• Los resultados financieros de las farmacéuticas se benefician de las ventas de vacunas contra el Covid-19.
  • Las expectativas de ventas y ganancias sobre este mercado son muy optimistas.
  • Pfizer, Moderna, AstraZeneca y Janssen son las empresas que se verán más beneficiadas con las ventas de las vacunas.

Las vacunas ahora son un gran negocio. El ritmo vertiginoso al que crecen las farmacéuticas detrás de las vacunas contra el Covid-19 supera todas las expectativas de los analistas; estos se mostraban muy optimistas a la espera de estos segundos resultados trimestrales. 

Las cifras de ModernaPfizerJanssen y AstraZeneca anticipan que lo que se verá en las próximas cuentas trimestrales. Además, el cierre de 2021 podría ser histórico, tomando en cuenta que para la biotecnológica de la vacuna de ARN mensajero, este será su primer año con un producto en el mercado. 

Los resultados de los tres meses vencidos el 30 de junio —tanto respecto los mismos de 2020 como a los 3 primeros de este año—, han hecho que las inyecciones contra el coronavirus se noten entre las cifras de Johnson & Johnson (detrás del laboratorio Janssen) y AstraZeneca; con una cartera de productos de largo recorrido ya aseguraban al menos un balance estable. 

Para Pfizer y Moderna —que usan la tecnología de ARN mensajero por primera vez en la historia—, los números son aún más predictivos. 

La primera de ellas casi dobla sus ingresos del segundo trimestre de 2020 tras crecer 92%. La segunda reportó un histórico incremento de su facturación de 6,300%. 

Estos y otros datos aseguran que las farmacéuticas tienen un negocio muy lucrativo con las vacunas de Covid-19.

Un señal de que las vacunas son un gran negocio: las farmacéuticas crecieron en el segundo trimestre entre 30% y 6,300% respecto al mismo periodo de 2020

Viales de la vacuna de Moderna contra el Covid-19 / Reuters.

Moderna, con su primer producto en el mercado, es el claro ejemplo de que el negocio de las vacunas contra el coronavirus apenas despunta. 

La biotecnológica, dirigida por Stéphane Bancel, facturó en el segundo trimestre del año 6,300% más que en el mismo periodo del año anterior.

De hecho, sus ingresos ascendieron a unos 4,354 millones de dólares (mdd), frente a los 66 mdd de 2020. Del total, la vacuna representa casi el 100% de la facturación: 4,197 mdd.

Otra farmacéutica al frente de una vacuna de ARN mensajero, Pfizer, ha ganó con la vacuna 9,234 mdd; en comparación con los 1,247 mdd del mismo periodo de 2020.

En total, la farmacéutica creció 92% en un año, tras registrar ingresos por valor de 18,980 mdd frente a los 9,860 mdd del año anterior. 

Por su parte, Johnson & Johnson, que facturó 23,300 mdd superando las expectativas de los analistas, creció 27.1% respecto al mismo trimestre de 2020. Aunque los ingresos por su vacuna parecen menores que los de sus competidoras, obtuvo 164 mdd; 64% más que en el primer trimestre del año. 

AstraZeneca triplicó los ingresos de su vacuna este segundo trimestre del año. La farmacéutica —que desarrolló sus inyecciones en colaboración con la Universidad de Oxford— ingresó 890 mdd.

Esto, junto a un fuerte crecimiento con el resto de productos de su cartera, llevó a AstraZeneca a ingresar 31% más que en el mismo periodo de 2020.

Este año se espera que las farmacéuticas con vacunas contra el Covid-19 facturen entre 20% y 2,300% más que el año anterior

Viales de las vacunas de ARN mensajero de Pfizer-BioNTech y Moderna / Reuters.

Los analistas estiman que Moderna seguirá creciendo vertiginosamente en lo que queda de año. La biotecnológica podría facturar 23 veces más de lo que facturó en todo el año anterior, al presentar 18,770 mdd frente a los 803 mdd de 2020. 

En tanto, Pfizer anticipa un cierre de aproximadamente 33,500 mdd por la vacuna BNT162b2, desarrollada junto a BioNTech. Esto impulsaría sus ingresos totales a entre 78,000 y 80,000 mdd.

En cuanto a Johnson & Johnson, espera cerrar 2021 con entre 93,800 y 94,600 mdd facturados; tal y como informó Business Insider España. En cambio, cerró 2020 con 82,600 mdd.

Para AstraZeneca, que no ha ofrecido cifras sobre lo que espera ingresar en 2021, los analistas esperan que ingrese 45% más que el año anterior. Entonces facturó 26,620 mdd. Exactamente, la cifra podría ascender a los 32,700 mdd.

«Es de esperar que continúen las variaciones de rendimiento entre trimestres», reconoce el informe de los últimos resultados presentados por AstraZeneca. 

Se prometieron miles de millones de dosis de vacunas contra el Covid-19, a pesar de que Janssen y AstraZeneca tienen problemas de suministro

Una dosis de AstraZeneca / Reuters.

Según datos recopilados por Bloomberg, se han administrado más de 4,820 millones de dosis en 183 países; de forma desigual entre ricos y pobres. A este ritmo, estima el medio, se necesitarían seis meses para llegar a la inmunidad de rebaño en todo el mundo, cerca de 75%.   

Moderna planea entregar en 2021 entre 800 millones y 1,000 millones de dosis de la vacuna. Pero promete entre  2,000 millones (de 100 μg) y 3,000 millones de viales (si se trata de 50 μg) en 2022.

