- Algunos terminan en interminables surcos en el trabajo tratando de salir adelante.
- Se pierden promociones o aumentos, y los proyectos nunca parecen muy fructíferos.
- Es posible que estés saboteando tu propio éxito y ascenso con uno de estos 11 comportamientos comunes.
A menudo, las personas no se dan cuenta de que pueden existir ciertos comportamientos que les impiden el éxito o ascenso en el lugar de trabajo, ya sea en la progresión profesional o en proyectos laborales.
Si te ves rechazado por promociones, aumentos o simplemente estás luchando con las tareas diarias en el lugar de trabajo, es posible que ciertos aspectos de tu comportamiento te estén frenando.
Dicho esto, hay pasos que puedes tomar para asegurarte de no sabotearte involuntariamente.
A continuación se muestra una lista de 11 comportamientos que pueden estar obstaculizando tu ´èxito: los comportamientos enumerados se extraen de los consejos para Inc del empresario e inversionista John Rampton y de Anomodu Peter, un orador motivacional y YouTuber que escribió sobre el tema a partir de una respuesta escrita en Quora.
1. Ser poco realista en el trabajo
Es genial tener sueños. Te ayudan a alcanzar tus metas. El problema es que algunas personas se quedan atrapadas en sus sueños y se olvidan de vivir en el mundo real.
2. Permanecer en tu zona de confort obstaculiza tu ascenso
Si no sales de tu zona de confort de vez en cuando, te entrenarás para tener miedo de situaciones nuevas y desafiantes.
Todas las personas exitosas han tenido que salir y correr riesgos para lograr sus objetivos. El éxito no llama a tu puerta, tienes que salir y encontrarlo por ti mismo.
3. Temor al fracaso en el trabajo
El miedo al fracaso puede tener dos consecuencias: puedes estar demasiado asustado para comenzar un proyecto, lo que a menudo conduce a la posrtergación, o puedes comenzarlos, pero nunca terminarlos porque no alcanzan la idea que tenías en mente, lo que conduce al perfeccionismo.
El fracaso es una parte crucial del éxito. Para tener ´éxito en la vida, debes fallar una y otra vez para aprender de los errores. Aprende a ver el fracaso como un paso en la dirección correcta. Puede ser un paso bastante doloroso, pero de todos modos es un paso.
4. Aferrarse al pasado
El éxito a veces proviene de dejar atrás el pasado.
Por ejemplo, tal vez intentaste absolutamente todo para que un proyecto funcionara y te convenciste de que has gastado demasiado tiempo y energía en él para rendirte ahora. Aquí es cuando necesitas aprender a dejarlo ir.
Esto no significa que haya sido una completa pérdida de tiempo. Significa que has aprendido una lección y has aceptado los desafíos actuales que enfrentas.
5. Quejarse
Quejarse de por qué otros tienen éxito y tú no no es una gran manera de utilizar el tiempo y, en esencia, simplemente te estás eximiendo de la responsabilidad.
También te engañas a ti mismo para creer que los demás tienen éxito debido exclusivamente a la suerte, la oportunidad y el privilegio, en lugar de estas cosas junto a tu actitud y perseverancia.
Si quieres tener éxito, necesitas usar ese tiempo que pasas quejándote para trabajar más duro y aprender.
6. Falta de fe en uno mismo
Tal vez ya has tenido oportunidades de triunfar, pero te has dicho a tí mismo que aún no estás preparado o que crees que no estás preparado para el trabajo. Esto muestra una falta de fe en ti mismo.
La mejor manera de recuperar la confianza en uno mismo es buscar pequeñas victorias, por pequeñas que sean, y celebrarlas internamente.
7. Nunca terminar lo que empiezas
Si rara vez terminas lo que comenzaste, no tengas miedo de equivocarte en tus primeros intentos. Estás aprendiendo qué sistema funciona mejor para ti.
Incluso puedes hacer que tu objetivo sea fallar; tarde o temprano te sentirás capaz de hacerlo mejor y habrás desarrollado una compresión de cómo trabajas mejor.
8. Creer que tienes derecho a ser el mejor y por ello mereces un ascenso
Las personas que piensan que merecen ser las mejores tampoco tienden a llegar a ningún lado. Pasan más tiempo esperando que les llegue el éxito que tratando de lograrlo ellos mismos.
Si este eres tú, entonces necesitas aprender a convertir esta falsa creencia en tu motivación. Si quieres ser el mejor, significa que tienes la capacidad de poner esa creencia en acción y tomar las riendas de tu vida.
9. Ser pesimista en el trabajo
Si eres pesimista y quizá un poco derrotista, entonces no solo tienes que superar los obstáculos de la vida, sino también los que te enfrentan a ti. Esto pueden ser particularmente difíciles.
Tendrás que esforzarte mucho para obligarte a pensar en positivo.
Un buen comienzo es prestar atención a lo que te dices internamente. Si notas pensamientos que te lastiman, escríbelos. Modifícalos hasta que se conviertan en pensamientos motivadores y realistas.
10. Carecer de pasión limta el ascenso en el trabajo
El éxito nace de la pasión.
Sin pasión, no hay inspiración, motivación ni perseverancia cuando las cosas van mal. Entonces, si tienes un objetivo que realmente no te entusiasma y no puedes repensar por qué lo quieres, entonces puede ser el momento de buscar algo más.
11. Ser improductivo
Si descubres que no estás siendo lo suficientemente productivo, intenta registrar exactamente lo que haces en un día que consideres productivo. Ten en cuenta tus descansos, distracciones, chismes y cualquier laguna en la que no hagas nada.
Descubrirás que, aunque supuestamente pasaste ocho horas trabajando, en realidad solo has sido productivo durante dos o tres horas.
Descubre cuándo trabajas mejor, ya sea por la mañana, por la tarde o incluso por la noche.
Aprender a administrar tu tiempo es una habilidad subestimada que puede mejorar en gran medida tus posibilidades de éxito.
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