• La inflación es el aumento de los precios de los bienes y servicios en una economía a lo largo del tiempo.
  • También se podría considerar como una disminución en el valor de su dinero y poder adquisitivo.
  • Si bien una tasa de inflación baja y constante del 2% indica una economía saludable, una inflación alta o que cambia rápidamente puede volverse peligrosa.

¿Sientes como si tu dinero comprara menos de lo que solía comprar? No estás imaginando cosas. «Es la inflación», suspira la gente.

Probablemente tienes una idea de lo que significa la inflación. Simplemente es que el costo de las cosas está subiendo.

Pero, ¿qué es realmente la inflación, cuál es su origen y cómo afecta sus finanzas? Aquí encontrarás todo lo que necesita saber sobre este término económico cotidiano.

A medida que la economía se recupera, muchos economistas y legisladores están sonando la alarma sobre la inflación. Es más, Warren Buffet, el inversionista más famoso del mundo, advirtió que la inflación podría haber llegado para quedarse.

¿Qué es la inflación?

La inflación es un aumento en los precios de bienes y servicios en una economía durante cierto periodo.

Eso significa que tu dinero pierde poder adquisitivo: el mismo peso (o la moneda que uses) puede comprar una menor cantidad de productos. Por lo tanto, ahora vale menos. En otras palabras: con la inflación, tu dinero no llega tan lejos como solía hacerlo.

Ejemplo: si unas manzanas cuestan 10 pesos cada una, 40 pesos compra cuatro. Pero digamos que las manzanas se vuelven más escasas o más caras de cultivar. Y el próximo año, el tendero las pone a 20 pesos cada una. Ahora, 40 pesos compra solo dos de ellas. En términos de poder adquisitivo, el peso mexicano ha perdido efectivamente la mitad de su valor (al menos en lo que respecta a las manzanas).

Recuerda que el dinero moderno realmente no tiene valor intrínseco: es decir, es solo papel y tinta o —cada vez más— dígitos en la pantalla de una computadora. Su valor se mide en qué o cuánto puede comprar.

Si bien es más fácil comprender la inflación calculando bienes y servicios, generalmente es una medida amplia que se puede aplicar en todos los sectores o industrias, impactando a toda la economía. De hecho, el mandato del Banco de México (Banxico) es controlar la inflación a un nivel óptimo para fomentar el gasto y la inversión en lugar de ahorrar, fomentando así el crecimiento económico.

¿Cómo se mide la inflación?

La inflación se mide por la tasa de inflación, que es el cambio porcentual de los precios de un año a otro. La tasa de inflación se puede medir de esta forma:

  1. Midiendo los precios al consumidor: El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) mide la inflación a través de Índice Nacional de Precios al Consumidor. Este INPC mide el costo total de los bienes y servicios que los consumidores han comprado durante un periodo determinado, utilizando una canasta de bienes representativa, basada en encuestas. Los aumentos en el costo de esa canasta indican inflación, y el uso de una canasta da cuenta de cómo los precios de diferentes bienes cambian a diferentes tasas al ilustrar cambios de precios más generales.
  2. Midiendo los precios al productor: A diferencia del INPC, el Índice Nacional de Precios Productor (INPP) mide la inflación desde la perspectiva del productor. El INPP es una medida de los precios promedio que recibe el productor por bienes y servicios producidos en el país. Se calcula dividiendo los precios actuales que reciben los vendedores por una canasta representativa de productos por sus precios en un año base específico y luego multiplicando el resultado por 100.

El INPP es útil por su capacidad para pronosticar el gasto y la demanda de los consumidores. Pero el INPC es la medida más común y tiende a tener una influencia significativa en los pronósticos de precios sensibles a la inflación.

Precios reales versus nominales

Para hacer comparaciones de costos históricas significativas, y comparar manzanas con manzanas, por así decirlo, los economistas ajustan los precios por inflación.

Cuando escuches hablar de un precio del pasado en pesos «reales», significa que el precio se ha ajustado a la inflación. Cuando oyes hablar de los precios del pasado en pesos «nominales», significa que no se han ajustado.

¿La inflación es buena o mala?

La inflación es ciertamente un problema cuando se trata de efectivo disponible que no se invierte ni genera ganancias. Con el tiempo, erosionará el valor de su efectivo y cuenta bancaria. También es enemigo de cualquier cosa que pague una tasa de interés o rentabilidad fija.

Pero las personas con activos cuyo precio puede apreciarse, como una casa o acciones, pueden beneficiarse de la inflación y vender esos activos a un precio más alto.

En general, a los economistas les gusta que la inflación se produzca a un ritmo bajo y constante. Indica una economía sana: que los bienes y servicios se producen a un ritmo creciente y que los consumidores también los compran en cantidades cada vez mayores. En México, Banxico es el banco central mexicano, y ha establecido un objetivo de 3% anual, +/- 1 punto porcentual.

Cuando la inflación comienza a subir más alto que eso o cambia rápidamente, puede convertirse en un problema real. Es un problema porque interfiere con el funcionamiento de la economía, ya que la moneda pierde su valor rápidamente y el costo de los bienes se dispara. Los salarios no pueden mantenerse al día, por lo que la gente deja de comprar. Entonces, la producción se detiene o se ralentiza, y la economía puede caer en recesión.

¿Qué causa la inflación?

Existe una gran cantidad de literatura económica sobre las causas de la inflación y es bastante compleja. Básicamente, todo se reduce a la oferta y la demanda. Hay economistas que están a favor de políticas de gasto e inversión pública para intervenir en favor de un mayor crecimiento económico; se les conoce como keynesianos. Ellos enfatizan que son las presiones de demanda las más responsables de la inflación en el corto plazo.

