Ana Peña

Ana Peña

Tech Talk

Hay algo que no ha cambiado en estos 9 meses de pandemia: nuestra ilusión por viajar. De acuerdo con Google Trends, en todo este tiempo la gente nunca dejó de buscar viajes. Y es que, en México, nosotros confiamos. Confiamos en que esto pronto acabará, confiamos en que pronto viajaremos; confiamos en que el gobierno va a terminar sus proyectos pendientes y confiamos los mexicanos en que pronto construiremos un siguiente piso de la casa. ¿Te has fijado cuando viajas en carretera que las casas tienen las varillas al aire, sin cortar y sin tapar? Es por la ilusión de los mexicanos de “colar y echar el siguiente piso”. Confiamos y pecamos de confiados.

Aunque de momento no podemos, queremos viajar. De acuerdo con Flightradar, el número de vuelos para el 25 de marzo de 2019 fue de 169,056 aviones que surcaron el cielo a nivel mundial; el mismo día de este año (2020), voló un total de 94,477. Esto es una disminución de 56%. Los vuelos ni siquiera iban a máxima capacidad.

Esta no es la primera vez que experimentamos cambios en la manera de viajar. Después del 11 de septiembre, se implementaron medidas nuevas de seguridad para realizar viajes y los pasajeros nos adaptamos rápidamente a estos nuevos protocolos y confiamos en su efectividad.

¿Cómo es viajar en tiempos de Covid-19?

En México hemos sido testigos de lo mal que la están pasando las aerolíneas mexicanas en estas semanas, desde trabajadores de las aerolíneas manifestándose, hasta problemas con la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y el Servicio de Administración Tributaria (SAT). Estamos viviendo tiempos retadores.

Los protocolos que las aerolíneas y la industria del turismo en general están instrumentando para mantener el número de contagios al mínimo, están siendo posibles gracias a la tecnología. Por ejemplo, el simple hecho de que puedas tener tu boleto desde tu celular, o incluso que puedas tener una experiencia sin contacto con cualquier objeto o persona, me parece ya normales. Si este es el panorama actual, ¿te imaginas cómo será cuando llegue el 5G?

Las medidas

Entre las medidas que están empleando las aerolíneas para evitar la propagación del virus, en primer lugar, y la que pareciera más obvia, es la implementación del uso del cubrebocas. No entraré a detalles ya que a estas alturas todos deberíamos saber usarlo (espero). Por otra parte, los aeropuertos cuentan con medidas de prevención de contagio como el uso de termómetros infrarrojos, que funcionan a distancia, y por si quieren saber, ¡no, no te matan neuronas! Hay peores cosas que haces cada fin que sí matan neuronas. Incluso, algunas aerolíneas en Emiratos Árabes Unidos implementan análisis de sangre o pruebas rápidas para detectar el Coronavirus mientras realizas el check-in. Además de estas medidas, existe “el asiento de en medio” donde, en resumen, se “bloquean” ciertos asientos para dejar el espacio recomendado de sana distancia, entre otros. 

Tu cara: tu boleto

En las Olimpiadas Tokio 2020, íbamos a ver implementado el reconocimiento facial como pase de entrada. Lo que hace es suplantar los boletos tal cual los conocemos y que tu rostro sea tu pase de entrada, así como también es capaz de reconocer a miembros del staff o servicios contratados para poder saber a qué zona tienen permiso de acceder.

La industria aérea debería adoptar estas tecnologías pues, gracias a los datos que generen, será mucho más fácil poder realizar los trámites de cruces fronterizos. Y gracias a la tecnología podremos gestionar mejor las filas y optimizar procesos. También nos ayudará a mantener un mejor registro de protocolos e incluso de historial médico. ¿Te imaginas toda la tecnología sin contacto que nacerá a partir de esto? 

Tecnologías que ya están aquí

Otros ejemplos de tecnologías que están ayudando en México durante la pandemia son el Roomiebot y La Luchy Robotina (Hospital 20 de noviembre), que ayudan en los hospitales con la detección de síntomas de Covid-19 sin necesidad de contacto humano o conectando en video a paciente-médico-familia para evitar visitas presenciales. Soundcov es una aplicación que es capaz de detectar si tu tos es un síntoma de Covid-19 con el sonido “¡cov! ¡cov!” Está ayudando a bajar el número pacientes que acuden al hospital en Brasil por una gripa simple.

Incluso contamos con la Inteligencia Artificial (IA) para ayudarnos. Por ejemplo, en Canadá existe un museo donde cuentan con la ayuda de “Lana” una asistente inteligente, que está ayudando al museo a abrir en tiempos de Covid-19 mientras se reducen los contagios al mínimo. Lana se encarga de dar la bienvenida, realizar el check-in, medir la temperatura de los visitantes; así como asegurarse que el museo se encuentre en la capacidad de visitas recomendada. Aquí en México, específicamente en el pueblo de Tequila, estamos utilizando ya la IA para monitorear los flujos turísticos y poder limitar los aforos en tiempo real. 

¡Todas estas tecnologías pueden ser adaptadas para funcionar en aeropuertos y aerolíneas!

En busca de un protocolo global de viajes

Hay un concepto que debemos discutir más: el pasaporte de inmunidad. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), algunos países han sugerido que las personas se realicen pruebas para detectar si cuentan con anticuerpos contra el nuevo Coronavirus. Este documento sería similar al Certificado Internacional de Vacuna contra la Fiebre Amarilla, el cual, según la OMS es obligatorio presentar para ingresar a 20 países del mundo, sin embargo, existen países que lo solicitan si el viajero pasa más de 12 horas por algún país de alto contagio.  

Es necesario ponernos de acuerdo para realizar un protocolo mundial de viajes. Es muy difícil ser viajero frecuente y depender de las reglas de cada país. Si te fijas cada uno ha tenido protocolos distintos, por ejemplo, Canadá hasta hace poco abrió sus fronteras para extranjeros, en Colombia hay que presentar una prueba negativa de Covid-19 realizada 96 horas antes del vuelo, mientras que en Perú es suficiente con no presentar fiebre, que, por cierto, no indica mucho.

La gente sigue con miedo de viajar y realmente cuesta trabajo estar en paz sabiendo que por ahí hay antros que abren clandestinamente o al ver en las noticias que el gobierno dice una cosa, pero que las medidas de seguridad son otras, pero que habrá ciertos casos en particular donde se realizarán excepciones, pero que igualmente quédense en casa y así…

En fin, el problema más difícil que tiene hoy la industria aérea en México no es el SAT ni Profeco. El reto está en recuperar la confianza del país más confiado… y mi apuesta va por adoptar tecnologías que nos permitan disminuir el contacto humano, agilizar procesos y recuperar la confianza de los viajeros mexicanos.

Las opiniones publicadas en esta columna son responsabilidad del autor y no representan ninguna posición por parte de Business Insider México.

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