.
No obstante, ella no dejó que eso la derrotara y finalizó su carrera en muletas, obteniendo mención honorífica y entrando en el cuadro de honor.
La mexicana contó a Business Insider México que antes de su accidente practicó el lanzamiento de bala; pero después de éste tuvo que incursionar en el deporte adaptado aprendiendo a hacerlo desde el banco de lanzamiento.
Dos años más tarde, Ortiz ganó su primer competencia nacional en Colima. Aquí tuvo que tomar una de las decisiones más importantes de su vida: continuar como maestra en la carrera de Aduanas o concentrarse en el Centro Paralímpico Mexicano (ubicado en la CDMX) para dedicarse de lleno a su carrera deportiva.
“Mi papá me dijo: ‘Hija, ¡sigue tus sueños! Y si vas, ve por todas las canicas. Fórmate para que seas la mejor”, narró.
Ángeles llegó con sus maletas y ante ella se abrieron las puertas del deporte adaptado mexicano, en donde ningún atleta “llora por su discapacidad y hay mucha fortaleza para trabajar día a día por los sueños, metas y logros”, sin importar qué tan severa sea su discapacidad.
La lanzadora de bala recuerda que aprendió una de las lecciones más importantes de su vida: ser una guerrera todos los días sin importar las dificultades que se le llegaran a presentar.
“Cuando vi a gente tan fuerte, ese día deje de llorar por una pierna y dejé de quejarme. Tenía que ser una guerrera como los demás”, contó. “Me dieron una lección tan grande que callaron todos mis temores, dolencias y quejas”.
Hay que sacar el “valor mexicano”
Ortiz ganó su primera medalla de oro y rompió su primer récord del mundo para México en los Juegos Parapanamericanos de Río de Janeiro 2007. Dicha marca le dio un pase directo a sus primeros Juegos Paralímpicos, que se disputaron un año más tarde en Pekín, China.
“Me empecé a meter en la parte psicológica y me informé sobre la reglamentación internacional del atletismo para el deporte adaptado”, dijo. “Yo iba emocionada, pero también informada. Iba escaneando cómo iban mis rivales mundiales y conociendo cada vez más mi capacidad”.
La mexicana contó que llegó a la justa olímpica con una marca que sus entrenadores le dijeron que era suficiente para ganar una medalla; pero cuando se comparó con sus rivales, se dio cuenta que realmente estaba entre el octavo y noveno lugar.
“En ese momento sentí que el estómago se me congelaba, que el único pie que tenía se me ponía helado. Sentí que el piso se abría”, reconoció.
“Fue un momento tan determinante en mi vida. Me dije: ‘o sacas tu valor mexicano y luchas por lo que vienes a hacer aquí; o dejas que el miedo te paralice y no haces nada’”, agregó. “Todo lo que había entrenado, sudado y sufrido se iba a quedar ahí sin historia. Además, iba representando a todo un país”.
Con esa mentalidad, Ángeles sacó toda la adrenalina, corazón y valor mexicano para lanzar la bala con todas sus fuerzas. Al final, se llevó la medalla de plata y quedó a tan solo dos centímetros del oro.
Ese día, la lanzadora de bala —que en ese entonces era principiante— subió su marca casi 70 centímetros, cuando en promedio un atleta puede aumentarla solo entre 12 y 18 centímetros.
Ángeles Ortiz se convirtió en “La Leona”
Ortiz compartió que otra de las mejores experiencias deportivas que ha vivido a lo largo de su carrera fue durante los Juegos Paralímpicos de Londres 2012, a los que llegó con el récord del mundo.
La que podría haber sido una competencia sencilla terminó por convertirse en un mano a mano con la rival de Bulgaria, quien se encontraba lanzando en el sector continuó al de la tricolor.
En la semifinal, “ella lanzó el primer intento y rompió mi récord. Yo lancé mi primer intento y también se lo rompí”, y así sucesivamente, recordó Ángeles.
La lanzadora búlgara no pudo romper la marca de la mexicana en su tercer intento, quien nuevamente hizo historia con un nuevo récord al lanzar por tercera ocasión.
“Se rompieron cinco récords mundiales en una semifinal”, recordó Ortiz con emoción.
Ese día, la mexicana fue bautizada por la prensa británica como “La Leona”, ya que defendió el récord del mundo como toda una fiera.
Ángeles también representó a México en los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro 2016, en donde también se llevó la medalla de oro.
Ortiz luchó para que el Fodepar becara al deporte adaptado
El Fodepar era un fideicomiso público no paraestatal de inversión y administración que tenía como fideicomitente a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP); y como unidad responsable coordinadora a la CONADE.
El fondo fue creado en 1998 para brindar apoyo a los “mejores deportistas del país a través de becas, campamentos, equipo multidisciplinario, competencias, equipo deportivo, complementos e insumos médicos y calzado deportivo”.
