• Los semiconductores son un componente cada vez más importante de productos, desde computadoras portátiles hasta bombillas.
  • El aumento de la demanda y la interrupción del suministro han provocado una grave falta de chips para una variedad de industrias.
  • Los analistas y líderes de la industria pronostican al menos otro año de escasez.

Los chips semiconductores están en casi todo estos días, por lo que su escasez a nivel mundial es algo serio.

Como dijo Glenn O’Donnell, vicepresidente de Forrester Research, «si tiene un enchufe o una batería, probablemente esté lleno de chips».

La escasez global de chips que está afectando a los fabricantes de automóviles se está propagando en casi todas las industrias que fabrican o utilizan productos tecnológicos.

En particular, los analistas dicen que el auge de la computación en la nube y la minería de criptomonedas, así como la incorporación de funciones inteligentes en todo —desde timbres hasta lavavajillas— ha provocado una fiebre del oro en el sector.

Pero una combinación de factores ha mermado la oferta a medida que la demanda continúa aumentando. Esto lleva a una grave escasez que, según los analistas y líderes de la industria, podría prolongarse hasta 2023.

«Esperamos un par de años… antes de que obtengamos suficiente capacidad incremental en línea para aliviar todos los aspectos de la escasez de chips», dijo a la BBC el presidente de IBM, Jim Whitehurst. Su empresa otorga licencias de tecnología de microprocesadores a los principales fabricantes de chips del mundo.

La semana pasada, Reinhard Ploss, director ejecutivo del fabricante de chips alemán Infineon, dijo a CNBC que su industria nunca había visto condiciones como estas; sin embargo, cree que dos años para la normalidad parecían «demasiado tiempo».

Otras empresas han pintado pronósticos aún más optimistas: Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC), el mayor fabricante de chips, dijo que espera ponerse al día con la demanda de la industria automotriz el próximo mes, y el CEO de Cisco, Chuck Robbins, dijo a la BBC que la escasez se reduciría más adelante este año.

Los analistas, sin embargo, se muestran escépticos.

«Debido a que la demanda seguirá siendo alta y la oferta seguirá limitada, esperamos que esta escasez dure hasta 2022 y hasta 2023», escribió O’Donnell en un blog de Forrester. «No vemos nada más que tiempos de auge para la demanda de chips».

El CIO de Plurimi Investment Managers, Patrick Armstrong, dijo a CNBC que espera otros 18 meses de déficit.

«No se trata solo de automóviles. Son teléfonos. Es el internet de todo. Hay tantos productos ahora que tienen muchos más chips de los que tenían en el pasado», dijo. «Todos están habilitados para internet».

Nueva producción está llegando en línea, con un gasto de 20,000 millones de dólares (mdd) de Intel y una inversión de 28,000 mdd de TSMC; sin embargo, eso hace poco para resolver el desafío inmediato que enfrenta el mercado en este momento.

Nadie está literalmente llenando bolsas de basura o botes de gasolina con semiconductores; sin embargo, el director de economía y estrategia global de Credit Suisse, Wenzhe Zhao, dijo la semana pasada que el acaparamiento de inventarios a lo largo de la cadena de producción está empeorando la situación de escasez de suministro.

Por ahora, O’Donnell de Forrester recomienda que los compradores de tecnología sean pacientes, paguen más, elijan un producto o servicio alternativo o se las arreglen con herramientas más antiguas hasta que las cosas vuelvan a la normalidad.

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