- Un futbolista iraní fue condenado a muerte tras protestar contra el fallecimiento de Mahsa Amini.
- Amir Nasr-Azadani fue detenido en noviembre en relación con el asesinato de un coronel de policía.
- Fue acusado de “hacer la guerra contra Dios” y será ahorcado.
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Un futbolista profesional iraní fue condenado a muerte tras protestar contra el fallecimiento de Mahsa Amini, informó Iran Wire.
En noviembre, las autoridades arrestaron a Amir Nasr-Azadani, de 26 años, en relación con el asesinato de un coronel de policía y dos milicianos voluntarios.
Lo acusaron de “hacer la guerra contra Dios” y lo ahorcarán, de acuerdo con Iran Wire.
FIFPRO, el sindicato internacional de futbolistas, dijo en un comunicado publicado este lunes que está “conmocionado y asqueado” por la noticia.
“Nos solidarizamos con Amir y pedimos la eliminación inmediata de su castigo”, dijo.
FIFPRO is shocked and sickened by reports that professional footballer Amir Nasr-Azadani faces execution in Iran after campaigning for women’s rights and basic freedom in his country.
— FIFPRO (@FIFPRO) December 12, 2022
We stand in solidarity with Amir and call for the immediate removal of his punishment. pic.twitter.com/vPuylCS2ph
En Irán hay protestas generalizadas desde septiembre tras la muerte de Mahsa Amini, de 22 años, quién falleció bajo custodia luego de ser detenida por la policía de moralidad bajo sospecha de violar las estrictas reglas del país sobre cubrirse la cabeza.
Los testigos acusaron a los policías de obligarla a subir a una camioneta y golpearla.
28 iranís que protestaron contra la muerte de Mahsa Amini fueron condenados a muerte
Nasr-Azadani jugó por última vez para el equipo Tractor de la Persian Gulf Pro League, pero no lo ha hecho profesionalmente desde su última aparición en noviembre de 2017.
Iran Wire reportó que es uno de los 28 iraníes que fueron condenados a muerte por su participación en las protestas. Entre ellos hay tres niños, todos acusados de “corrupción en la Tierra”.
De acuerdo con el servicio persa de la BBC, durante la detención los menores fueron víctimas de tortura física.
El 8 de diciembre, Irán llevó a cabo su primera ejecución en relación con las protestas.
The Guardian informó que la ejecución de Mohsen Shekari se dio por su acusación de bloquear una calle y herir a un miembro de la milicia pro régimen Basij en septiembre.
Los medios estatales publicaron un video de la confesión de Shekari, que lo mostró con un hematoma en la cara.
Los grupos de derechos humanos —como Iran Human Rights, con sede en Oslo— han dicho que Shekari fue torturada y obligada a confesar.
El director del grupo, Mahmood Amiry-Moghaddam, pidió una fuerte reacción internacional ante la muerte de Shekari, “de lo contrario, nos enfrentaremos a ejecuciones diarias de manifestantes”.
