• El pianista brasileño João Carlos Martins perdió el uso de su mano derecha tras un asalto en 1995 en Bulgaria.
  • Durante muchos años, Martins tocó con una mano y un pulgar; sin embargo, también perdió el uso de la mano izquierda debido a una distonia focal.
  • Sin embargo, ha vuelto a interpretar sus sonatas favoritas gracias a unos guantes biónicos negros de neoprene hechos con una impresora 3D.
  • Los guantes fueron inventados por el diseñador industrial Ubiratan Bizarro, quien tomó la idea de tecnología usada en carreras de Fórmula 1.

El director y pianista brasileño João Carlos Martins no ha tocado con 10 dedos desde que perdió el uso de su mano derecha tras un asalto en 1995 en Bulgaria.

Martins tocó con las principales orquestas de Estados Unidos y Europa y grabó las obras completas para piano de Bach, pero sus heridas le impidieron continuar.

Durante muchos años, el pianista brasileño tocó con una mano y un pulgar; sin embargo, perdió también el uso de la mano izquierda debido a una distonia focal, una condición neurológica que afecta los músculos.

Ahora ha vuelto a interpretar sus sonatas favoritas de Bach gracias a unos guantes biónicos negros de neopreno hechos con una impresora 3D.

Los guantes, inventados por el diseñador industrial Ubiratan Bizarro, tienen varillas que hacen que los dedos se impulsen hacia arriba luego de presionar las teclas y permiten que el pianista continúe tocando.

«Cuando me mostró los guantes, bromeé diciendo que eran para boxear, no para tocar el piano», dijo Martins. «Poder usar los 10 dedos de vuelta 20 años después es un milagro para mí a los 80 años», agregó.

Bizarro dijo que tomó la idea de tecnología usada en carreras de Fórmula 1. Gastó menos de 100 dólares para fabricar el primer par de guantes para Martins y ahora los exporta a Europa bajo el nombre de su marca: Bionic Extender Gloves.

Con información de Reuters.

AHORA LEE: Conoce el EC-Eye, un ojo biónico que podría darte visión sobrehumana – con luz infrarroja incluida

TAMBIÉN LEE: Medicina digital: el poder curativo que no conocías de los videojuegos (parte I)

Descubre más historias en Business Insider México

Síguenos en FacebookInstagramTwitter y LinkedIn