Además, éste ayudaba a cumplir los objetivos del Programa de Cultura Física y Deporte del gobierno Federal, que busca beneficiar a la población mexicana a a través de estrategias de cultura física, deporte y alto rendimiento implementadas por la CONADE.
No obstante, los atletas mexicanos del deporte adaptado fueron becados por el Fodepar hasta 2011, tras obtener resultados exitosos en los Juegos Parapanamericanos de Guadalajara, de acuerdo con Ángeles Ortiz.
La lanzadora de bala fue una de las atletas que luchó para que sus derechos también fueran reconocidos, junto a la tenista de mesa Cristina Hoffman y la levantadora de pesas Amalia Pérez.
“Fuimos a Los Pinos, hablamos con el presidente (Felipe Calderón) y su esposa (Margarita Zavala). Llevamos todo el papeleo e hicimos trámites”, detalló.
“Tuvimos que explicar por qué nuestra medalla vale lo mismo, que son nuestros derechos y que también nosotros entrenamos múltiples horas al día, practicamos el juego limpio y defendemos el honor y la dignidad de un país”.
Según la Información sobre Fideicomisos, Mandatos y Análogos que no son Entidades, con Registro al 31 de diciembre de 2018 de la SHCP, el Fodepar apoyó a 299 atletas del deporte convencional, 21 del deportes adaptado, 700 del deporte nacional, 100 medallistas olímpicos y 81 paralímpicos.
Hasta dicha fecha, el fondo contó con una disponibilidad de 33 millones 449,765.41 pesos.
Los atletas no tienen nada claro con la desaparición del Fodepar
El 21 de octubre de 2020, el Senado de la República aprobó en lo general y en lo particular un dictamen que extiguió 109 fondos y fideicomisos públicos sin estructura orgánica, entre los que estaban el Fodepar.
El objetivo de esto es reasignar más de 68,000 millones de pesos (mdp) al presupuesto público para temas relacionados con la salud y programas sociales, informó Animal Político.
Previamente, el 6 de octubre de 2020, la Cámara de Diputados también aprobó el dictamen en lo general y lo particular, por lo que la decisión del Senado fue el último clavo en el ataúd de los fideicomisos.
El dictamen modificó cuatro artículos de la Ley de Cultura Física del Deporte, en donde se específica que los apoyos del fondo pasarán a manos de la CONADE, quien ahora será la responsable de gestionar todo el dinero.
Andrés Manuel López Obrador (AMLO), presidente de México, confirmó el 20 de noviembre —durante la entrega del Premio Nacional de Deportes 2020— que 900 deportistas y entrenadores continuarán recibiendo recursos económicos directamente del gobierno federal, “sin intermediarios”.
“No es una beca que tengan que cobrar mes con mes; es lo que les puede ayudar a tener lo básico en seis meses, en un año, y ustedes lo administren”, dijo el mandatario, de acuerdo con un comunicado de la CONADE.
Sin embargo, Ortiz dijo a Business Insider México que, hasta la fecha, los atletas mexicanos de alto rendimiento todavía no tienen claro cómo recibirán dichos recursos.
“No tenemos ni la mínima información. Nadie se ha tomado la molestia en explicarnos”, dijo. “Es como cuando avientas una pedradita y estrellas un cristal. Todo es sorpresivo y no sabes si agradecerles o mentarles la madre”.
De acuerdo con la lanzadora de bala, la CONADE comunicó a los deportistas que les depositará 240,000 pesos para 2021; sin embargo, en ningún momento específico si dicha cifra sería adicional al total que recibían con la beca del Fodepar o si será el único apoyo económico que obtendrán.
“Nosotros teníamos una beca por parte de un fideicomiso que se tabulaba con base en tus logros, como tener medallas de oro, plata o bronce”, explicó Ortiz.
“Si es un estímulo, ¡que bueno! Yo soy una de las firmes creyentes de que el deporte debe ser apoyado en todos los niveles. Sin él, muchos no pueden incursionar o hacer deporte porque no tienen como hacerlo. O comen o hacen deporte”, dijo.
“Lo que no me parece muy bueno es que me quiten para repartir ese recurso, cuando me he esforzado durante más de 15 años. He trabajado muy duro para tocar todos los podios y dejar a México en lo más alto”, agregó.
Los atletas mexicanos no saben qué pasará de cara a Tokio 2021
Ángeles Ortiz compartió a Business Insider México que practicar lanzamiento de bala adaptado es muy costoso; sin embargo, no dio una cifra exacta de la inversión que se tiene que hacer para competir en dicho deporte de manera profesional.
Además de costearse los entrenamientos, dietas, equipo, terapias físicas, transporte y viáticos diarios, los atletas de alto rendimiento que aspiran a participar en unos Juegos Olímpicos o Paralímpicos también necesitan recursos para pagar campamentos de preparación.
