• El crédito para las pequeñas y medianas empresas (pymes) disminuyó en junio poco más de 5% anual, según datos de la ABM.
  • Pero BBVA Research informó que la morosidad en este segmento aumenta sostenidamente desde 2016.
  • Esto a pesar de que el costo del financiamiento a las empresas ha disminuido 30% desde 2018.

El crédito a las pequeñas y medianas empresas (pymes) registró una caída de poco más de 5% anual en junio pasado, informó la Asociación de Bancos de México (ABM). Y aunque están otorgando menos financiamiento a este segmento, la morosidad de las pymes arrastra un aumento sostenido desde 2016, de acuerdo con datos del Banco de México (Banxico).

Esta es una tendencia que contrasta con el comportamiento de las grandes empresas del país. Aunque se ha revertido la tendencia, y ahora el crédito a este segmento se ha reducido sustancialmente hasta caer a –15% anual en junio pasado, la morosidad de las grandes compañías se ha mantenido virtualmente sin cambio, como una de las más bajas entre todos los tipos de crédito, señaló en un reporte el área de análisis de BBVA.

«En paralelo, el índice de morosidad (IMOR) del financiamiento a pymes
ha presentado un aumento desde enero de 2016. Incluso superando el IMOR del crédito al consumo desde junio de 2018. En contraste, el crédito a empresas grandes, ha mantenido menores niveles de morosidad», señaló el reporte de BBVA Research.

Menos crédito a pymes a pesar de disminución en el costo del financiamiento

Esta disminución del crédito y aumento de morosidad a las pymes —que conforman la mayor parte del universo empresarial del país— se da a pesar de una reducción sustancial del costo del crédito en todos los segmentos.

«Banxico, ha disminuido la tasa objetivo en 400 puntos base desde agosto de 2019; ello aunado a la alta competencia en el sector, han permitido una reducción de las tasas de interés de los nuevos créditos que coloca la banca», señaló la ABM en su reporte de agosto.

Para el sector empresarial, las tasas de interés se han reducido en casi 30% desde diciembre de 2018. En ese entonces la tasa de colocación se encontraba en 9.6%; mientras que en junio de 2021 disminuyó a 6.7%.

En el mismo periodo, la tasa en el sector hipotecario cayó 13%. Para el segmento de consumo, la baja en tasas fue de 11%, mientras que en las tarjetas de crédito, las tasas han disminuido 28% en el mismo periodo.

A pesar de la reducción del crédito a las empresas, la ABM asegura que la banca está lista con recursos «disponibles para financiar a empresas y familias en sus proyectos financieramente viables».

Actualmente la captación bancaria, es decir, el dinero que recolecta de sus clientes, se ubica en 6.7 billones de pesos. Mientras que la cartera de crédito colocados, se ubica en el orden de 5.3 billones de pesos. Esta diferencia se traduce en un potencial de 1.4 billones de pesos para otorgar en financiamiento.

«La economía ya ha mostrado señales contundentes de recuperación, el empleo ha reactivado su crecimiento. Por lo que es solo cuestión de tiempo para que esto se refleje en los diferentes sectores y regiones del país», señaló la ABM en su presentación de agosto.

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