- La industria de la ciberseguridad se enfrenta al desafío de ser más diversa e inclusiva.
- Solo 25% de la fuerza laboral en la industria de la ciberseguridad está conformada por mujeres
- Si la industria de la ciberseguridad se vuelve más inclusiva y diversa podría solucionar uno de sus principales retos: la escasez de talento.
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Más allá de un incremento en la incidencia de ciberataques a nivel mundial, la industria de la ciberseguridad también se enfrenta al desafío de convertirse en una más diversa e inclusiva.
De acuerdo con ESET, el hecho de que la industria de la ciberseguridad se convierta en una más inclusiva y diversa podría ayudar a solucionar uno de sus principales retos: la escasez de talento.
La falta de profesionales capacitados/as para satisfacer la enorme cantidad de vacantes sin cubrir en la industria de la ciberseguridad se mantiene desde hace varios años. Esto provoca que las empresas y organizaciones estén más expuestas a las diversas y cada vez más complejas amenazas informáticas. Por lo tanto, para estar protegido se requiere de cada vez más esfuerzo, capacidad tecnológica y financiera, y también creatividad.
Ante este escenario, varias organizaciones, como el Foro Económico Mundial o el (ISC)² plantean la necesidad de que la industria de la ciberseguridad sea más diversa e inclusiva.
ESET destaca que no solo estas organizaciones promueven la importancia de lograr que la industria sea más inclusiva y diversa. Desde MITRE también plantean la importancia de trabajar en lograr una mayor equidad y diversidad.
De acuerdo con un reporte de 2022 de la organización sobre cómo solucionar el problema de la falta de datos para enfrentar la falta de diversidad en la industria, trabajar en inclusión y diversidad tendrá un impacto positivo en el crecimiento y el rendimiento de las organizaciones. De hecho, se ha demostrado que equipos más diversos son mejores a la hora de la resolución de problemas y en la generación de ideas.
“La importancia de lograr una inclusión, equidad y diversidad reales dentro de las organizaciones es fundamental para generar espacios de trabajo donde cada persona desarrolle su máximo potencial”, comenta Carolina Kaplan, responsable del Área de Sostenibilidad de ESET Latinoamérica.
“Es importante entender que todas las personas somos diversamente iguales. Y que debemos contar con las condiciones y herramientas necesarias (y no siempre iguales) para poder trabajar en un ambiente sano. Esto significa generar espacios laborales libres de discriminación donde no solo las personas se verán beneficiadas, sino también las propias organizaciones”, agregó.
Solo 25% de la fuerza laboral en la industria de la ciberseguridad está conformada por mujeres
La falta de mayor talento diverso en el sector es preocupante. De acuerdo con Cybersecurity Ventures, de la fuerza laboral global de ciberseguridad —con unos 3.5 millones de trabajadores en 2021— solo 25% son mujeres.
Otro estudio realizado en 2021 por el Aspen Institute demostró la predominancia de hombres blancos en esta industria por encima de otras poblaciones; como personas hispánicas (4%), asiáticas (8%) o afrodescendientes (9%). También demuestra la poca representatividad de las mujeres, con solo 24% en un país donde este género representa 51% de la población.
Sin embargo, según ESET, existe un gran desafío por resolver para avanzar en este campo: la falta de datos demográficos de calidad de la fuerza laboral que trabaja en ciberseguridad. Esto dificulta medir la efectividad y el impacto de las acciones que se están llevando a cabo para mejorar la equidad, inclusión y diversidad de la fuerza laboral.
En este sentido, para el director adjunto de MITRE, Irving Lachow, es muy importante recopilar información demográfica de la fuerza laboral en ciberseguridad considerando las categorías que establece el NICE. Este identifica siete categorías diferentes, con 33 áreas de especialidad y 52 roles en ciberseguridad diferentes.
Si bien países como Australia y Nueva Zelanda están realizando esfuerzos para incrementar la diversidad de la fuerza laboral nacional, según Lachow el único país que trabaja para recolectar datos demográficos de calidad sobre la fuerza laboral en ciberseguridad es Reino Unido. Durante los dos últimos años, el gobierno británico lanzó encuestas para conocer más en profundidad este aspecto.
En la región de Latinoamérica (incluido México), menos del 20% de las mujeres trabajan en empresas relacionadas con la ciberseguridad. Además, solo 27% elige estudiar una profesión relacionada con carreras STEM, según datos de Fortinet.
¿Cómo hacer a la industria de la ciberseguridad una más diversa e inclusiva?
De acuerdo con ESET, existen recomendaciones que las empresas pueden tomar para mejorar la inclusión y diversidad en la industria de la ciberseguridad. Todas estas parten de algunos aspectos compartidos por el Foro Económico Mundial:
- Trabajar en la retención del talento y el desarrollo de oportunidades.
- Ofrecer a los equipos de colaboradores la oportunidad de poder expresarse, creando espacios seguros para esto y reconociendo el aporte que cada uno pueda hacer.
- Asegurarse que los/as líderes de la organización estén comprometidos/as.
Por su parte, organizaciones como (ISC)2 ofrecen en su sitio web varios recursos útiles para empresas que quieran incorporar temas de diversidad, equidad e inclusión. A su vez, informes como el de Aspen Institute proponen una lista de prioridades para organizaciones de ciberseguridad que quieran mejorar en este aspecto.
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