Los fogueos competitivos son indispensables para que los deportistas puedan dar su máximo rendimiento en la justa olímpica. Al no saber si contarán con el suficiente apoyo económico para 2021, los resultados de los mexicanos en Tokio se encuentran comprometidos.
La mexicana reconoció que si este año solo recibe 240,000 pesos de la CONADE (menos del 50% de lo que obtenía con la beca del Fodepar), su camino a los próximos Juegos Paralímpicos será incosteable.
“Soy de una clase trabajadora y del esfuerzo. Yo no tengo padrinos políticos ni familia con dinero. No soy millonaria y tampoco le he robado a alguien”, dijo.
“De ninguna manera podría costearme la carrera, sobretodo si no me proporcionan lo que por derecho me he ganado”, añadió.
Ortiz se prepara para Tokio 2021 “como puede”
Ángeles consiguió su pase a Tokio 2020 tras ganar la medalla de oro y conseguir la marca número uno en los Juegos Parapanamericanos de Lima y en el Campeonato Mundial de Atletismo Adaptado, ambos celebrados en 2019.
No obstante, la justa olímpica se pospuso un año por la pandemia del Covid-19, por lo que ella cree que tendrá que reclasificar para participar en 2021.
Desde marzo de 2020 (cuando comenzaron los confinamientos en México por la pandemia), Ortiz ha entrenado como puede y con lo que tiene.Ella también lleva meses luchando por tener un entrenador personal, uno de sus derechos por ser ganadora de medallas paralímpica.
“Tampoco tenía el apoyo de un auxiliar. Acaba de venir uno hace dos semanas, después de tanto luchar y pelear; pero estuvo 15 días y se fue”, contó. “Me mandaron otro por parte de la federación, pero son gestiones larguísimas para conseguirlo”.
Todo lo anterior no ha impedido que Ángeles siga preparándose para alcanzar otro podio en Tokio. En los últimos meses, ha trabajado con mancuernas que compró en un supermercado, balones medicinales que tenía desde hace muchos años y con su propio peso.
Ortiz también recibe un entrenamiento por videollamada de su amiga Xiomara Rivero, quien es entrenadora de lanzamiento de bala para la Federación de Cuba.
“No he podido lanzar desde mi banco porque no tengo quien me apoye que sea experto de bala. Eso ya lo sabe mi entrenadora. Obviamente, está preocupada y nerviosa; pero se está haciendo lo mejor que se puede con lo que se tiene”, platicó.
Por otro lado, la mexicana recibió un patrocinio de parte de un gimnasio de Boca del Río, Veracruz; puede entrenar en sus instalaciones sin pagar la membresía.
La marca D3 también le patrocina rollos de kinesiotape (un vendaje neuromuscular) que le sirve para desinflamar sus codos, hombros, brazos y espalda tras los entrenamientos.
El deporte adaptado en México necesita de la iniciativa privada como aliado
Ortiz reconoció que el apoyo de la iniciativa privada podría ser una respuesta para el dilema que actualmente enfrentan los atletas del deporte adaptado en México.
“Pero dime, ¿en este tiempo de pandemia quien te patrocina? Además, el deporte adaptado en ocasiones no es visto como si fuera una disciplina deportiva”, cuestionó.
La mexicana cree que para que esto cambie es importante que las empresas se sensibilicen con el tema de la inclusión.
“No estamos culturizados ni preparados. Hay muchísimas barreras estructurales en todos lados. Si a eso le sumamos que somos guerreros de vida, creo que ahí es donde la iniciativa privada tiene que poner un poquito de atención”, dijo.
Ortiz pidió a la iniciativa privada dar un voto de confianza al deporte adaptado de nuestro país, ya que en él encontrarán mensajes de vida con base en historias de superación personal.
“Así como somos buenos para ganar medallas, también somos buenos para promover sus marcas”, agregó. “Necesitamos que nos apuesten un poquito para poder hacer alianza con ellos”.
El deporte adaptado en México necesita de unión
El camino a Tokio 2021 está lleno de obstáculos. ¿Habrá recursos económicos suficientes para poder llegar a la gloria olímpica? Hasta el momento, no hay nada claro.
Ángeles cree que para cambiar esto, los atletas del deporte adaptado tienen que unirse y alzar la voz por sus derechos.
“Nosotros tenemos que actuar con dignidad. No podemos seguir callando, agachando la cabeza ni permitir que hagan con el deporte adaptado lo que quieran, como hasta ahora”, recalcó.
“Al final, somos los que representamos a México y los que nos partimos el alma todos los días, durante muchos años, para seguir adelante y sacar a nuestro país en el deporte”, dijo.
“Nadie puede arrebatarte tus sueños ni quitarte esa luz que tienes. A esa meta solo llegarás con disciplina, trabajo limpio y esfuerzo”, finalizó.
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