- El brillo económico de Shein convive con las constantes acusaciones de copias en sus diseños como las de Dr. Martens o Levi's Strauss
- Una investigación de The Wall Street Journal amplía la lista a más 50 demandas, entre las que se encuentran Ralph Lauren y Oakley.
- Pese a lo complejo de la coyuntura, la capacidad productiva de Shein y sus millonarias ganancias hacen que las demandas queden en segundo plano.
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El brillo de Shein siempre ha ido de la mano con sus sombras; entre ellas, destacaban las acusaciones de copia en sus diseños.
AirWair Internacional, fabricante de calzado Dr. Martens, fue la última en acusarle, pero antes lo hizo Levi’s Strauss. Todo mientras la guerra creativa contra Zara prosigue en Tiktok.
The Wall Street Journal informa sobre estas acusaciones; reseña que en 3 años hay al menos 50 demandas federales en Estados Unidos contra Shein o su matriz, Zoetop Business, por presunta infracción de derechos de autor o marca registrada.
En este sentido, la lista de demandantes incluiría diseñadores desconocidos, pero también a grandes firmas como Ralph Lauren u Oakley.
Algunos registros judiciales muestran que el grupo chino ha resuelto varias de estas demandas a través de acuerdos extrajudiciales, mientras que en otros, Shein alude a la responsabilidad de proveedores externos o niega las acusaciones.
Shein asegura que sus proveedores deben cumplir con la propiedad intelectual
Un ejemplo es la marca Stussy, quien demanda a Shein por vender productos con su logotipo. En una imagen adjunta puede verse a la venta una camiseta con Stussy estampado por 17.67 dólares frente a los 50 dólares por los que se puede adquirir los de la firma denunciante.
La firma, cuya valoración se eleva a los 100,000 millones de dólares, trataba de exculparse en un comunicado: «No es nuestra intención infringir la propiedad intelectual de nadie y no es nuestro modelo de negocio».
Matizaba así que sus proveedores que deban cumplir con la política de la empresa y certificar que sus productos no infringen la propiedad intelectual de terceros, tal y como recoge sus términos y condiciones.
La investigación refleja que las acusaciones de copia no son raras en la industria de la moda, pero las demandas contra Shein desde 2019 multiplican hasta por 10 las recibidas por algunos de sus rivales.
Las demandas pasan a segundo plano para Shein
Pese a lo complejo de la coyuntura, la capacidad productiva de Shein, que cubre 150 países en los que lanza 500 artículos nuevos cada mes, sumado a la legión de adeptos que aglutina hace que estas acusaciones queden en un segundo plano.
Y no es de extrañar por las cifras que se cree que genera. Si las estimaciones en 2020 hablaban de 10,000 millones de dólares, ahora apuntan a los 19,000 millones de dólares, según estimaciones de Credit Suisse.
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