- Después de los tamales, muchos buscan volver a una vida más fitness y saludable.
- Los mexicanos tenemos a principios de febrero un último pretexto para caer en excesos y es entonces cuando buscamos volver a la vida saludable.
- Un buen consejo para iniciar es tener muy claros tus objetivos.
Ya pasó el primer mes del año y aunque el propósito era bajar de peso, a muchos se nos atravesó el 2 de febrero. El Día de la Candelaria es el momento en que los mexicanos celebramos con una tradicional tamaliza, algo que nos hace tambalear en nuestro camino a una vida más saludable.
Pero no solo en febrero los tamales nos dan tentación, ya que este platillo mexicano es uno de los desayunos favoritos de los mexicanos. De acuerdo con un estudio de Kantar, durante 2020, cada semana en promedio el 32% de los mexicanos consumió tamales.
Entonces ¿qué hacer para regresar al buen camino y no caer en tentaciones como las envueltas en hoja de maíz? La respuesta parece sencilla, volver a comer bien y regresar al ejercicio; pero aunque sea fácil de leer, es complicado de cumplir. Primero, es importante que te mentalices que estos dos conceptos, más allá de ser una obligación o un objetivo de año nuevo, son hábitos que vale la pena poner en práctica para verse y sentirse mejor.
Sabemos que iniciar una vida de ejercicio y alimentación balanceada parece tortuoso; hay ocasiones que la ansiedad, el estrés o los malos hábitos logran que nos vayamos por la salida fácil y consumamos alimentos muy ricos pero que no son los más nutritivos, e incluso que pueden ser muy altos en grasas.
Esto puede ser una bola de nieve que nos hace pensar que tendremos que hacer el doble o triple de ejercicio y eso nos pone en mala posición para cumplir nuestros objetivos.
Es por ello que los expertos de DEPORPRIVÉ, plataforma de comercio electrónico deportivo, compartieron con Business Insider México algunos consejos para poder regresar a una vida más saludable y olvidarte de los malos hábitos alimenticios.
1. Ten claros tus objetivos y planifica tus comidas
Cuando las personas tienen como objetivo perder grasa o peso, deben bajar el consumo de sus calorías; sin embargo, cuando buscan ganar masa muscular se requiere consumir calorías por encima de la gesta, entonces ¿tu cuerpo qué es lo que necesita?
A lo mejor lo que vas a decidir es cuidarte debido a que tienes padecimientos como colitis, problemas hormonales u obesidad, o solo porque quieres llevar una vida saludable para prevenir estas enfermedades; como sea, lo importante será tener claridad en los objetivos.
Después de definirte, deberás planear lo que vas a comer durante toda la semana; de esta manera comprarás los ingredientes que necesites para cada platillo, evitarás comprar antojos y comida rápida por falta de tiempo.
Si tu día a día es muy ajetreado, procura preparar la mayoría de tus recetas el fin de semana o al menos la base para ellos, como caldo, verduras, o proporcionar las proteínas para tenerlas a la mano cuando las necesites y poder congelar el resto.
La planificación también te permitirá evitar comer de más, asegurarte que cada platillo esté balanceado en cantidad de proteína, verduras, carbohidratos y reducir el consumo de sal y grasas añadidas. Para este punto, puedes buscar la asesoría de un experto en nutrición.
2. Aprende sobre los alimentos y el ejercicio
Disfruta la transición y el camino de aprender a comer, a ejercitarte y a vivir equilibradamente, es positivo que conozcas mejor sobre lo que llevas a tu boca, pero también sobre los ejercicios con los que te sientes más cómodo, con los que ejercitas más ciertos músculos o con aquellos que te crean un reto y te motivan a continuar tu disciplina.
No te sientas mal si comienzas con 15 minutos de ejercicio, tu cuerpo debe acostumbrarse y conocer ese cambio. Tampoco te atormentes por caer en antojos y mejor busca formas de comer una versión más saludable de esa botana.
3. Evita atracones
Uno de los peores hábitos alimenticios son los atracones de comida, sobre todo cuando no puedes comer durante varias horas o sufres de ansiedad y estrés. Toma en cuenta que comer de manera balanceada incluye porciones adecuadas para tu edad, peso y consumo energético y objetivos.
El régimen que debes seguir es el que se acomode a tus horarios, mismos que debes respetar para evitar que el hambre te ataque y te haga caer en tentaciones poco sanas.
Mide tus raciones, puedes comer algo que esté fuera de tu nueva alimentación, pero procura no consumirlo en las mismas porciones que antes, aún cuando sea tu platillo favorito. Si tu porción está bien constituida, no tienes por qué seguir sintiendo hambre y decirle no a un segundo o tercer plato evitará que tu estómago se recargue y ralentice tu metabolismo.
4. No fuerces tu cuerpo con más ejercicio del que puede hacer
Regularmente al iniciar un plan de alimentación, los expertos sugieren complementarlo con ejercicio, el cual está alineado a tus necesidades fisiológicas, entre otros puntos específicos que el especialista considerará.
Por ejemplo, como principiante, el objetivo no será realizar 40 abdominales, sino 10 abdominales de forma correcta; es decir, sin lastimar tu cuerpo y para trabajar la zona ideal para que tu metabolismo entienda el cambio.
Por ello, querer duplicar tu rutina de ejercicio o aumentar tiempo en cardio no siempre será productivo para la quema de grasa, al contrario, puede ser un factor clave para lastimar tu cuerpo. No condiciones tu tiempo de ejercicio a tu alimentación.
5. Ten disciplina
El ingrediente de oro en un estilo de vida saludable es la disciplina, tanto para hacer actividad física recurrente como para mantener hábitos alimenticios sanos. Definitivamente tendrás varios momentos en que las tentaciones llegarán y el cansancio o la sensación de hambre te harán flaquear, pero la convicción de alcanzar tus objetivos debe ser el motor que te mantenga fiel a tu meta.
Lamentarse por los excesos en los que caímos durante las fiestas y lo mucho que comimos no es suficiente, el siguiente paso debe ser fijarse un objetivo para recuperar los buenos hábitos y darnos cuenta de que no es imposible mantenerlos.
No te esperes a que inicie un nuevo año o “a que pasen los tamales”, sé constante en todo momento para que puedas disfrutar de lo que más te gusta, sin remordimientos.
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