• La inflación se ubicó en 3.15% anual, lo que representó su menor nivel en siete meses, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
  • Con la inflación controlada y con dos subgobernadores de Banxico a favor de reducciones parece inminente una reducción a la tasa de interés en febrero.
  • El subgobernador de Banxico, Jonathan Heath, señaló en la última decisión de política monetaria que sería un "error" no disminuir la tasa con el recrudecimiento de la pandemia.

La inflación en México cerró el año en 3.15% en diciembre. Este dato representó su mínimo en siete meses, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). De esta forma, el Banco de México (Banxico) podría disminuir aún más su tasa de interés ante la «frágil» recuperación que experimenta el país.

En la Encuesta CitiBanamex de Expectativas de diciembre, el consenso de las 29 instituciones financieras apunta a que habrá una reducción en la tasa de interés de Banxico en su próxima decisión de febrero. Aunque en la última junta de política monetaria del Banco Central que se celebró en diciembre no se realizaron cambios, 2 de los 5 miembros de la junta de gobierno votaron a favor de una reducción.

Hoy se informó que estos dos votos a favor de una reducción fueron emitidos por el subgobernador Gerardo Esquivel y Jonathan Heath.

Heath indicó que su voto a favor de reducir la tasa de interés se debe a que se enfrenta una «recuperación frágil, difícil y prolongada después de la profunda caída en la actividad económica y su impacto negativo en el
mercado laboral» de acuerdo con las minutas de la decisión de política monetaria.

El subgobernador indicó que sería un error detener el recorte a la tasa de interés, cuando la inflación parece controlada dentro del objetivo de Banxico. Indicó que se espera un impacto económico debido a que «es inminente que muchas entidades federativas regresarán a semáforo rojo ante el recrudecimiento de la pandemia».

Alimentos frescos moderan repunte en inflación

Algunos alimentos frescos ayudaron a estabilizar la inflación en diciembre. Los productos agropecuarios reportaron una inflación de casi 4% anual. Esto representó un dato moderado con respecto a otros meses del año, cuando alcanzó cifras muy por encima del promedio de los precios.

La cebolla y el jitomate fueron los dos productos que más tuvieron un efecto en la inflación a la baja. Su precio promedio disminuyó 25% y 13% en diciembre con respecto al mes anterior, respectivamente. Le siguieron la papaya, los nopales, el chile serrano, otros chiles frescos y el limón, todos con reducciones mensuales de doble dígito.

La gasolina de bajo octanaje, el pollo y el gas doméstico LP fueron los productos que más tuvieron un efecto al alza en la inflación.

El subgobernador de Banxico, Gerardo Esquivel, indicó en diciembre que la «holgura de la economía, la fuerte apreciación cambiaria, la reducción en el riesgo-país y los pronósticos de precios de los energéticos, no se prevén presiones inflacionarias en el corto plazo».

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