- La cartera de crédito al consumo disminuyó 12% anual en diciembre, en términos reales.
- Este fue el octavo mes a la baja. Es decir, no se ha recuperado desde el confinamiento de mayo.
- BBVA Research advierte que se podría deteriorar la cartera de las instituciones bancarias.
Los bancos han reducido el otorgamiento del crédito al consumo desde el confinamiento sanitario de mayo hasta diciembre de 2020. En el último mes del año pasado, la banca reportó una disminución de casi 12% anual en términos reales. Así lo informó el área de análisis BBVA Research.
El Banco de México (Banxico) implementó acciones para que no se detuviera el flujo del crédito al sector privado durante la pandemia. Pero el segmento de consumo como tarjetas de crédito o créditos personales, entre otros, consolidó una caída nominal promedio de 2.8% en 2020. Este fue el peor descenso desde 2010, señaló la institución.
El crédito que se otorgó en tarjetas de crédito tuvo una disminución de 14% en términos reales en el mismo lapso. Este segmento de financiamiento a las personas representa 1 de cada 4 pesos (37%) del crédito al consumo.
De acuerdo con la institución, el desplome del financiamiento a tarjetas bancarias es reflejo de una nula recuperación del consumo en México durante noviembre y diciembre. El consumo no se logró reactivar a pesar del repunte que se espera por las compras de fin de año.
Esta caída en el consumo se anunció desde noviembre, cuando el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que el indicador del consumo privado cayó más de 7% en términos anuales.
De acuerdo con la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio (ANTAD), en diciembre este sector reportó una disminución en sus ventas de 6% en tiendas iguales. La caída se profundizó en enero con -8% anual.
No mejoran las condiciones para detonar mayor demanda de crédito
Para BBVA Research, esta menor entrega de financiamiento a las personas se debe a las restricciones y medidas de confinamiento. En diciembre, al menos 10 entidades se ubicaron en semáforo rojo, lo que representó más de la mitad de la economía.
Las personas actualmente son más cautelosas para endeudarse debido al entorno de pérdida de empleos, así como de menores ingresos.
«La desaceleración del consumo privado, resultado de la pérdida de empleos, de menores ingresos de los hogares y de la mayor cautela en el gasto ante un entorno de incertidumbre, se ha reflejado en una fuerte pérdida de dinamismo en el otorgamiento de créditos al consumo», indicó BBVA.
«Entre mayor sea el tiempo que tarde en reactivarse la actividad económica y la generación de empleos formales, y con ello se recuperen los flujos de ingreso de las familias, es de esperarse que la contracción en los distintos segmentos de crédito continúe profundizándose y prolongándose», añadió.
Una de las consecuencias sobre esta caída libre del crédito al consumo podría observarse en una menor calidad de la cartera de crédito de la banca, advirtió la institución.
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