- Estas dos generaciones representan a 4 de cada 5 desempleados en México después de la pandemia.
- Muchos han perdido la oportunidad de formar una carrera de largo plazo debido a las últimas dos crisis económicas.
- El debilitamiento del sector inmobiliario dificultará a nuevas generaciones adquirir su primer hogar.
La Generación Z y los Millennials no están en el primer lugar de la lista para recibir la vacuna contra el Covid-19. Pero sí estarán en el primer sitio para experimentar las consecuencias económicas de la crisis laboral que deje la pandemia en México. Entre algunas de estas consecuencias se encuentra una mayor inestabilidad que afectará su prospecto de vida en el largo plazo, advirtió la agencia de calificación crediticia Moody’s.
«En México, ellos representan a cuatro de cada cinco desempleados. Algunos Millennials perdieron la oportunidad de establecer carreras de largo plazo por las dos recesiones globales que experimentaron en la última década: la crisis financiera global y ahora el Covid-19″, advirtió su reporte sobre las consecuencias de la crisis laboral en el sector financiero de América Latina.
«Este doble golpe aumenta el riesgo de inestabilidad social y tiene el potencial de agravar vulnerabilidades sociales tales como la brecha en competencias. Este retraso generacional impedirá o retrasará la formación de un hogar, crecimiento de clase media y la acumulación de activos para el retiro», indicó la agencia.
México es uno de los países más afectados laboralmente por la crisis del Covid-19
Moody’s subrayó que México fue de los países más afectados por la pandemia laboralmente. En primer término, la tasa de desempleo subió de 3.4% al cierre de diciembre de 2019, a 5.2% en junio de 2020, justo después de dos meses de confinamiento sanitario. Pero este indicador solo mide la proporción de personas sin empleo y que activamente están buscando.
Pero al incluir a las personas que no tienen trabajo, y que no están buscando activamente —algo conocido como la tasa de desempleo extendida— esta proporción alcanza el 30% de la población, al cierre del primer semestre de 2020. Es decir, una de cada tres personas en México no tenían trabajo después de la primera ola de Covid-19, indicó Moody’s.
«Cuando las restricciones del confinamiento disminuyeron, la tasa de desempleo extendida disminuyó a 21%». Sin embargo, esta cifra es casi el doble que el promedio observado en el largo plazo. «Lo que implica un largo camino para una recuperación completa», explicó la calificadora.
Millennials y Generación Z tendrán una mayor dificultad para comprar su primera casa
Ante esta pérdida de ingreso, Moody’s advirtió que será más difícil para las nuevas generaciones comprar su primer vivienda. Este es un obstáculo para formar un patrimonio propio, lo que posibilita a algunas personas ascender a la clase media.
La crisis laboral —sobre todo en el empleo formal— impide que los trabajadores jóvenes puedan tener acceso a los apoyos del gobierno federal. Esto complica que las nuevas generaciones tengan acceso a beneficios del Infonavit o Fovissste.
De hecho, Moody’s espera que las ganancias en el sector inmobiliario se reduzcan. Esto debido a que el mercado se concentrará en construir vivienda en segmentos más costosos. En otras palabras, en aquellos segmentos que puedan pagarlas.
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