• Green Bank, West Virginia, es conocida como la ciudad más tranquila de Estados Unidos debido a la prohibición del servicio celular y WiFi.
  • Los aparatos electrónicos que emiten una frecuencia que puede interrumpir el trabajo de su observatorio han sido prohibidos.
  • En un nuevo libro, el autor Stephen Kurczy analizó cómo los niños evitan la prohibición e incluso se destacan en STEM.

En Green Bank, Virginia, donde el WiFi está prohibido y usar mucha tecnología se considera un delito, un estudiante fue sorprendido hackeando la computadora de un maestro para conectarse, una medida que se castiga con una multa de 50 dólares.

Con 250 habitantes, esta es conocida como la ciudad más tranquila de Estados Unidos debido a su falta de conectividad obligatoria, diseñada para proteger el trabajo del Observatorio Green Bank.

Que no exista tecnología es necesario para que el radiotelescopio orientable más grande del mundo detecte las ondas de radio emitidas por estrellas y púlsares en el espacio. 

El trabajo del observatorio está protegido por una ley conocida como Ley de Zonificación de Radioastronomía, introducida en 1956 y que restringe el uso de cualquier electrónica o radiofrecuencia que pueda interferir con el telescopio.

Pese a la falta de tecnología, los estudiantes sobresalen en STEM

Green Bank aparece en un nuevo libro, «The Quiet Zone: Unraveling the Mystery of a Town Suspended in Silence» de Stephen Kurczy, autor y periodista publicado anteriormente por The New York Times y The Economist.

Durante tres años de investigación, Kurczy observó cómo los estudiantes sobresalían en materias STEM a pesar del acceso restringido a la tecnología.

En Green Bank Elementary-Middle School, los maestros no pueden usar pizarrones «inteligentes» en clase y toma semanas hacer evaluaciones en línea. 

La primera vez que Kurczy visitó la escuela, cerca del observatorio, un estudiante fue sorprendido creando un punto de acceso WiFi en la computadora de un maestro, lo que está prohibido porque viola las reglas de La Zona Silenciosa.

«Me dio la impresión de que no era la primera ofensa del estudiante», escribió Kurczy. 

«Él rápidamente confesó saber cómo crear un punto de acceso con las computadoras de la escuela; también a acceder a redes sociales».

Donde el WiFi está prohibido, los celulares solo sirven como calculadora, linterna o brújula

Las reglas son más estrictas dentro de un radio de 16 kilómetros del observatorio de Green Bank. 

En el condado de Pocahontas, de solo 8,000 personas, aproximadamente la mitad estudiantes no tiene internet en casa.

La escuela secundaria del condado de Pocahontas está lo suficientemente lejos de Green Bank para tener WiFi, pero solo los administradores escolares pueden usarlo. 

Un maestro le dijo a Kurczy que los estudiantes pagan hasta 20 dólares por códigos WiFi, ofreciendo una conexión temporal.

Algunos estudiantes conducen hasta el final de su calle, a la casa de un amigo o a una gasolinera, a una hora de distancia, en la ciudad más cercana, en un intento de consultar las redes sociales o descargar una actualización del sistema operativo. 

Según Kurczy, la mayoría de los niños tienen teléfonos inteligentes, pero solo usan funciones como la linterna, la brújula o la calculadora.

Hay algo que decir a favor de menos distracciones: el observatorio es la clave para la educación STEM

«Hay todo tipo de formas en las que este observatorio es un socio educativo sólido», dijo Kurczy a Insider. 

El club de robótica de Green Bank Elementary-Middle School está dirigido por el director del observatorio, un astrofísico y su esposo, ingeniero de software. 

La escuela ganó el campeonato estatal en dos competencias recientes y quedó en primer, segundo y tercer lugar en competencias regionales.

Su club STEM obtuvo la victoria en una competencia estatal para una propuesta de aplicación para advertir a los residentes sobre inundaciones repentinas, basándose en datos meteorológicos. 

El miembro Mathias Solliday, que vive en Green Bank, ganó personalmente una tableta y el club recibió 5,000 dólares en premios. 

«Ganaron la competencia de aplicaciones en todo el estado, aunque aquí no hay servicio celular, aunque Matthias no tenía un teléfono inteligente, todavía pudieron ganar esta competencia», dijo Kurczy. 

«En la mente de Mathias, la falta de servicio de telefonía celular, las restricciones en la tecnología, no lo estaban reteniendo en absoluto».

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