- El trayecto al trabajo suele considerarse algo pesado, pero la pandemia ha demostrado que puede ser bueno para la salud mental.
- Dos expertos afirman que, para evitar el burnout, es necesario disponer de tiempo para cambiar de ritmo mental después del trabajo.
- También podrían ayudar los desplazamientos más largos de los oficinistas y los falsos desplazamientos de los trabajadores a distancia.
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Ese tedioso viaje que haces camino al trabajo podría ser bueno para la salud mental, según un estudio reciente.
Investigadores de las universidades Wayne State y Rutgers descubrieron que los desplazamientos al trabajo crean un espacio que permite al cerebro desconectar y recargarse.
De hecho, los investigadores sostienen que la pandemia puso de manifiesto la importancia de este espacio para prevenir el burnout.
«Creemos que la pérdida de este momento ayuda a explicar por qué muchas personas extrañaron su camino al trabajo», escribieron en The Conversation.
Los desplazamientos ofrecen tiempo para cambiar de ritmo
La gente necesita tiempo para cambiar mentalmente de trabajo a casa. Según los investigadores, esto ocurre en dos frentes: el distanciamiento psicológico y la recuperación psicológica.
El distanciamiento psicológico, según la definición de un estudio de 2007, indica que no solo te desconectaste de las llamadas y el correo electrónico del trabajo, sino que también dejaste de pensar en problemas u oportunidades relacionados con el trabajo.
En la recuperación psicológica, también te estás reponiendo mentalmente de la energía utilizada durante el día.
Sin estos dos procesos, las personas corren un mayor riesgo de burnout, según un estudio de 2014
Los desplazamientos más largos pueden ser más relajantes
Los viajes al trabajo pueden ofrecer ese tiempo para desconectar y recuperarse. En un estudio, los investigadores pidieron a 80 empleados universitarios que hablaran de las situaciones en las que podían desconectar mentalmente.
«Descubrimos que en los días en que los desplazamientos al trabajo eran más largos que la media, las personas manifestaban mayores niveles de distanciamiento psicológico del trabajo y estaban más relajadas durante el trayecto», explican los investigadores.
«Los desplazamientos más largos pueden dar a la gente más tiempo para desconectar y recuperarse» escuchando música o podcasts, por ejemplo.
Pero esto solo funciona si el trayecto no es estresante.
«En los días en que el camino al trabajo fue más estresante de lo habitual, los empleados declararon menos distanciamiento psicológico del trabajo y menos relajación durante el trayecto», afirman los investigadores en The Conversation.
Puedes intentar un falso camino al trabajo
Disfrutar de los desplazamientos al trabajo puede ser una manera de protegerse de los efectos negativos de tu empleo y prevenir el burnout.
«Para ayudar a mejorar el distanciamiento del trabajo y la relajación durante el trayecto, los viajeros podrían tratar de evitar quejarse sobre el día y centrarse, en cambio, en usos personalmente satisfactorios del tiempo de viaje, como escuchar música o podcasts, o llamar a un amigo», dicen en The Conversation.
Sin embargo, intentar llegar a casa lo más rápido posible cambiando de ruta cada día, sorteando el tráfico o subiendo a un tren lleno puede ser contraproducente.
«Para algunas personas puede valer la pena tomar la ‘ruta panorámica’ de vuelta a casa para evitar situaciones tensas al volante», escribieron.
Los trabajadores a distancia, que no suelen tener que desplazarse al trabajo, también pueden aprender a desconectar creándose un viaje falso.
«Nuestros hallazgos sugieren que los trabajadores a distancia pueden beneficiarse de crear su propio tipo de camino al trabajo para disponer de un espacio de recuperación y transición. Por ejemplo, un paseo de 15 minutos para marcar el comienzo y el final de la jornada laboral«, afirman los investigadores en The Conversation.
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