- El método pomodoro implica trabajar durante 25 minutos y tomar un descanso de 5 minutos antes de comenzar de nuevo.
- Fue útil cuando me sentía desmotivada, pero el método era irritantemente rígido y agotador.
- Cuando era productiva y estaba en un ritmo, detenerme para el descanso de 5 minutos arruinaría mi flujo.
La técnica pomodoro es uno de los métodos de administración del tiempo más populares, y es retomada por todos, desde estudiantes universitarios hasta directores ejecutivos, por su capacidad para ayudar a concentrarse y evitar la fatiga mental.
En su forma más simple, la técnica pomodoro implica trabajar durante 25 minutos antes de tomar un descanso de 5 minutos. El intervalo se repite cuatro veces, antes de tomar un descanso de 20 minutos.
Pero cuando intenté usar la técnica durante una semana, descubrí que era una forma de trabajar extremadamente rígida que detenía mi impulso cada vez que se producía un descanso de cinco minutos, me impedía entrar en un ritmo durante los intervalos de trabajo de 25 minutos, y no me dio suficiente tiempo para recargarme.
La técnica de gestión de tiempo popularizada en los años 90
La técnica simple de gestión del tiempo fue popularizada por un libro escrito en los años 90 por el empresario italiano Francesco Cirillo, y su reputación se ha disparado desde entonces.
En la actualidad, hay docenas de aplicaciones y sitios web disponibles para ayudarte a organizar tu día en partes de 25 minutos, pero utilicé la aplicación gratuita para iOS Power Focus y el sitio web gratuito Tomato Timer.
Si bien la técnica fue útil para evitar que postergara las tareas que no me entusiasmaban y para ayudarme a concentrarme en tareas relativamente predecibles como el aprendizaje de idiomas, el método era frustrante cuando una tarea involucraba creatividad, resolución de problemas o pensamiento crítico.
Un gran problema para mí fue que los períodos de trabajo de 25 minutos eran demasiado cortos para entrar en una zona de productividad; para cuando terminé de desconectarme de las distracciones y me sumergí por completo en lo que estaba haciendo, ya era hora de tomar un descanso. Por el contrario, los descansos también se sintieron demasiado cortos como para apagar mi cerebro y recargarme. Después de algunos ciclos, me sentía exhausta, pero improductiva.
Cuando estaba investigando para una historia sobre escasez de medicamentos recetados, mi aplicación pomodoro me dijo que me detuviera y tomara un descanso unos minutos después de descubrir un interesante pozo de investigación en el que sumergirme. Aunque retomé mi trabajo después de unos minutos de descanso, mi entusiasmo inicial ya se había desvanecido.
La técnica de pomodoro puede ser rígida
La rigidez del sistema también me frustró. Aunque traté de ceñirme al horario pomodoro tanto como fuera posible, a menudo trabajaba durante los descansos porque no tenía ganas de detenerme. Otras veces, un pequeño descanso de cinco minutos no era suficiente para sentirme recargada; y, en cambio, me tomaba el tiempo de trabajo para salir a caminar.
Para cuando llegó el jueves, sabía que la técnica era un fracaso para mí. Dado que mi principal problema con la técnica pomodoro era que el intervalo de trabajo de 25 minutos era demasiado corto para entrar en un buen ritmo y los descansos de cinco minutos eran demasiado cortos para relajarme, probé una versión modificada en la que trabajé en intervalos de 90 minutos con descansos de 20 minutos.
Esto terminó siendo perfecto para mí: los 90 minutos me dieron suficiente tiempo para entrar en una zona y hacer un trabajo profundo; mientras que los descansos de 20 minutos me dieron suficiente tiempo para relajarme y sentirme con energía.
La actividad cerebral en los seres humanos
Puede haber una razón por la que preferí trabajar en intervalos de 90 minutos. Las personas pasan por períodos de alta actividad cerebral durante aproximadamente 90 minutos, seguidos de períodos de actividad cerebral de baja frecuencia durante aproximadamente 20 minutos; por lo que seguir los patrones naturales de tu cuerpo puede ayudarte a ser más productivo.
Si bien dividir mi día en partes de 25 minutos no funcionó; aún puedo volver a eso cuando estoy estudiando para mi clase de español o cuando estoy luchando con la procrastinación. Y dado que las aplicaciones de temporizador pomodoro a menudo son gratuitas, vale la pena intentarlo si aún no lo has usado.
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