- Tres expertos opinan sobre cómo mantener a salvo tus relojes cuando no los llevas puestos.
- Guarda los documentos de autenticidad, la prueba de compra y la caja original para proteger su valor.
- Independientemente del precio, se aplican muchos de los mismos principios de almacenamiento y protección.
En lo que respecta a los relojes, hay un espectro de coleccionistas y usuarios diarios cuyos relojes cuestan desde el precio de una cena para dos personas en Nueva York hasta un título de cuatro años en la Universidad de Nueva York. Pero, en muchos sentidos, las mejores prácticas para guardar y proteger su reloj siguen siendo las mismas.
«Tiene algún tipo de valor, ya sea material o sentimental para cada persona», explica Jorge Ramírez, director de relojes del distribuidor de consignaciones de lujo Fashionphile, sobre la propiedad de cada reloj. «Quiere tenerlo protegido, ya sea un reloj menos o más caro».
Teniendo esto en cuenta, recurrimos a tres expertos para que nos den los consejos de cuidado más importantes, que como coleccionistas, practican.
Entre ellos se encuentran Ramírez y Paul Boutros, director de relojes de Phillips. Además participó Zoe Abelson, también conocida como @watchgirloffduty. Ella es veterana del sector de la relojería de lujo desde hace 11 años y propietaria de Graal Limited, que se dedica a la búsqueda de relojes para clientes privados.
Para cada uno de estos expertos y entusiastas, el énfasis no está simplemente en mantener su reloj a salvo de cualquier posible arañazo o daño en los engranajes; está también en preservar el valor de su compra durante el mayor tiempo posible. Sigue leyendo para conocer los consejos que se aplican tanto a los principiantes como a los coleccionistas avanzados.
Y en el marco de la XV edición del Salón Internacional Alta Relojería (SIAR) de México —que será en el hotel St Regis Ciudad de México del 19 al 21 octubre, estas son las mejores prácticas para guardar y proteger tu reloj:
Elige la mejor caja o estuche
Parece obvio colocar los anillos en un plato de la mesita de noche o colgar un montón de collares en un gancho para tener un mejor acceso. Pero ese almacenamiento casual de su reloj es un gran error, según los que trabajan con algunos de los más preciados del mundo. «Personalmente, lo que recomiendo es guardarlo dentro de una caja o estuche de reloj; en lugar de tenerlo en una estantería o mesita de noche», dice Ramírez. «La caja original es lo ideal», añadió.
Ramírez, que lleva ocho años trabajando en el sector de la relojería, explica que la caja original de cualquier reloj ofrece el mejor diseño para guardarlo. Esto debido a que incluye un cojín o almohada interior para la pieza. Por supuesto, si no se tiene la original, aún hay muchas opciones.
«Cualquier caja de buena calidad tendrá los relojes separados por separadores y asegurados alrededor de una pequeña almohada para que no se muevan», dice Boutros de Phillips. «Y en caso de que se te caiga la caja por alguna razón, estará cerrada y evitará que todo se salga y que se dañe más». Entre sus marcas favoritas de cajas para relojes están Venlo, Scattola del Tempo, e iconos de la moda de lujo como Cartier, Hermès y Goyard.
Otra opción, específicamente para los relojes automáticos, es una caja con cuerda que sirve para guardar, proteger y mantener en funcionamiento los mecanismos internos. Estos suelen ser instigados por el movimiento de llevar el reloj en la muñeca cuando no se lleva puesto. «Si tienes una gran colección de relojes, te recomiendo que adquieras una caja personalizada. Esto es porque obviamente, vas a cambiar de reloj cada día, cada semana o cada mes», explica Ramírez. Él sugiere marcas como Wolf, Versa, Diplomat y J.Queen.
«Mantener algunos de esos relojes en un estuche sería una buena práctica, especialmente cuando te metes en los movimientos de relojes más complicados; como el de fase lunar, calendario perpetuo o cualquier cosa que sea mucho más difícil de ajustar».
Sin embargo, el uso de una caja de cuerda es personal y no es imprescindible para todos los propietarios de relojes. Por ejemplo, Boutros no recomienda las cajas automáticas. «Los enrolladores giran para que las fresas den cuerda al reloj. Eso lo mantiene en constante funcionamiento, aumenta el desgaste de las piezas y acelera la rapidez con la que se necesitará el mantenimiento», dice.
«Es como mantener el motor del coche en marcha todo el tiempo». Sin embargo, los relojes tampoco deben permanecer sin tocarse y guardarse durante meses. «Si permanece durante un periodo muy largo, los aceites» —que permiten que el reloj funcione correctamente— «se secan». Recomienda utilizarlo una vez al mes y darle cuerda manualmente para mantener el movimiento lubricado.
Cómo viajar con su(s) reloj(es)
Viajar con uno o varios relojes puede suponer cierto riesgo, ya que hay que asegurarse de que estén a salvo de arañazos o de cualquier empujón agresivo en el equipaje. En resumen, es esencial contar con una funda de viaje adecuada.
Boutros dice que hay muchas opciones de buena reputación, que varían en precio, de marcas como Louis Vuitton, Buben y Zorweg. Y «a un precio más básico, está Casebudi. Es un pequeño contenedor redondo en el que puedes poner un reloj de pulsera y que tiene una carcasa dura que lo protege».
