• Siempre he tenido problemas para realizar un seguimiento de mis gastos de manera constante y atenerme a un presupuesto.
  • Mi papá y mi madrastra tienen un sistema de presupuesto que les ayudó a jubilarse temprano. Parecía abrumador, pero después de dejar que me mostraran cómo funciona, me di cuenta de que solo me tomaría unos 30 minutos cada mes mantenerme al día.
  • Probé su sistema de presupuestación por mí misma y aprendí mucho sobre mis gastos. Planeo mantenerlo hasta el 2021 y usarlo para que mi tasa de ahorro supere 50%.

Puedo ser buena limitando mis gastos y ahorrando dinero cuando quiero; sin embargo, lo soy tanto para llevar un presupuesto. En lugar de simplemente hacer un presupuesto y un seguimiento de mis gastos como una persona normal, prefiero crear soluciones elaboradas, como configurar depósitos recurrentes en mi cuenta de ahorros y verificar mis cuentas bancarias todos los días.

Sin embargo, ver a mi papá y a mi madrastra jubilarse de manera anticipada —en gran parte gracias a su presupuesto religioso con el que han creado un sistema completo— me hizo preguntarme si seguir sus pasos, podía ayudarme a ahorrar aún más. Entonces, me senté con ellos en Zoom y les dejé que me explicaran todo su sistema. Luego, lo probé por mí misma.

1. Configuré una forma de realizar un seguimiento de mis gastos

Mis padres ponen todos sus gastos, incluidas las facturas, en una tarjeta de crédito que pagan por completo todos los meses. Esto les ayuda a obtener recompensas de tarjetas de crédito y facilita el seguimiento de sus gastos en un solo lugar. Todo lo que tienen que hacer es iniciar sesión en su cuenta y descargar los cargos de cada mes en una hoja de cálculo de Excel.

2. Al principio, gasté como lo haría normalmente

«La práctica de capturar tus hábitos de gasto puede hacer que cambies tus comportamientos, explicó mi madrastra. «Pero trata de no dejarlo, porque quieres ver cómo gastas realmente tu dinero».

Al principio, mis padres no modificaron la forma en que gastaban dinero. Querían una imagen realista de sus hábitos de gastos actuales, en lugar de una demasiado optimista que podrían obtener si recortaran mucho durante el primer mes y luego perdieran la motivación o se sintieran privados más adelante. Estaban más interesados en averiguar cuánto dinero necesitarían ahorrar para la jubilación para mantener su estilo de vida actual que en reducir sus gastos.

Definitivamente quería reducir mis gastos y ahorrar más sin esperar varios meses para empezar. Entonces, descargué los cargos de mi tarjeta de crédito de los tres meses anteriores y los usé como base para crear un nuevo presupuesto.

3. Ingreso mis gastos mensuales en una hoja de cálculo de presupuesto

La hoja de cálculo que usan mis padres es bastante sencilla. Su gasto se contabiliza por mes y se divide en un docena de categorías, cada categoría con un presupuesto mensual que intentan no exceder. Cada mes, cuando ingresan sus gastos en cada categoría, la hoja de cálculo totaliza los gastos del mes y luego proporciona un número de cuán por encima o por debajo de su meta de gasto mensual estaban. De esa manera, si pasan un poco más de un mes, saben que deben reducir el mes siguiente.

Copié la hoja de cálculo para mi propio uso, modifiqué un poco las categorías y comencé poniendo un presupuesto mensual para cada categoría que sentía que reflejaba cómo quería que se gastara mi dinero. Luego, revisé los extractos de mi tarjeta de crédito de los últimos meses, sumé mis gastos en cada categoría y los puse en la hoja de cálculo.

4. Analicé mis hábitos de gasto

«La parte más difícil es empezar, porque realmente no tienes idea de lo que gastas», me dijo mi madrastra. Subestimaron mucho sus niveles de gasto, y eso también fue cierto para mí.

Resulta que mi gasto mensual real fue un promedio de casi 1,000 dólares por encima del presupuesto que me había fijado. Sospeché que podría haber sido un poco optimista cuando establecí ese presupuesto, pero lo que no espera era cuánto había estado gastando en ciertas categorías.

Por ejemplo, en mi categoría de «compras», que no incluye artículos de cuidado personal ni regalos, ya que tengo categorías separadas para ellos, asigné 200 dólares. De hecho, gasté un promedio de 800 dólares. Me di cuenta de que había redirigido todo el dinero que había ahorrado este año al no viajar o salir a cenar hacia las compras en línea.

Me alegra haber revisado mis extractos bancarios para sumar manualmente mis gastos en cada categoría. Solo me tomó alrededor de 30 minutos, y hacer esto me dio una idea más detallada de por qué mis gastos eran más altos en algunas categorías y más bajos en otras. Por ejemplo, mi gasto en comestibles superaba el presupuesto en unos 150 dólares. Mientras revisaba mis estados de cuenta mensuales, noté que al eliminar el alcohol, podría compensar ese gasto excedente.

5. Establezco nuevos objetivos de gasto que reflejan mejor mis valores

En lugar de intentar exprimir mis gastos actuales en el presupuesto que cree antes de pasar por mis gastos, decidí que los dos se encontrarán en el medio. Si bien podría alcanzar mi objetivo original de gastos en alimentos eliminando el alcohol, valoro tomar una copa de vino de vez en cuando. Entonces, en cambio, rellené in poco más mi presupuesto de comestibles mientras prometía gastar un poco menos en alcohol.

Sin embargo, cuando se trata de compras, me quedé con mi número original, más pequeño. La razón de esto es que gastar mucho dinero en compras en línea no se alinea con mis valores, y sé que no me trae alegría de la misma manera que ahorrar ese dinero para cuando pueda viajar algún día o destinarlo a algunos otros objetivos financiero.

Cómo estoy usando esta hoja de cálculo de presupuesto para ahorrar más y jubilarme anticipadamente

Mis padres comenzaron esta hoja de cálculo cuando ya estaban en sus carreras. La primera vez que se sentaron y lo hicieron, se dieron cuenta de que estaban gastando dinero en cosas que no los hacían tan felices como lo haría jubilarse temprano. Esta hoja de cálculo les ayudó a gastar por debajo de sus posibilidades y a canalizar todo ese dinero extra en ahorros para la jubilación. Al final, se retiraron a los 50 años.

Si bien aún faltan un par de décadas para la jubilación, espero que usar este presupuesto de manera constante me ayude a aumentar bastante mi tasa de ahorro. Tal como están las cosas, si me mantengo con los objetivos de gasto que me he fijado, podré ahorrar más de 50% de mis ingresos y jubilarme en los próximos 20 a 25 años.

Como alguien que siempre ha tenido problemas para apegarse a cualquier tipo de método de presupuestación o seguimiento de gastos, me abrumaba pensar en tratar de utilizar el método de presupuestación de mis padres. Sin embargo, todo esto me tomó menos de una hora y se siente como algo que podría hacer fácilmente el primer día de cada mes.

Con todos los cambios de estilo de vida que experimenté este año, hacía mucho que necesitaba un nuevo presupuesto. Lo más importante es que mi nuevo presupuesto para 2021 refleja mejor mis valores y prioridades en la vida y, al mismo tiempo, es realista sobre cómo tiendo a gastar el dinero.

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