Simon Dalgleish

Simon Dalgleish

Simón Dice

Uno de los principales objetivos que tengo al escribir en este espacio es compartir algunos conceptos fundamentales del mundo inversionista; intento hacerlo de manera simple y sin necesidad de una formación profesional en finanzas o negocios para entenderlos.  Así podemos informarnos en el proceso de aprender sobre las herramientas que tenemos a nuestro alcance; esto nos ayuda a cumplir nuestras metas, proteger y crecer nuestro patrimonio y en general tener una vida con estabilidad financiera.

Un par de conceptos recurrentes al hablar sobre inversiones son la bolsa y las acciones; son puntos de referencia o ideas que vemos muy seguido en los medios; sin embargo, algo que he notado es que muchas veces tenemos poca claridad sobre qué significan o cómo funcionan. Cuando se habla de que la bolsa va al alza, o que las acciones están en sus niveles máximos, ¿a qué se refieren exactamente? ¿Por qué esa positividad no se ve reflejada en las finanzas del día a día? ¿Me afectan todos esos movimientos aunque no tenga acciones dentro de la bolsa? Vamos por partes.

La bolsa no es la economía

Alrededor del mundo, existen distintas bolsas de valores, tal vez las más famosas son las de Estados Unidos, como el NYSE y Nasdaq, la TSE de Japón o la FWB de Alemania. En el caso de México tenemos un par: la Bolsa Mexicana de Valores, cuyo índice es el IPC, y BIVA, una bolsa relativamente nueva.

Cada una tiene características que las diferencian de otras, pero en general son instituciones financieras privadas que negocian con los títulos de las empresas listadas en ellas, o dicho de forma más simple, facilitan la compra-venta de acciones al público. Las empresas de todo tipo de industria pueden financiar su operación al emitir acciones al público; a través de distintos y estrictos procesos regulatorios, una empresa pasa de ser privada a “pública”, al permitir su cotización en el mercado de valores. Es ahí donde los individuos u organizaciones podemos comprar una participación en estas empresas y tener beneficios, específicamente: 1) dividendos y 2) ganar por comprar acciones a cierto precio y venderlas más adelante en un precio mayor. Cabe aclarar que ninguno de los dos es 100% seguro, pero es bastante común.

Es frecuente ver en las noticias información sobre el alza o caída de las bolsas. Sin embargo, es importante señalar que no representan por sí mismas el estado de la economía; por lo tanto una subida de puntos en la bolsa no se traduce en mejores condiciones para las finanzas de los ciudadanos de a pie. Otros indicadores como el PIB, el índice de inflación, las tasas de interés o la tasa de empleo, también son citados a menudo por los medios como signos vitales del estado de la economía, además de los propios índices de las bolsas como el mencionado IPC, el Dow Jones de la NYSE o el DAX de Alemania; pero de ellos quisiera hablar más adelante y por ahora enfocarme totalmente en la bolsa.

¿Qué implican las caídas y subidas de sus puntajes?

En resumen, el alza o caída de una bolsa refleja el balance positivo o negativo del valor total de las acciones que cotizan dentro de esa bolsa o índice: cuando sube, no quiere decir que todas las empresas en él hayan ganado, sino que hubo un balance positivo durante la jornada.

Hay muchos elementos que afectan el valor de una acción, pero lo más importante es saber que la acción representa una proyección hacia el futuro de los ingresos y las utilidades que se van a generar y repartir, los cuales se ven afectados por las estimaciones de los analistas. Una acción no sube simplemente porque la gente piense que vale más, sino que es resultado de la aplicación de  diferentes técnicas de proyecciones y estimaciones; a partir de estos números, los analistas toman decisiones sobre las acciones que recomiendan comprar o vender.

Tomamos por ejemplo a las empresas que se dedican a la cosecha de plátanos, y suponemos que se empieza a ver que en los siguientes meses podría impactar su producción una sequía en una parte del país. Si la demanda por los plátanos se mantiene y la producción disminuye, lo más probable es que el precio por kilo subirá. ¿Entonces qué esperamos ver en la bolsa?  Las empresas productoras afectadas por la sequía venderán menos, porque no tendrán producto a vender, y sus acciones deberían bajar.  Mientras tanto, las empresas que producen en zonas no afectadas venderán su producción habitual a precios más elevados, y por ende, sus acciones deberían subir.

¿Afecta mi vida diaria?

La única forma en que los movimientos de la bolsa pueden reflejarse en lo inmediato en tus finanzas es si tienes acciones en ella, ya sea de forma directa o por inversiones en fondos que a la vez invierten en acciones. Eso sí: las pérdidas y ganancias en el mercado bursátil son la naturaleza misma de este ecosistema y no deberían preocuparte por sí mismas. Me explico:

Como mencioné antes, los movimientos en la bolsa se basan en proyecciones a futuro, las cuales son producto del análisis de muchos factores. Esto quiere decir que aunque ciertas noticias pueden impactar en los movimientos de la bolsa en el corto plazo, por lo general el desempeño a mediano y largo plazo es más predecible, y la historia nos indica que sobre el tiempo la economía siempre tiende a crecer.  Por supuesto, existen momentos de contracción que duran entre unos meses y hasta un par de años a lo máximo, pero en un periodo de 4 a 7 años, la historia sugiere que podemos tener bastante seguridad que la economía y las empresas seguirán creciendo y con ellos, los precios de sus acciones.

Esto se traduce en que lo último que deberías intentar es ganarle al mercado o ir contracorriente: a diferencia de lo que muestran las películas de Hollywood, no puedes volcar la bolsa a tu favor sólo por invertir en una determinada empresa, y mucho menos hacerte rico de un día para otro porque “le pegaste al gordo”. Que ‘puedes’, pues todo es posible, pero estadísticamente las probabilidades son casi nulas.  Los precios de compra y venta de acciones fluctúan mucho, incluso dentro de un mismo día, por lo cual la realidad es que es imposible hacer predicciones para ganar millones en un plazo corto.

¿Cómo deberías maneja la inversión en bolsa?

Como he recomendado en ocasiones anteriores, la principal clave es apostar al mediano y largo plazo. En un mercado tan dinámico como éste debes ir con la corriente, dejar que tus inversiones crezcan, hacer movimientos sólo cuando haya pasado un tiempo suficiente para evaluar su desempeño y tomar la decisión de reinvertir o diversificar hacia otros mercados e instrumentos. Tratar de vender todo cuando hay una mínima tendencia a la baja, o buscar comprar acciones de una empresa inmediatamente sólo porque comienza a subir su cotización no es una buena estrategia para tu dinero.

Una segunda recomendación es mantenerte al día informado con las noticias del mercado, leer las predicciones de los analistas y tener más de una fuente de consulta, pues mientras una calificadora puede tener una perspectiva negativa, otra puede estar viendo una oportunidad de mercado, y viceversa.

Mi tercer consejo es que si te interesa ingresar en la bolsa y eres nuevo en esto, recurras a intermediarios financieros autorizados y regulados por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores para comprar fondos indexados o ETFs, no acciones individuales. Personalmente puedo recomendarte Vanguard (éste lo utilizo yo),  Actinver, Kuspit y GBM+.

Con esto espero que tengas una mayor claridad de cómo funciona el mercado de valores; y que puedas tener nociones básicas que te ayuden a incursionar en él de la mejor forma. Nunca es malo tener una perspectiva más amplia de las oportunidades que tenemos disponibles para trabajar con nuestro dinero. En este sentido, mi objetivo será seguirte ayudando en esta tarea.

bolsa acciones | Business Insider Mexico

Las opiniones publicadas en esta columna son responsabilidad del autor y no representan ninguna posición por parte de Business Insider México.

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