José Salgado

José Salgado

Economía Espacial

El título de esta columna podría ser verdad en 5 años, si la voluntad política, los fondos públicos y un verdadero liderazgo se unen. 

En este momento el acceso y usufructo privado de los activos espaciales comienza una curva que valdrá más de un trillón de dólares en la próxima década. Y México podría ser parte de este fenómeno.

Aunque estamos llegando tarde a la carrera, tenemos una ventaja: la gran calidad de investigadores científicos que existen en este país.

Bastaría seleccionar una ruta precisa y enfocar todos los esfuerzos en una parte de la cadena de valor del sector espacial. La robótica y la investigación agroalimentaria, por ejemplo, son dos áreas en las que México podría convertirse en líder mundial a través de sus aplicaciones.

2 países en Europa ya están entre los actores importantes en el sector espacial

En Europa existen dos países que se han convertido en actores importantes en el sector espacial.

Primero, tenemos a Luxemburgo, un país que es 47 veces más pequeño que el estado de Nueva York. A pesar de ser preponderantemente rural, tiene una historia de explotación minera bastante rica; gracias a ello, hace aproximadamente tres años, su agencia espacial y el Ministerio de Economía comenzaron a investigar y promover la posibilidad de explotar minerales en asteroides cercanos a la Tierra. 

Aunque la comunidad global aún debate la viabilidad técnica de minar asteroides, la Agencia Espacial de Luxemburgo constató en el proceso el gran potencial económico del espacio. Gracias a ello empezó a ofrecer atractivos incentivos a startups extranjeras para establecerse en el país. 

Actualmente Luxemburgo es uno de los países europeos con el mejor ecosistema de startups espaciales; además, está en el proceso de construir el centro de investigación espacial más grande de Europa. 

El otro es un país que supo usar sus fortalezas para hacerse un nombre en la comunidad espacial: Estonia. Gracias a una estrategia nacional que inició en 1998, hoy es la sociedad digital más avanzada del mundo y 99% de sus servicios gubernamentales son en línea. Esto forzó a la comunidad empresarial a desarrollar soluciones digitales alrededor de esta estrategia. 

Hoy en día, pese a que Estonia no cuenta con una agencia espacial, ha capturado el interés de muchas compañías y startups en este sector. Abrir una empresa en esta nación se puede hacer desde la computadora y toma aproximadamente una hora, sin mencionar los grandes beneficios fiscales que ofrecen.

Estos dos ejemplos nos demuestran que no es imposible pensar que México pueda participar de forma seria en la carrera espacial. Las condiciones del sector permiten que nuevas empresas y nuevas tecnologías reciban fondos multimillonarios, gracias al creciente interés de inversionistas en todo el mundo. 

¿Puede México ser líder en el sector espacial en sus circunstancias actuales?

En el escenario actual, México no puede aspirar a mucho ante la falta de liderazgo en la industria y la ausencia de fondos públicos. Por ejemplo, más de la mitad de los recursos que recibe la Agencia Espacial Mexicana se gastan en sueldos, según los estados financieros a diciembre de 2020.

Por otra parte, sectores importantes como el robótico y el agroalimentario, no tienen acceso a los casos de estudio que los unen con el espacio y que les permitiría desarrollar nuevas aplicaciones, investigaciones y soluciones que beneficien la exploración espacial y ofrezcan nuevas formas de captación económica para el país. Es por ello que la creación de un ecosistema espacial mexicano es necesario, de lo contrario, nuestro país mirará de lejos la transformación que actualmente está en curso. 

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Las opiniones publicadas en esta columna son responsabilidad del autor y no representan ninguna posición por parte de Business Insider México.

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