  • La inflación impulsada por la demanda: ocurre cuando los precios suben debido a un aumento de la demanda en una economía.
  • La inflación de costos: ocurre cuando los precios suben debido a costos de producción más altos o una caída en la oferta (como por un desastre natural).

Otros analistas citan una causa diferente: un aumento en la oferta monetaria. Esto sucede dependiendo de cuánto dinero en efectivo o dinero fácilmente disponible hay en circulación. Siempre que hay una cantidad abundante de algo, esa cosa tiende a ser menos valiosa, más barata. De hecho, muchos economistas de la escuela monetaria creen que este es uno de los factores más importantes de la inflación a largo plazo; demasiado dinero en la oferta devalúa la moneda y cuesta más comprar cosas.

Tipos de inflación extrema

La hiperinflación se refiere a un periodo de tasas de inflación extremadamente altas, a veces más del 50% mensual durante varios meses. La hiperinflación suele ser causada por déficits públicos y la sobreimpresión de dinero. Por ejemplo, la hiperinflación ocurrió durante la Guerra Civil de los Estados Unidos cuando, tanto la Unión, como los estados confederados imprimieron dinero para financiar sus esfuerzos bélicos.

En un caso moderno, Venezuela está experimentando una hiperinflación, alcanzando una tasa de inflación superior al 800,000% en octubre de 2020.

En cambio, la estanflación es un evento raro en el que los costos y los precios crecen al mismo tiempo que una economía estancada, que sufre un alto desempleo y una producción débil. Estados Unidos experimentó estanflación en 1973-4, como resultado de un rápido aumento de los precios del petróleo en medio de un PIB bajo.

Cómo se controla la inflación

Los gobiernos pueden controlar la inflación a través de su política monetaria. Tienen tres palancas principales.

  • Tasas de interés: el aumento de las tasas de interés hace que sea más caro pedir dinero prestado. Entonces la gente gasta menos, reduciendo la demanda. A medida que cae la demanda, también lo hacen los precios.
  • Requisitos de reserva bancaria: el aumento de los requisitos de reserva significa que los bancos deben mantener más dinero en reserva. Eso les da menos para prestar, lo que reduce el gasto y conduce (con suerte) a la deflación, una caída en los precios.
  • Oferta de dinero: Reducir la oferta de dinero reduce la inflación. Hay varias formas en que los gobiernos hacen esto; un ejemplo es el aumento de los intereses pagados por los bonos, por lo que más gente los compra, entregando más dinero al gobierno y sacándolo de circulación.

Cómo vencer a la inflación con inversiones

Invertir para la inflación significa asegurarse de que tu tasa de rendimiento supere la tasa de inflación. Ciertos tipos de activos pueden vencer la inflación mejor que otros.

  • Acciones: No hay garantías con el mercado de valores, pero en general y con el tiempo, los precios de las acciones se aprecian a una tasa que generalmente excede la tasa de inflación. La mayoría de los fondos indexados también registran rendimientos mejores que la inflación.
  • Bonos indexados a la inflación: la mayoría de los bonos en el mercado pagan la misma cantidad fija de interés, cuyo valor se erosiona si la inflación es desenfrenada. Sin embargo, existen bonos en el mercado en los que se protege el valor dependiendo el aumento en los precios. Existen productos financieros como el Valor protegido contra la inflación del Tesoro de Estados Unidos (TIPS), en donde los pagos de intereses aumentan con la inflación (y disminuyen con la deflación).
  • Activos físicos y productos básicos: las inversiones alternativas, a menudo activos tangibles como el oro, los productos básicos, las bellas artes o los objetos de colección, funcionan bien en entornos inflacionarios. Lo mismo ocurre con los bienes raíces: Zach Ashburn, presidente de Reach Strategic Wealth, señala que «los rendimientos de las inversiones en bienes raíces se han mantenido a la par, o superado, las tasas de inflación durante muchos períodos en el pasado». Esto se debe a que estos activos físicos, a diferencia de los de papel, tienen un valor intrínseco y se venden y cotizan en mercados fuera de los financieros convencionales.

De manera más general, Asher Rogovy, director de inversiones de Magnifina, sugiere que es mejor evitar los activos nominales en favor de los activos reales cuando la inflación está en alza. Los activos reales, como las acciones y los bienes raíces, tienen precios que fluctúan o varían libremente. Los activos nominales, como los certificados de depósito y los bonos tradicionales, tienen un precio basado en el interés fijo que pagan y perderán valor en tiempos inflacionarios.

La conclusión financiera

La inflación significa que los costos y los precios están aumentando. Cuando lo hacen, significa que el papel moneda compra menos. Una inflación baja y constante es buena para la economía pero mala para sus ahorros. Ashburn dice: «Si bien tener efectivo disponible es importante para la seguridad financiera, el efectivo verá su valor consumido lentamente por la inflación con el tiempo».

Para combatir la inflación, no deje su dinero en efectivo debajo del colchón, ni en ningún lugar donde esté estancado. Tiene que seguir ganando.

En su lugar, intente estructurar su cartera de modo que proporcione una tasa de rendimiento, una que sea, con suerte, mejor que, o al menos se mantenga a la par, de la inflación, que casi siempre está sucediendo. Si lo hace, significa que las ganancias de su inversión realmente lo están haciendo más rico, en términos reales.

AHORA LEE: Hacienda quiere convencer a Banxico que recursos del FMI se destinen a pagar deuda

TAMBIÉN LEE: La industria automotriz mete la reversa a su recuperación —y las exportaciones caen en un bache en julio

Descubre más historias en Business Insider México

Síguenos en FacebookInstagramTwitterLinkedIn y YouTube.

AHORA VE: