• El desplome del peso mexicano frente al dólar hace sufrir ahora, pero en 2021 puede ayudar a la afectada economía de México.
  • Un peso débil frente al dólar hará que las mercancías que México vende en el exterior sean más atractivas, pues serán más baratas.
  • Los pronósticos renovados de los expertos, tras la contingencia del coronavirus, apuntan a que la economía mexicana no crecerá sino se contraerá hasta 5%.

El desplome del peso mexicano frente al dólar hace sufrir ahora pero en 2021 puede impulsar la economía de México a través de las exportaciones, consideran especialistas.

Un peso débil frente al dólar hará que las mercancías que México vende en el exterior sean más atractivas, pues serán más baratas.

Los pronósticos renovados tras la contingencia del coronavirus apuntan a que la economía mexicana no crecerá sino se contraerá hasta 5%.

El hundimiento del peso puede ser una malla de contención para la caída del Producto Interno Bruto (PIB) por una razón: México es un país exportador.

El peso débil ayudará salir más rápido del bache

Pero en 2021, tomaría nuevos bríos ayudada por un mayor intercambio comercial y por una baja base de comparación, aseguraron los expertos. Prevén también que los efectos del virus se hayan diluido para entonces.

«La gran depreciación del peso, aunque probablemente sea una contracción de corto plazo, eventualmente ayudará a México a recuperarse más rápido», dijo Carlos Capistrán, economista en jefe para México de Bank of America.

«México es una economía muy abierta cuyo comercio total con Estados Unidos equivale a un 60% de su Producto Interno Bruto», agregó.

El antecedente

En las últimas cinco semanas, el peso ha perdido casi 30% frente al dólar, ubicándose este jueves en torno a las 23.60 unidades. Eso la vuelve la moneda emergente más depreciada en ese lapso, según datos del servicio de monitoreo de mercados Refinitiv Eikon.

El último golpe similar para el peso mexicano ocurrió al inicio de 2017, cuando perdió 20% en dos meses por los ataques del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

En ese año y los dos siguientes, las exportaciones crecieron a un ritmo promedio de 7%, frente a una caída promedio de 0.5% en los tres años previos. Los economistas atribuyen esto al abaratamiento de los productos mexicanos en el extranjero ante la debilidad del peso.

A diferencia de otros episodios, la economía de México enfrenta nuevos retos en medio del desplome de la moneda; además de un encarecimiento en las importaciones, las perspectivas sobre inversión se deterioraron.

El gobierno del presidente Andrés Manuel López organizó una consulta popular para frenar la construcción de una planta cervecera de Constellation Brands en Tijuana. Esto «mandó una señal de que no hay certidumbre jurídica», dijo BBVA México en una nota a clientes.

El T-MEC, otra ayuda para la economía

En 2019, México, principal socio comercial de Estados Unidos, tuvo exportaciones récord, de más de 460,000 millones de dólares (mdd). Además registró su primer superávit comercial anual en ocho años, alentado también por un desplome en las importaciones, según cifras oficiales.

El superávit comercial es que México vendió más al exterior que lo que compró de fuera.

«En un contexto recesivo, sería peor aún tener un peso apreciado. A la larga, será un peso competitivo (…) el movimiento en el tipo de cambio funciona como un amortiguador hasta cierto punto porque puede traer efectos colaterales», dijo Alberto Ramos, economista en jefe para México de Goldman Sachs.

«Se espera que la economía tenga una recuperación robusta en 2021, además porque la base (de comparación) será muy baja», agregó.

Los expertos también dijeron que la aprobación definitiva del remozado acuerdo comercial T-MEC es un factor positivo, pues la región norteamericana podría fortalecerse tras la guerra comercial entre Estados Unidos y China.

El daño al consumo está por llegar

No obstante, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha sido criticado por desestimar los efectos del virus en la economía local; ha dicho que tiene recursos para hacer frente a la situación y favorecer a las mayorías pobres de la nación de 126 millones de habitantes.

Ante la menor actividad económica local y el fuerte impacto previsto desde el exterior, diversos grupos financieros han recortado sus estimaciones de crecimiento, de consumo y de inversión para los siguientes trimestres.

«El shock de consumo en México todavía no llega porque todavía no imponen las medidas (de restricción), pero cuac

ndo las pongan, el consumo se va a caer 20 o 30%», dijo Benito Berber, economista en jefe para México de Natixis.

El consumo es muy importante para la economía nacional pues pertenece al sector servicios (ventas al menudeo y otros) que representa el 65% del PIB. Los otros dos sectores son el industrial y el agropecuario que sólo aporta alrededor de 4%.

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Con información de Reuters

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