• La pandemia de Covid-19 derivó en que las distintas generaciones cambiaran sus hábitos de consumo y estilo de vida.
  • La importancia del ahorro y las inversiones fueron unos de lo hábitos más reforzados entre las generaciones.
  • La salud mental tomó mayor relevancia en la generación Millennial, pero las otras generaciones comienzan a darle importancia.
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A raíz de la pandemia, el crecimiento económico en todo el mundo se vio afectado; sin embargo, en Latinoamérica es donde la inflación fue la más alta de 2021. Esto provocó que las diferentes generaciones de la región reflexionaran acerca de sus estilos de vida y cambiaran algunos de sus hábitos. 

En el informe «Hábitos y comportamientos generacionales en Latinoamérica: Estudio General de Consumo» elaborado por la agencia de marketing digital BESO, se analizó cómo la pandemia cambio ciertos hábitos de los Baby boomers, Generación X, Millennials y Centennials; algunos de los analizados son el ahorro, valores y creencias, hábitos de compra y actitud frente a las marcas.

Estos fueron los descubrimientos más importantes para cada generación en México: 

Generación Z

En esta generación entran las personas que nacieron entre 1996 y 2012. En cuanto a sus hábitos de ahorro, son los más propensos a hablar e investigar sobre educación financiera. 

Además, consideran relevante implementar métodos de ahorro para el cumplimiento de sus propósitos.

En este sentido, los mexicanos pertenecientes a esta generación elevaron su intención de ahorro entre 2019 y 2021.

Respecto a cómo quieren pasar su tiempo libre tras el confinamiento, la generación Z dijo que desea realizar más actividades en exteriores. Sin embargo, su deseo de viajar continúa en descenso desde el inicio de la pandemia pues solo 19% de los jóvenes desea hacerlo comparado con el 21% de 2019.

Por otro lado, esta generación está dispuesta a intercambiar datos personales por servicios gratuitos. Sobre todo los jóvenes brasileños y colombianos, lo que contrasta con la desconfianza de los mexicanos; cuyo resguardo de privacidad incrementó en el último año.

Millennials

Las personas que nacieron entre 1981 y 1995 se han acostumbrado a pasar la mayoría de su tiempo libre en interiores, según el estudio. La idea de hacer actividades en espacios cerrados persiste y aumenta, pero para los mexicanos aún es importante pasar tiempo al aire libre

Esto se debe a que representa un equilibrio en su salud física y mental.

Por otro lado, en cuanto al ahorro, la conciencia sobre la necesidad de contar con mecanismos de inversión son importantes. De hecho esta tendencia les sirvió para enfrentar una crisis para la que no estaban preparados, informó el estudio.

Sin embargo, la situación tampoco les ha brindado la confianza suficiente sobre nuevos métodos como las criptomonedas, debido a su volatilidad. Debido a ello, prefieren guardar su dinero en el banco o “bajo el colchón”.

Pese a esto, los millennials dicen que estarán más activos en las luchas contra la desigualdad, el machismo y en pro de la salud mental en Latinoamérica. El informe reveló que ésta generación quiere construir una nueva normalidad más consciente de la desigualdad social y el movimiento feminista.

Derivado de ello, el bienestar mental y emocional son parte de sus objetivos prioritarios; saben que la sobreexplotación laboral es dañina y están conscientes de que acciones como no dormir o desvelarse por trabajo no es algo adecuado. 

En cuanto a los hábitos de compra, los millennials apuestan por la economía circular, apoyando al comercio local.

Además, al ser quienes pasan más tiempo en internet se han convertido en una generación informada y mesurada al navegar. Esto, según el estudio, se refleja en el uso de sus plataformas, pues priorizan aquellas que les ayudarán a crear comunidades más afines en lo profesional. También son más cuidadosos con su privacidad y protección de datos.

Generación X

La generación X, que abarca a las personas que nacieron entre 1969 y 1980, vivió en medio de dos mundos: el análogo y el digital. 

