• El acceso a la justicia es México es un tema delicado y con diversas complicaciones.
  • Esto es aún más difícil para las personas con discapacidad que requieren acudir ante las autoridades.
  • En entrevista, Carlos Rodea, quien forma parte del elenco de la puesta en escena donde se habla de este tema, comenta sobre lo que veremos.
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Imagina que eres integrante de un programa de televisión donde hablarán sobre el acceso al sistema de justicia para las personas con discapacidad y, de un momento a otro, los invitados al panel no asisten. ¿Qué haces?

Con esta peculiar situación inicia ‘Sí cabemos’, obra de teatro dirigida por Tanya Selman, donde se abordan no solo las dificultades para este grupo de la sociedad, sino que se muestra la labor de las personas facilitadoras, figura que impulsa la organización civil Documenta.

En entrevista para Business Insider México, el actor Carlos Rodea, quien forma parte del elenco, explica lo que veremos con esta producción.

Una obra por la inclusión

En la puesta en escena, se ahonda en las problemáticas que enfrentan las personas con discapacidad frente a los procesos penales en el sistema de justicia mexicano.

El guion, que también fue escrito por Selmen, es una comedia donde, a partir de la inasistencia de los ponentes al programa de televisión, el personal debe remediar la situación y continuar con el show.

«Dentro de esta situación, se abordan los temas y se muestran ‘sketches’ con casos reales de juicios donde las personas con discapacidad han formado parte y la manera en que no hay sensibilidad, que las leyes y los procesos penales no están escritos ni hechos para que (este grupo) los pueda atravesar y vivir de manera equitativa y en igualdad de condiciones», comenta Rodea.

A esto se suman la exposición de las personas facilitadoras de Documenta, que fungen como intermediarias entre los órganos de justicia y la gente con algún tipo de discapacidad.

Sensibilización

Si bien es una comedia, la producción de «Sí cabemos» se preocupó por forjar una obra donde cada persona que participa en ella estuviera sensibilizada con esta temática.

Durante aproximadamente dos meses, entre ensayos y estudio, recibieron asesoría de especialistas en la materia.

«No solo fue memorizar los textos o revisar la dirección de escena; se trató de reeducarnos. Cuando llegué tenía errores como decir ‘personas discapacitadas’ y nos enseñaron, a través de los expertos que estuvieron asesorándonos, que lo correcto es personas con discapacidad. (El otro término) suena a que es alguien que no puede, que cuenta con pocas capacidades para comprender y tomar decisiones. Al contrario, es alguien con una condición de vida distinta, pero no minoritaria», expone.

Además, agrega el actor, el texto busca que observemos algunos tópicos «tabú» para este grupo de la sociedad y notar que las barreras las ponemos nosotros, no los padecimientos de este sector.

«Como sociedad nos han enseñado que son personas que deben estar aisladas, que no son funcionales y hay que darnos cuenta de que es algo que debemos hablar con la misma cotidianidad con la que tratamos otros (asuntos); tenemos qué ajustarnos a ellos. Son (gente) que puede ser completamente funcional en igualdad de condiciones y nosotros (necesitamos) abrir nuestra mente, ser más empáticos y ‘empaparnos’ (sobre ello) siendo inclusivos», puntualiza.

Prueba de ello es la participación de Ricardo Selmen, actor y modelo con síndrome de Down y la actriz Karla César, quien interpretará la obra en la Lengua de Señas Mexicana (LSM).

¿Qué discapacidades se abordan?

En el caso de México, hay 20 millones 838,108 personas con alguna discapacidad, esto con base en el Censo de Población 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la discapacidad es la «interacción entre las personas que tienen algún problema de salud (por ejemplo, parálisis cerebral, síndrome de Down y depresión) y factores personales y ambientales (por ejemplo, actitudes negativas, transporte y edificios públicos inaccesibles y apoyo social limitado)».

Es muy probable que sin importar edad o género, tengan algún tipo de discapacidad a lo largo de su vida, por lo que estar sensibilizados respecto al tema es esencial.

Esto es algo que, de acuerdo con Rodea, se cumple debido a que tratan también las enfermedades relacionadas con la mente y emociones.

«Una de las discapacidades de las que habla la obra es la intelectual y psicosocial, que son los diagnósticos de personas que viven con ello y que, muchas veces, por no conocer al respecto, los alejamos», pondera.

Para tratar ese aspecto en especial, «Sí cabemos» retoma un caso de una persona que padece esquizofrenia.

«Hay un caso de una persona con un trastorno psiquiátrico; ve a la jueza como una bruja porque viste una toga (y se asusta) (…). Es fuerte que llegues a una audiencia y alguien grite. En ese instante, el facilitador dice ‘a ver, su señoría, le pedimos que se retire la toga y podamos dirigirnos a mi cliente con ciertas palabras y términos para que entienda’. La jueza (acata la instrucción) y la persona se tranquiliza», describe.

Una lección

El arte es una de las maneras en las que podemos pensar sobre las personas con discapacidad.

Para Rodea, una de las enseñanzas que deja la puesta en escena es ser más empáticos con ellos.

«La enseñanza más grande es que, desde nuestro rubros, sin importar a lo que te dediques, sí podemos hacer algo desde la empatía que necesitamos tener como sociedad. Entre lo mucho que podemos hacer, (es) simplemente estar informados y tenderle una mano a quien se siente aislado o discriminado; son acciones pequeñas (que les cambian la vida)», considera el actor.

Sumado a esto, está el comprender que las personas con discapacidad requieren un sistema de justicia con adaptaciones para ellas.

«Tenemos que humanizarnos para entender mejor que necesitan estos ajustes (en lo jurídico) para ser completamente funcionales dentro de (su nación)», subraya Rodea.

¿Dónde puedo ver «Sí cabemos»?

La obra «Sí cabemos» estará en cartelera a partir del 7 de noviembre en el teatro «Enrique Lizalde», que se localiza en Héroes del 47 número 122, colonia San Mateo, en la alcaldía Coyoacán de la Ciudad de México.

Se presentará los lunes de noviembre a las 20:30 horas. El costo del boleto es de 385 pesos, sin contar la comisión de Ticketmaster.

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