Por su parte, Pfizer se comprometió con 2,100 dosis en 2021. No obstante, el fabricante prueba su candidata en niños de tan solo seis meses de edad; y está a la espera de la revisión de datos de su dosis de refuerzo. 

En tanto, Janssen aseguró que podría producir 1,000 millones de dosis durante 2021. En un comunicado a la Unión Europea (UE), confirmó que entregaría 200 millones de dosis al grupo en 2021.

Pero un funcionario de la UE reconoció ante Reuters —en febrero—, que podría enfrentar problemas de suministro. Estos pueden complicar los planes de entrega de 55 millones de dosis de su vacuna Covid-19 al bloque este trimestre.

Por su parte, AstraZeneca no adelanta cuántas dosis entregará en 2021. La farmacéutica es precavida para no comprometer dosis que luego no puedan ser entregadas; como sucedió con la UE.

Sin embargo, los datos evidencian que impulsa el crecimiento de la compañía en mercados emergentes como China; reporta ingresos en el país por 455 mdd y 572 mdd en Europa en lo que va de año.

A pesar de estos últimos conflictos, las compañías difícilmente verán lastrado su crecimiento al menos en 2021. Sus vacunas son seguras y eficaces; son más baratas que las de ARN mensajero y más fáciles de transportar. 

Los precios de algunas vacunas ya empezaron a subir por demostrar ser más eficaces que otras

Reuters.

La farmacéutica que menos se ha beneficiado de este factor ha sido AstraZeneca, no por el número de dosis vendidas, sino porque su candidata se ha comercializado sin ánimo de lucro. Es decir, a precio de costos. 

Los viales de la vacuna desarrollada por AstraZeneca y la Universidad de Oxford cuestan casi cuatro dólares. 

Le sigue la monodosis de Janssen, que tiene un precio de nueve dólares. Al ser una única dosis, ese sería el monto total para la pauta completa. Mientras que para el resto de candidatas es el doble por cada inmunizado. 

En origen, la vacuna de Pfizer y Moderna se empezaron a comercializar por 17 y 22 dólares, respectivamente. Pero su efectividad contra las nuevas variantes —más alta que la del resto de vacunas— llevaron a sus fabricantes a elevar el valor de las inyecciones. 

Ahora, Pfizer sube el precio de su vacuna a los 23 dólares el vial. Y Moderna a 30 dólares. Todavía queda lo que los ejecutivos de Pfizer llaman una «oportunidad significativa»: que pase el estado pandémico y el precio de la vacuna se pueda ajustar a la balanza de la oferta y la demanda.

Nuevas variantes del coronavirus podrían eludir las vacunas actuales: las farmacéuticas ya estudian una actualización, terceras inyecciones y vacunas polivalentes

Reuters.

Las variantes serán un factor determinante para la industria farmacéutica que estudia vacunas contra el SARS-CoV-2, y los virus en general, como el que provoca la gripe cada año. 

Que aparezcan nuevas variantes implica que el virus original o sus predecesoras han sufrido una mutación. Estas mutaciones pueden afectar a la forma en la que el virus se adhiere a los receptores de la célula humana; lo agresiva que será la enfermedad o su resistencia a una respuesta inmunitaria. 

Las variantes del coronavirus han evolucionado en esos 3 aspectos, al menos delta. Ahora las vacunas son entre 10% y 30% menos efectivas. Además, varios estudios advirtien sobre la duración de su protección, que podría empezar a ser notable a partir de los seis meses. 

Las farmacéuticas que ya han recibido autorización para su uso de emergencia —Moderna, Pfizer, AstraZeneca y Janssen— ya estudian dosis de refuerzo, vacunas orientadas a las variantes más peligrosas y vacunas polivalentes, que respondan a diferentes versiones del virus. 

Además, otras candidatas vienen en camino. Y podrían cambiar el rumbo de la pandemia de conseguir una protección más fuerte, más prolongada en el tiempo y diferente.

Las dosis de refuerzo cada 2 años podrían elevar el gasto mundial en vacunas hasta los 157,000 millones de dólares en 2025

Vacunació en Los Angeles / Reuters.

Las dosis de refuerzo están a punto de ser una realidad, porque serán necesarias para hacer frente a versiones más agresivas del virus, como delta.

Porque aunque los vacunados estén protegidos contra los peores escenarios del SARS-CoV-2; más infecciones aumentan las probabilidades de infectar a otros y de saturar el sistema sanitario.

Las administraciones responsables de Europa y Estados Unidos —conocidas como EMA y FDA— trabajan en la revisión de los datos de los efectos y la seguridad de una tercera dosis de las vacunas de ARN mensajero: Pfizer y Moderna. 

Pero ya las autoridades sanitarias de Estados Unidos recomiendan una dosis extra para los que tienen una pauta completa, más allá de los grupos de riesgo. Si la FDA lo aprueba, se empezarían a administrar el 20 de septiembre, ocho meses después de la segunda inyección. 

La necesidad de dosis de refuerzo llevará a un aumento de la demanda de las vacunas. Y, por consiguiente, a que las farmacéuticas amplíen su capacidad de producción y se refleje en sus próximos resultados. 

Los cálculos de la compañía estadounidense de datos de salud IQVIA, estiman que si se necesita una inyección cada dos años, el gasto en estas dosis sería de hasta 157,000 mdd en 2025. Esto equivale a 2% del presupuesto para todos los medicamentos recetados. 

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