• El propietario de un Tesla Model S 2013 se enfrentaba a una factura de 22,000 dólares para reparar una batería defectuosa.
  • Se asoció con varios YouTubers para atar 30 kilos de dinamita al auto y hacerlo explotar.
  • Los videos resultantes se han visto en conjunto 5 millones de veces.

Durante los primeros 1,400 kilómetros, el Tesla Model S 2013 modificado de Tuomas Katainen funcionó bien, dijo. Luego, fugas de agua y códigos de error lo obligaron a llamar a una grúa para llevarlo a reparar.

Después de aproximadamente un mes, el taller le dijo que la batería defectuosa necesitaba ser reemplazada; sin embargo, hacerlo tendría un costo de aproximado de 22,000 dólares (455,705 pesos). Además de la considerable tarifa, el trabajo tendría que ser autorizado por Tesla, que aparentemente no estaba muy entusiasmado con el trabajo anterior que se había realizado en el automóvil.

En lugar de pagar la mitad del costo de un nuevo Tesla para reparar uno viejo, Katainen decidió hacer algo diferente. Se puso en contacto con algunos de sus YouTubers favoritos, incluido Lauri Vuohensilta de Hydraulic Press.

Después de retirar la batería de iones de litio, los motores y otros componentes costosos, el equipo llevó el chasis a una vieja cantera en las afueras de Jaala, un pueblo remoto a unas dos horas de Helsinki, Finlandia.

Los expertos en demolición del canal de YouTube Pommijätkät (Bomb Dudes) ataron 30 kilos de explosivos de alta potencia al automóvil y rodearon el área con cámaras.

Cuando estaban terminando la configuración, un helicóptero se abalanzó y dejó caer un maniquí con la cara del director ejecutivo de Tesla, Elon Musk. Este fue amarrado al asiento del conductor del sedán condenado.

La multitud se retiró a un refugio contra explosiones, donde Katainen tuvo el honor de presionar el botón y enviar su antiguo paseo al Valhalla vehicular.

En el video, se puede ver una carga corriendo a lo largo del cordón de detonación, desencadenando una serie de detonadores que rompen el parabrisas y aflojan varios paneles de la carrocería.

Después de una breve pausa, las 14 cargas en forma de perro caliente estallan en una bola de fuego cegadora, enviando una onda de choque masiva que sale del automóvil.

Las imágenes de un dron que volaba a través de la nube de metralla y humo muestran una mancha gris y negra donde solía estar el automóvil.

Los videos de la explosión tienen un total de 5 millones de visitas.

La garantía estándar de un Tesla Model S cubre ocho años o 240,400 kilómetros; sin embargo, puede quedar anulada si alguien no autorizado por Tesla abre o repara la batería. La garantía tampoco cubre «daños resultantes de acciones intencionales», como hacer explotar el automóvil para un video de YouTube.

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