- El consumo en México registró una disminución mensual de 0.78% en junio, y se mantiene por debajo de lo observado previo a la pandemia.
- La inversión ya muestra una tendencia a la baja, con una caída mensual de 1.8% en el mismo mes, según datos de Inegi.
- Se prevé que estos dos importantes indicadores para el crecimiento muestren debilidad por los efectos de la variante Delta.
El consumo privado en México registró su primera disminución desde febrero, con lo que está deteniendo su recuperación después de la crisis económica que se experimentó el año pasado por el Covid-19, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El economista Isaac Katz afirmó en su cuenta de Twitter, que probablemente el impulso del rebote experimentado tras la crisis del Covid-19 se acabó, lo que marcaría un nuevo retroceso para el indicador de consumo.
«Durante junio el consumo privado mostró señales de desaceleración en su recuperación, lo que es probable que se intensifique en los próximos meses debido a las peores condiciones epidemiológicas que se registraron en julio y agosto», de acuerdo con un reporte de Banco Base.
En julio y agosto, varios estados aumentaron la alerta a semáforo rojo y naranja por Covid-19. Los servicios, en especial el comercio, han sido una de las actividades más afectadas durante la pandemia. De hecho, con la disminución mensual en el consumo privado de junio, este indicador se ubicó 3% abajo de lo registrado en febrero de 2020, antes de la pandemia de Covid-19.
La caída mensual de junio se debió principalmente al consumo de bienes importados que disminuyeron casi 1%. En cuanto a los bienes y servicios nacionales, se registró un descenso de 0.5%. Dentro de este componente, el consumo de bienes cayó 2% mensual, mientras que los servicios lograron repuntar 0.7%.
En términos anuales, el consumo reportó un rebote de 19% debido a la baja base de comparación por el desplome económico del año pasado.
Se acaba el rebote del consumo, y la inversión estancada
Mientras el consumo pierde su empuje durante la primera mitad del año, la inversión en México se estancó en el sexto mes del año, un factor que podría inhibir el crecimiento económico. Esta sería la segunda disminución observada en los últimos cuatro meses.
La inversión fija bruta registró una caída de 1.8% con respecto al mes inmediato anterior. La disminución más fuerte fue en el sector construcción con una caída de casi 3% mensual, con una disminución de 4% en residencial y casi 3% en no residencial.
En cuanto a la inversión en maquinaria y equipo la disminución mensual fue solo de 0.4%. Pero en este componente cayó 3% en equipo de transporte nacional, pero con un aumento de 4% en el importado.
«Hacia adelante se espera que la inversión permanezca débil tanto por la incertidumbre derivada de la pandemia global, que a pesar de un avance significativo en la vacunación aún sigue siendo el mayor riesgo para el crecimiento económico, así como por la incertidumbre política-económica interna», señaló Banco Base.
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