• A medida que el mundo ingresa al tercer año de la pandemia, persisten los problemas de suministro para una variedad de productos de consumo.
  • Las consolas de videojuegos siguen siendo escasas, incluida la Nintendo Switch de casi cinco años.
  • Los problemas de suministro sin precedentes hacen que sea imposible saber qué consola tiene más demanda.
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La PlayStation 5 de Sony fue la consola más vendida en Estados Unidos el mes pasado, según la firma de investigación de mercado NPD Group.

En diciembre, el producto más vendido fue la Switch de Nintendo. En noviembre, el Black Friday, la Xbox Series S de Microsoft dominó las ventas, según el Adobe Digital Economy Index.

Esto tiene poco que ver con su popularidad comparativa, dijo a Insider el director ejecutivo del Grupo NPD, Mat Piscatella. En cambio, la fluctuación está influenciada en gran medida por la actual crisis de la cadena de suministro del consumidor, que está afectando todo, desde los muebles hasta las consolas de videojuegos.

«El aumento de la demanda impulsado por la pandemia que comenzó en marzo de 2020 finalmente limpió el inventario de hardware de consolas disponible», dijo Piscatella a Insider, y señaló que la industria comenzó a experimentar restricciones a finales del verano de 2020. «El mercado nunca ha sido capaz de ponerse al día a la demanda del consumidor desde entonces».

El mes pasado, por ejemplo, Piscatella dijo que la PlayStation 5 de Sony vendió más que las consolas Switch de Nintendo y Xbox de Microsoft, no solo porque es una consola muy popular y con una gran demanda, sino porque Sony tenía más oferta disponible que Microsoft y Nintendo.

Este no es un fenómeno nuevo, según Piscatella.

El suministro de consolas, que enfrenta restricciones debido a la escasez de chips, los problemas continuos de la cadena de suministro y los principales problemas de envío que afectan a todos los bienes de consumo, ha sido un «factor significativo» en las clasificaciones de ventas mensuales durante más de 1.5 años en este punto.

«La oferta ha desempeñado un papel en las clasificaciones de ventas de consolas desde alrededor de septiembre de 2020», dijo.

Como resultado, se ha vuelto casi imposible saber cómo es el mercado actual de los videojuegos.

«Las cuotas de mercado están oscilando de forma bastante drástica de una semana a otra y de un mes a otro, impulsadas completamente por la oferta de consolas», dijo Piscatella a Insider. «No sé cuál es la verdadera demanda de ninguna consola individual, ni el mercado de hardware. Las curvas de ventas en este momento no están normalizadas debido a estos desafíos de suministro».

Desafortunadamente, una cosa queda clara: sigue siendo casi imposible comprar fácilmente una consola de videojuegos en 2022.

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