- El desempleo en América Latina podría agudizarse el próximo año y superar el 11%, de acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
- El aumento se debe a posibles nuevas restricciones a causa de la segunda ola de Covid-19 en la región.
- Será importante que los países institucionalicen nuevas formas de empleo y formación a distancia para aminorar los efectos.
El desempleo en América Latina y el Caribe se ubicará en 10.6% en 2020. Este es el mayor nivel en más de una década, afectado por la profunda crisis desatada el Covid-19. Es posible que el empleo en la región entre a ‘terapia intensiva’ con una tasa de desocupación que rebase el 11%, de acuerdo con un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Varios países de la región, incluyendo México, han estado entre los más golpeados por los contagios y muertes por el Covid-19. Las restricciones para contener el brote provocaron pérdidas de empleos. Asimismo propició la quiebra de empresas y la consecuente caída en los ingresos de las personas.
La OIT proyectó en un informe la cifra para este año, un aumento de 2.5 puntos porcentuales más que en 2019. Esto equivale a 30.1 millones de personas desempleadas. La desocupación promedio en los tres primeros trimestres fue mayor que la observada para el mismo periodo de 2019.
«Es importante hacer notar que este dato refleja solo parcialmente los efectos de la pandemia en la dinámica laboral regional», dijo el organismo multilateral.
«Una gran cantidad de personas prefirieron pasar a una situación de inactividad antes que buscar empleos inexistentes. Esto contribuyó a moderar el efecto sobre la desocupación», agregó.
Nuevas medidas para controlar la pandemia aumentaría el desempleo en América Latina
Se espera una recuperación de las economías de la región para el próximo año. Pero todavía reinará la incertidumbre si se imponen medidas para controlar la pandemia ante una nueva ola del Covid-19. Esta situación podría generar un nuevo impacto en la tasa de participación laboral, la ocupación y desocupación, detalló el informe.
A ello se suma el retorno a la fuerza de trabajo de quienes salieron por la crisis sanitaria, con lo que el desempleo aumentaría a 11.2% en 2021.
La OIT destacó que la crisis generó nuevas políticas para intentar mitigar sus impactos. Algunos ejemplos son nuevos programas de educación a distancia, seguros de empleo para evitar despidos y el teletrabajo.
«Algunas de estas transformaciones resultan valiosas más allá de la crisis actual y constituyen mejoras que deberían ser institucionalizadas», precisó el informe.
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