Abelson, que recientemente pasó más de tres años ayudando a abrir las oficinas de Watchbox en Hong Kong, también es fan de los estuches que facilitan tener opciones cuando se está de viaje. «Me encanta la facilidad de los estuches de viaje y los rollos de relojes que permiten guardar varios relojes juntos. Estoy constantemente de viaje y suelo querer tener opciones conmigo», dice, con referencia específica a un estuche favorito de A Collected Man. «Puedes guardar o viajar con hasta ocho piezas, pero el tamaño del estuche es compacto y a la vez protector».
Además, a Abelson le gusta utilizar los estuches de viaje también para guardar en casa. «Para mis relojes de ocasión especial o menos usados, los guardo en un estuche de viaje lo suficientemente largo para que mis relojes con correa queden planos», dice. «Así evito que la correa se ajuste a la curvatura de la típica almohada o estuche de viaje para relojes».
Para una opción de almohada o rollo, recomienda el Amaryll Watch Roll de IFL Watches. «Para mis relojes de pulsera, necesito rollos de reloj con almohadas pequeñas/flexibles para que mis pulseras se envuelvan y cierren correctamente. Esto ya que tengo una muñeca relativamente pequeña. Muchos estuches de viaje tienen almohadas grandes y firmes que no se comprimen. Así que sólo sirven para que quepan las pulseras más grandes, pero este producto de IFL Watches me funciona bien.»
Mantenlos a la vista
Los expertos coinciden en que, por encima de todo, la protección es la máxima prioridad a la hora de elegir dónde guardar un reloj. Pero no hay que olvidar que una colección no tiene por qué estar siempre escondida fuera de la vista. «Tener una bonita caja de presentación protege los relojes, pero también permite presentarlos de forma estupenda a amigos y familiares cercanos para que compartan su colección», dice Boutros. Recomienda una caja de presentación que garantice que los relojes estén acolchados, espaciados y puedan cerrarse con llave por seguridad.
Además, los coleccionistas pueden apreciar el enfoque de Abelson. «Me gusta tener mis relojes a la vista y accesibles, así que escoger mi reloj forma parte de mi rutina diaria. Tengo soportes para relojes de The Watch Stand que tienen un bonito diseño y son lo suficientemente minimalistas como para encajar con el resto de la decoración de la casa», comparte. Explicó cómo los relojes pueden servir como algo más que un accesorio de moda personal. «Me encanta tener mis relojes expuestos como piezas de arte».
Las mejores condiciones de almacenamiento
Aunque una caja o estuche sólido es imprescindible para guardar los relojes, una protección total significa evitar cualquiera de los peores enemigos de un reloj: la luz solar directa, la humedad, los espacios abarrotados y los imanes.
«Todo se reduce a los pequeños detalles», dice Ramírez sobre los consejos de protección de los relojes. «La radiación UV puede hacer que la esfera se desvanezca, que el cristal se decolore, no le hace ningún bien al reloj». Al igual que con los productos que supervisa en Fashionphile, los relojes deben guardarse en lugares que estén a una temperatura inferior a la del ambiente y secos.
«Aunque no se sude mucho, la transpiración puede penetrar en el reloj», añade Boutros sobre los peligros de la humedad en los relojes, incluidos los que son resistentes al agua. Recomienda utilizar un paño suave de microfibra o de 100% algodón para eliminar el exceso de humedad/sudor. Y acudir a un relojero una vez cada dos años para que compruebe la resistencia al agua.
«Otro consejo básico es evitar que el reloj se raye», añade Boutros. «No los guarde junto a objetos metálicos, no los golpee contra otros relojes y evite llevarlos junto a pulseras metálicas». Esto subraya aún más por qué es preferible una caja a guardar un reloj en un cajón del buró junto a cualquier cosa que pueda causarle un golpe o un arañazo.
Mejor aún, mantenerlo guardado lejos del ordenador, el teléfono o los dispositivos domésticos inteligentes. «Recomiendo mantener los relojes alejados de los aparatos electrónicos para evitar la magnetización, que afecta a la sincronización del reloj», dice Abelson.
Deja el pulido a los profesionales
A pesar de los consejos anteriores, los arañazos ocurren. Y aunque un paño de microfibra limpio puede estar bien para quitar el polvo o el sudor, los expertos insisten en que dejes el pulido sólo a los profesionales.
«Si decides pulirlo, llévalo a un distribuidor autorizado que se asegure de que está bien acabado y pulido», dice Ramírez. «Una vez que se pule un reloj se quita metal» —ya sea acero, oro o platino— «que nunca se puede volver a poner y con ese pulido se eliminan los bordes, contornos y curvas originales creados en la fábrica que dan mucho carácter al reloj. Eso se pierde por completo cuando se pule».
Proteje los certificados
La protección de los relojes no sólo consiste en mantener la integridad de la propia joya, sino también en proteger el valor de un artículo preciado. Por eso, además de los hábitos mencionados, los expertos insisten en la importancia de conservar toda la documentación. Estos son el certificado de autenticidad, los registros de compra e incluso considerar la posibilidad de grabar videos de su colección que pueda compartir con su compañía de seguros en caso de que ocurra algo.
«Todo lo que viene con el reloj cuando lo compras, incluso la caja», dice Ramírez, «añade cientos de dólares de valor al reloj, así que guarda todas esas cosas».
AHORA LEE: Cuando me hice millonario compré autos y relojes caros. Ahora pienso mucho en cómo gasto mi dinero
