- La importación de bienes de consumo y la inversión parecen mantener una tendencia al alza.
- Pero esto se debe al empuje de las empresas exportadoras, que están propiciando un mejor comportamiento en el norte.
- Esto se observa también por un desequilibrio en la inversión, con un mayor auge en la compra de maquinaria y equipo, pero caídas en la construcción por un menor gasto público.
La importación de bienes de consumo aumentaron en mayo casi 17% con respecto anterior, según datos de la balanza comercial. Y aunque otros indicadores como el consumo y la inversión muestran una incipiente recuperación del mercado interno; este avance es regional y se debe en gran medida al sector exportador.
El impulso en el mercado interno se observa desde marzo. En ese entonces el consumo privado aumento casi 3% mensual, y se ubicó a 0.7% de alcanzar el nivel observado previo a la pandemia. La inversión mostró un comportamiento similar; un repunte de 2% mensual, y superó lo observado antes del confinamiento con un crecimiento de 2% anual.
«En términos macroeconómicos estamos observando un repunte. Pero si desagregamos los componentes podemos ver que el repunte en la inversión se debe a un fuerte aumento en maquinaria y equipo. Y esto está relacionado con el sector de las manufacturas», señaló en entrevista, Ignacio Martínez, director del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (Lacen) de la UNAM.
Desequilibrio en materia de inversión
Existe un desbalance en materia de inversión, según el académico. Mientras la maquinaria y equipo creció a una tasa de 12% anual en marzo, superando los niveles observados previo a la pandemia. La inversión en el sector de la construcción se ubicó 6% con respecto a marzo del año pasado. Lo que apunta a un menor dinamismo de empresas fuera del negocio de envío de productos a Estados Unidos.
«Quiere decir que el gobierno no está soltando el gasto todavía precisamente para impulsar a la construcción, más allá de los cuatro grandes proyectos de infraestructura», añadió Martínez.
El economista indicó que las regiones donde se está recuperando el consumo y la inversión es en el norte del país. Esto por la derrama económica de las empresas de manufacturas. Mientras que en sur del país, a pesar de que existen proyectos como el Tren Maya. Estos se realizan por el ejército, lo que evita un efecto multiplicador entre las empresas de la región. Y tampoco se maximiza la creación de empleo.
Martínez indicó que el crecimiento observado se deberá al Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC). «A pesar del discurso en contra de la política neoliberal de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), lo que está sacando adelante el crecimiento es precisamente el comercio internacional», añadió.
«Estamos viendo un crecimiento asimétrico, debido a las diferencias en cuanto a creación de empleo en el norte y sur del país», indicó Martínez. «En tanto en el sur se crean 2,153 empleos, en el norte, se está creando 10,315 puestos, lo que también se refleja en el gasto de los hogares en relación con el gasto laboral. Se consume más en el norte que en el sur».
Desigualdad regional detonará un crecimiento en «K»
Aunque Banxico espera un crecimiento del país de hasta 7% anual en 2021, al separar las regiones del país, se observaría una recuperación económica en K. Es decir, si tomamos como punto de partida la pandemia, se observará un crecimiento en la zona norte de México, mientras que la región sur mostrará una variación opuesta al lado negativo.
«La actividad agropecuaria tiene un menor comportamiento con respecto a la actividad secundaria. Y esto por supuesto es resultado de esta creación de empleo que se está dando en el norte del país», indicó Martínez.
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