En medio de la pandemia, gran parte de ellos asumieron más responsabilidades: sortear la exigencia en un trabajo ahora virtual; cuidar padres ancianos y a sus hijos en crecimiento; acoplarse a convivir con ellos durante todo el día en el mismo espacio, y aportar a su entretenimiento y educación.

Esta generación se caracteriza por ser ​​una de las más conscientes. No obstante, se comportó de manera incrédula al inicio de la emergencia sanitaria al no respetar las medidas de distanciamiento social.

De acuerdo con el informe, es la más insistente en regresar a la antigua normalidad cuando podían salir normalmente a distraerse.

Pese al panorama de déficit financiero internacional, la Generación X en Latinoamérica se mantiene hasta ahora como una de las más optimistas. Esto debido a la solidez económica que logró manteniendo métodos de ahorro e inversión saludables. 

De hecho, en México este grupo goza de una estabilidad financiera derivada de sus sistemas de pensiones y ahorro para el retiro. Esto les permitió enfocarse en diversificar sus métodos de inversión, y como no tienen confianza en las criptomonedas, prefieren invertir en bienes inmuebles u otros métodos conocidos.

Al igual que los Millennials, la Generación X es cada vez más consciente de su salud mental. 

Además, los mexicanos destacan por su acercamiento con la fe y espiritualidad, cuya tendencia creció 11% en el último año. Y es que la actividad religiosa es considerada por ellos como algo esencial para protegerse y enfrentar una crisis.

De hecho, la fe de los mexicanos fungió como un factor de concientización y de mayor cuidado ante la pandemia, así como de optimismo hacia las perspectivas de la vacuna y el regreso a la nueva normalidad, según una encuesta hecha por El Financiero. 

La generación X también es cada vez más consciente del impacto ecológico que provocan sus hábitos de consumo, aunque esta preocupación disminuye con el paso de la nueva normalidad.

En cuanto a la privacidad de sus datos personales, a pesar de su preocupación generalizada por la manera en cómo las empresas los utilizan, están cada vez más dispuestos a intercambiar información personal; sobre todo si es a cambio de ciertos servicios y herramientas digitales que les ayuden a solucionar su día a día.

Baby boomers

En esta generación entran las personas que nacieron entre 1949 y 1968. La mayoría de las personas en ella están retiradas y otra parte aún trabaja —ya sea por necesidad económica o para mantenerse útiles. 

Actualmente son la generación que posee el mayor poder adquisitivo, especialmente porque sus hijos ya son adultos independientes.

En general, los boomers latinoamericanos son el grupo más sensato al hacer crecer su patrimonio como su segunda opción de inversión. De esta manera, relata el estudio, se aseguran de blindar el ahorro que construyeron a lo largo de su vida laboral; que además estuvo apalancada de la bonanza de los años 70 y 80. 

México destaca al hacer crecer 7% este método de ahorro. Podría decirse que los Baby boomers son la representación del equilibrio entre gasto y ahorro, según el informe. Es un segmento de la población —en su mayoría— despreocupado que destina buena parte de sus ingresos al disfrute personal.

Al inicio de la pandemia los Boomers mexicanos no contaban con ahorros, pero el panorama incierto y el confinamiento obligatorio los obligó a voltear hacia este rubro a tal grado que su intención de ahorro subió 20% entre 2019 y 2021.

En el ámbito tecnológico, al no estar tan familiarizados con ello, la pandemia representó un proceso de adaptación complejo. Especialmente porque tuvieron que aprender a utilizar las herramientas tecnológicas para seguir su vida de manera habitual.

Y, aunque tienen miedo de llegar a sufrir una estafa, esto no impide que incursionen en el e-commerce, lo que indica un cambio en el comportamiento de consumo. Sin embargo, son la generación menos dispuesta a compartir sus datos personales a cambio de servicios y productos gratis.

Por otro lado, de acuerdo con el estudio, la pandemia hizo que se hicieran más conscientes de su salud tanto física como emocional y mental; son quienes mejor adoptaron las medidas de prevención evitando salir y delegando a familiares la obtención de alimentos y medicinas.

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