- Las reuniones híbridas pueden hacer que se pase por alto a los trabajadores a distancia.
- Karin Reed, autora de "Suddenly Virtual", dice que es importante crear una presencia virtual.
- Para ello, compartió sus consejos con Insider.
En marzo de 2020 la forma de trabajar de muchas empresas cambió para siempre. Con gran parte del mundo bloqueado, la mayoría pasó a ser trabajador a distancia, algunos por primera vez.
La forma en que una persona se desenvolviera dependía en gran medida de factores como edad, función laboral, situación personal y la calidad de su gerencia —pero en cierto modo, el campo de juego se nivelaba.
Los planes de trabajo híbrido que muchas empresas ponen cada vez más en marcha tras la pandemia cambiarán eso, según Karin Reed, coautora de «Suddenly Virtual: How to Make Remote Meetings Work».
Reed dice que hay una gran diferencia entre ser trabajador a distancia —como muchos lo eran al principio de la pandemia— y la forma híbrida que diversas empresas están planeando.
Con la gente dividida entre el hogar y la oficina, las empresas pasarán de una situación en la que hay un único modo de comunicación a otra en la que la gente se presenta desde diferentes lugares, y potencialmente utilizando diferentes medios de comunicación, dijo Reed.
Esto podría llevar fácilmente a que las reuniones se vuelvan confusas o a que la conversación se incline a favor de los que están físicamente en la sala. Y puede significar que los trabajadores a distancia sean pasados por alto.
Las primeras investigaciones indican que pueden ser sobre todo las mujeres las que salgan perdiendo. 31% mujeres preferirían trabajar en casa todo el tiempo. A comparación de los hombres, donde 23% querría ser trabajador a distancia, según datos de diciembre de Pew.
Adaptarse a la tecnología híbrida exigirá que empleados y directivos se replanteen su forma de comunicarse, explicó Reed a Insider. Fue periodista de radio y televisión y ahora asesora a directores generales en materia de comunicación.
Ella compartió algunos consejos principales para que si eres un trabajador a distancia no te pierdas en las reuniones híbridas.
1. Participa, incluso si tu jefe está dirigiendo
Los directivos tienen la responsabilidad de crear presencia para todos en la reunión, pero los asistentes también tienen la responsabilidad de conocer quién está en la reunión, dijo Reed.
Lo ideal es que, antes de lanzarse a cualquier tipo de entorno híbrido, haya un acuerdo de equipo para determinar las expectativas y desarrollar una política de turnos.
Sin embargo, independientemente de quién sea el director, es importante crear la mayor presencia posible para uno mismo, dijo Reed. Mantener la cámara encendida es un elemento básico.
«Si te incorporas a distancia, tener la cámara apagada hace mucho más probable que te pasen por alto», dijo Reed.
2. Alíate con un amigo
Si pueden, los trabajadores a distancia deben buscar un «compañero de habitación» que pueda actuar como defensor y tirar de ellos en las conversaciones, sugirió Reed.
Puede tratarse simplemente de un compañero de equipo o de un amigo que esté presente físicamente.
También es importante pensar en cómo se participa.
Esto no siempre tiene que ser verbal, dijo Reed. Utilizar funciones como el chat o «levantar la mano», también puede ayudar a potenciar tu presencia.
«Con suerte, el líder lo atenderá y lo entrelazará en el diálogo, pero tratar de participar de tantas formas como estén a tu alcance es una gran práctica recomendada», aconsejó Reed.
3. Comunica abiertamente tus emociones
Otro reto importante que tendrán que superar los trabajadores a distancia es la naturaleza «atrofiada» de la comunicación virtual. Ya que puede hacer más difícil leer el lenguaje corporal y otras señales no verbales, explicó Reed.
«Si eres trabajador a distancia, deja que la gente sepa cómo te sientes sobre algo. Si estuvieras en persona, probablemente podrías captar mejor ese matiz, pero lo virtual es un poco más difícil de leer», dijo Reed.
Verbalizar activamente tus emociones puede ayudar a la gente a entender mejor la intención de tu mensaje si no pueden percibir fácilmente tus señales no verbales.
4. Facilita que los demás te lean con una buena iluminación
Por último, Reed dice que hay que recordar que el aspecto de la pantalla es importante. Pero no todo es cuestión de vanidad, sino de tener respeto por tu interlocutor.
«A nosotros no nos importa tanto si aparecemos con la cara en sombra, pero hace muy difícil que tu interlocutor reciba tu mensaje en su totalidad», dijo Reed.
Además de asegurarte de que tu cara está iluminada de forma uniforme, otros aspectos clave en los que debes centrarte son la forma de encuadrarte —mostrar toda tu cara y gran parte de tu cuerpo para que la gente pueda leer tu lenguaje corporal— y asegurarte de que tu fondo no distrae demasiado.
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