- En 2012, CIBanco incorporó el elemento sostenible en su ADN al cumplir con los estándares más importantes para la gestión de riesgos ambientales y sociales del sector.
- Consolidado como El Primer Banco Verde de México, ofrece productos que impactan en la reducción de emisiones e impulsan el consumo responsable de recursos.
- Esta institución financiera se rige bajo una estrategia verde. Así, el principal estandarte es una regla de tres pasos: reducir, reutilizar y reciclar.
Hace 10 años la banca mexicana se pintó de verde gracias a CIBanco. Esta institución financiera, presidida por Jorge Rangel de Alba Brunel, hizo historia al convertirse en El Primer Banco Verde de México, tras suscribirse a los Principios de Ecuador.
Hoy, mientras el sector sigue en plena transformación, la entidad ya está preparando sus próximos pasos para continuar respondiendo a las expectativas de sus clientes, quienes entienden cada vez más el valor de la sustentabilidad como su modelo de vida.
Así, para ser un banco verde, la sustentabilidad no sólo debe formar parte del modelo de negocios. Ésta debe ser el centro de todas sus estrategias.
Y para ello, CIBanco se pinta solo. En 2012 incorporó el elemento sostenible en su ADN al cumplir con los estándares más importantes para la gestión de riesgos ambientales y sociales del sector. De esta forma se convirtió en un agente de cambio responsable de su entorno.
“Hace una década, las autoridades financieras mexicanas nos dieron la oportunidad de iniciar como institución de banca múltiple, después de llevar 34 años como casa de cambio. Desde ese momento, hemos asumido el compromiso de impulsar una cultura verde, innovando en nuestra gama de productos y servicios. Esto nos diferencia de la competencia“, explica Jorge Rangel de Alba Brunel, presidente del Consejo de Administración en CIBanco.
Dentro de las acciones que el banco ha implementado para cumplir este objetivo es crear el Comité de Sustentabilidad. Este órgano de asesoría independiente, conformado por cinco especialistas, se encarga de fomentar la mejora continua de servicios financieros verdes.
Entre ellos se encuentran productos como CIPanel Solar y CIAuto Verde. Ambos, juegan un papel importante en el desarrollo del mercado de financiación sostenible.
Servicios verdes para clientes responsables
En el proceso de consolidarse como El Primer Banco Verde de México, CIBanco ha mejorado su abanico de productos sustentables. Además, el mercado evoluciona a pasos agigantados.
“La gente entiende mucho más la relevancia del tema de la sustentabilidad. En esta década, hemos identificado que aquellos clientes que optan por nuestros productos verdes son mucho más responsables, lo que conlleva una mejor cartera”, refiere Rangel de Alba Brunel.
En este sentido, ofrecen productos que impactan en la reducción de emisiones e impulsan el consumo responsable de recursos. Pero también, el banco utiliza tarjetas biodegradables y otorga beneficios a los clientes que privilegian la sustentabilidad.
Jorge Rey Gehrke, director de Sustentabilidad en CIBanco, detalla que las tarjetas están elaboradas con BioPVC. Este PVC 100% oxibiodegradable, después de cumplir su ciclo operativo, permite una degradación más amigable con el medio ambiente.
“La sustentabilidad es parte de nosotros —asevera—. En un mundo tan cambiante, en el que las exigencias del mercado cada vez son mayores, la respuesta para seguir vigente en la industria es adoptar un verdadero compromiso. Porque no sólo se trata de autonombrarse banco verde, sino de convertirlo en parte de su ADN”.
CIBanco reduce, reutiliza y recicla
En CIBanco, la sustentabilidad se toma en serio. Se actúa con responsabilidad hacia los clientes, accionistas y colaboradores.
En este sentido, la institución financiera se rige bajo una estrategia verde. Así, el principal estandarte es una regla de tres pasos: reducir, reutilizar y reciclar, con la finalidad de disminuir el impacto al medio ambiente.
Todo inicia con la disminución del consumo de bienes y recursos. Posteriormente, se busca darle una segunda vida a aquellos elementos que se han utilizado con anterioridad, con esto también se ahorra en costos. Finalmente, los objetos que ya cumplieron su vida útil, se destinan a espacios donde rescaten la materia prima para generar nuevos productos.
“En un momento fuimos innovadores, lo que complicó interna y externamente que se entendiera el valor de la sustentabilidad”, recuerda Rangel de Alba Brunel.
Sin embargo, actualmente las cosas son distintas. Hay un compromiso tangible dentro de la banca mexicana en ser sustentables. La industria es cada vez más empática y se transforma digitalmente para atraer a las audiencias más jóvenes.
“Sabemos que el mundo se transforma, que es necesario evolucionar, por ello siempre estamos innovando. Queremos seguir siendo ese banco mexicano que lidera en el tema de la sustentabilidad, en el que nuestros colaboradores y clientes se sientan arropados y, sobre todo, que se preocupa por mejorar su calidad de vida”, concluye el presidente del Consejo de Administración en CIBanco.
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