Los resultados operativos oficiales de Pemex de 2020 confirman la difícil situación de la petrolera estatal y no permiten una visión muy optimista.
La producción de petróleo crudo cayó, contra la tendencia del primer trimestre del año, por 16º año consecutivo. El promedio fue de 1 millón 660 mil barriles diarios (incluyendo 20 mil de la producción con socios), un retroceso de 1% respecto a 2019. Fue la cifra de producción más baja en 41 años. Respecto al último año de la administración anterior, el descenso fue de 8%.
La meta originalmente planteada era 1.866 millones, es decir, la producción real se quedó corta por más de 200 mil barriles.
Además, la producción de diciembre (1.650 millones) fue 3% menor a la de diciembre de 2019, aunque fue la más alta en los últimos seis meses.
Los resultados de Pemex están alejados de las metas
La meta original para este 2021 era rebasar los 2 millones de barriles, algo que no ha sucedido desde hace cinco años. Este objetivo ya fue ajustado en el discurso oficial, a 1 millón 944 mil barriles, que todavía luce muy complicado de cumplir, ya que implicaría un incremento anual de 284 mil barriles, un 17%.
No es posible ir contra las leyes de la ingeniería petrolera y la geociencia. Para conseguir volúmenes de muy corto plazo se han sobreexplotado algunos yacimientos, acelerando su proceso natural de declinación, y ha aumentado la cantidad de agua en el crudo extraído.
En cuanto a la producción de gasolinas los resultados tampoco son alentadores. El promedio de 2020 fue de 186 mil barriles diarios, 8% menos que en 2019 y 10% inferior al del último año del gobierno anterior.
Sin embargo, hay que apuntar que en diciembre Pemex logró la cifra más elevada del segundo semestre, casi igual que en diciembre de un año anterior.
Demos un vistazo rápido a otros indicadores anuales de producción en su comparativo 2020/2019:
- La producción de diesel disminuyó 12%
- La de petrolíferos en general bajó 5%
- La de petroquímicos cayó 21%
- La de gas natural se redujo 1%
- La de gas LP fue inferior en 7%
El rubro de ventas en el mercado interno por parte de Pemex tuvo números sumamente negativos: las de gasolinas se desplomaron 21% y las de diesel 25%, a nivel nacional, en tanto las de gas LP disminuyeron 4% y las de gas natural, 18%. Ello significó un descenso en el valor neto de las ventas de 308 mil millones de pesos en productos petrolíferos.
Necesaria, mayor inversión en la rehabilitación de las refinerías
El único indicador donde hubo un incremento en la producción fue en el combustóleo, producto altamente contaminante y de menor valor económico, que la petrolera está colocando en las plantas de a CFE. El año pasado la producción fue de 176 mil barriles al día, 17% más que en 2019.
El problema es que en aras de los recursos que se están destinando a la construcción de la refinería de Dos Bocas, no se está invirtiendo lo suficiente en el programa de modernización del Sistema Nacional de Refinación, indispensable para elaborar productos destilados de mayor valor. Para este año hubo una reducción de más de 50% en el presupuesto y sólo se contempla invertir 7 mil millones de pesos.
Saldo favorable en la balanza comercial de Pemex
Aunque el volumen de exportación de crudo creció 1.5%, principalmente hacia Estados Unidos, que recibe más de la mitad del crudo exportado, Pemex captó 7,677 millones de dólares menos, como consecuencia de la crisis de los precios.
Por primera vez en cinco años, la empresa tuvo un saldo favorable en su balanza comercial de poco más de 3 mil millones de dólares, debido principalmente a que, ante la pérdida del mercado interno de gasolinas, las importaciones bajaron casi a la mitad. Sin embargo, éstas siguen representando un alto porcentaje de sus ventas totales: 68%.
Correo: eduardo.marin@eploc.mx
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