- Hidilyn Diaz ganó la primera medalla de oro olímpica en la historia de Filipinas.
- Díaz ganó en la prueba de 55 kilogramos femenil de halterofilia este lunes durante Tokio 2020.
- El gobierno y los empresarios locales le darán 660,000 dólares y dos casas, informó Bloomberg.
Hidilyn Díaz, la levantadora de pesas filipina que ganó la primera medalla de oro de su país, recibirá 660,000 dólares y dos casas como premios por su logro.
Díaz ganó en la prueba de 55 kilogramos femenil de halterofilia este lunes durante los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Ella rompió un récord olímpico al levantar 127 kilogramos de envión para sellar la victoria.
Antes de Tokio 2020, la joven de 30 años pasó siete meses lejos de su familia. Ella se quedó atrapada en Malasia por las restricciones de viaje derivadas de la pandemia del Covid-19.
Obligada a construir su propio gimnasio, utilizó objetos cotidianos para entrenar, incluyendo una pesa hecha con dos botellas de agua que colgaban de un poste de bambú.
Pero después de su triunfo en Tokio, es probable que Díaz lleve un estilo de vida muy diferente.
Según Bloomberg, la levantadora de pesas recibirá 660,000 dólares en premios en efectivo del gobierno filipino y varios empresarios locales.
El premio estaba garantizado para cualquier atleta filipino que ganara el oro en los Juegos Olímpicos
Bloomberg informó que el dinero del premio está garantizado para cualquier atleta filipino que gane la medalla de oro, algo que nunca antes había sucedido.
Además, recibirá una casa y un lote en Tagaytay cortesía del presidente olímpico filipino Abraham Tolentino, así como un lujoso condominio de 280,000 dólares en Eastwood City, cortesía del multimillonario filipino chino Andrew Lim Tan.
«Es increíble, es un sueño hecho realidad», dijo Hidilyn Díaz, quien anteriormente ganó una medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Río 2016, a AFP, según Eurosport.
“Quiero decirle a la generación joven de Filipinas: también pueden tener este sueño de ganar el oro. Así es como comencé y finalmente pude hacerlo», enfatizó.
«Tengo muchas ganas de disfrutar de la vida porque he estado en Malasia durante casi dos años, así que estoy muy agradecido de poder ir a casa ahora y celebrar con mi familia y las personas que me apoyan», finalizó.
