• Aunque muchos te digan lo contrario, esas recetas mágicas no existen, aprender a invertir no es un proceso rápido.
  • Así como ha crecido el interés por invertir, se han incrementado el número de academias que te prometen ser millonario.
  • Estos son tres focos rojos que te indican que una academia no es seria para aprender a invertir.

¿A quién no le gustaría ser millonario o tener la fórmula para serlo? Aunque muchos te digan lo contrario, esas recetas mágicas no existen y aprender a invertir no es un proceso rápido, aunque algunas academias o cursos te lo prometan.

En los últimos 10 años ha crecido el interés por invertir y, con eso, también el número de cuentas directas en las casas de bolsa. En 2011, se tenían alrededor de 202,342 cuentas de este tipo; sin embargo, cuatro años después el crecimiento de este sector subió a 10,000 cuentas nuevas anualmente. En 2019, ascendían a 298,000.

Y con la pandemia, el furor por las inversiones creció a un nivel sin precedentes: 217%. Así, 2020 terminó con 947,271 cuentas directas que, al cierre del primer trimestre de 2021 se siguen multiplicando —a 1.3 millones, aproximadamente.

¿Por qué los mexicanos están más dispuestos a invertir ahora de lo que estaban antes?

De acuerdo con Gerardo Aparicio Yacotu, director de la Escuela Bolsa Mexicana, el incremento en el interés por aprender a invertir se ha dado por tres factores principales:

  • Se han democratizado las inversiones, es decir, los montos ya no son inalcanzables. Hoy existen inversiones que te permiten comenzar hasta con 100 pesos.
  • La sociedad actual es más proactiva, más habituada a buscar productos o servicios a través de las herramientas con las que cuentan, como los teléfonos inteligentes. Somos la sociedad del conocimiento, y eso va eliminando algunos miedos que se tenían al invertir. Además de un fuerte impulso a la educación financiera de la sociedad.
  • La pandemia, sin duda, impulsó la necesidad de multiplicar el dinero. Viene una época de vacas flacas, y hay que prepararse para ella, dijo el director de la Escuela Bolsa Mexicana.

Sin embargo, con esta nueva ola de inversiones, también se han multiplicado academias que prometen volverte millonario en semanas; o lo que es peor “garantizan” la recuperación de una inversión de manera exprés, advierte Aparicio Yacotu.

Estos son algunos de los aspectos de los que debes estar pendiente si buscas herramientas para aprender sobre inversiones. Tómalos en cuenta para evitar tener una mala experiencia o, incluso, perder tu dinero.

1. Los aprendizajes y ganancias exprés no existen… y si te los ofrecen, desconfía

No hay ningún lugar en el que puedas aprender a invertir como un experto en cuestión de horas. Tendrás que dedicarle tiempo, pues el mundo financiero es complejo.

Para conocer cómo se mueve el dinero existen carreras, diplomados o maestrías que los profesionales tardan años en completar. Por eso, la promesa de enseñar este tipo de herramientas de manera exprés es irreal.

Si esta es la promesa de valor de una academia, lo más probable es que no sea verdad. Incluso, inversionistas han relatado a Business Insider México que, una vez en el curso, organizadores intentaron venderles otros programas en lugar de apoyarlos.

2. Nadie te puede garantizar rendimientos futuros por tu inversión

No existe ninguna metodología ni ningún esquema que te pueda garantizar un rendimiento futuro.

“Debes dudar de aquella persona que te garantiza un rendimiento después de un curso, pues en el ámbito de las inversiones hay muchos elementos que pueden influir en el comportamiento de los activos que se venden en el mercado”, dijo Aparicio.

Por el contrario, las academias deben hablar primero de los riesgos que se corren antes, para que los inversores los conozcan y los identifiquen. Así, tendrán una idea más clara del mercado en el que quieren estar.

3. ¿Un curso regulado por un país extranjero? Mmmm… mejor no.

Imagina que te ofrecen tomar un curso de certificación profesional avalado por el Ministerio de Educación de Latveria. ¿Te animarías a tomarlo?

Seguramente primero investigarías un poco sobre su regulación y te surgiría la duda de si es compatible, o no, con la de México. Además, en este caso específico, quizás quisieras cotejar la existencia del Ministerio de Educación (o del país que, por cierto, no existe).

La pregunta es: si tomarías esas precauciones en otro ámbito de tu vida, ¿por qué no con el dinero?

Las instituciones financieras que operan en México deben estar sujetas a la regulación mexicana. En el caso de los cursos, las autoridades ponen especial cuidado en quién está autorizado para ofrecerlos e, incluso, la Asociación Mexicana de Instituciones Bursátiles (AMIB) tiene en su portal un registro de certificaciones público.

Además, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) obliga a que cualquier persona que promueve y publicita un producto o servicio de inversión esté certificada por la AMIB para evitar a los charlatanes o defraudadores.

Por eso, desconfía de los sitios no mexicanos que operan aquí. No se vale que te digan que están registrados en otro país, pues no conoces su normativa ni si te avala como usuario.

Inversionista, date cuenta

Si lo que te prometen las academias o cursos que ves en internet es demasiado bueno para ser verdad, seguramente es porque no son verdad. Tómalo en cuenta y evita perder tu tiempo y tu dinero.

En ese sentido, quienes ofrecen fórmulas mágicas, tratan de generar una atmósfera de necesidad exprés, de premura, para que tomes una decisión inmediata: “Si quieres este curso que en el mercado cuesta 1,000 dólares; tenemos una promoción con 50% de descuento, pero tienes que contratar ahora”, explica el director de la Escuela Bolsa Mexicana.

Para evitar eso, haz las preguntas adecuadas, recomienda Gerardo Aparicio Yacotu. Estas pueden ser desde «¿qué me va a dejar este curso?» o «¿quién me lo va a dar y cuándo?» hasta «¿Cuál es su intención?» o cuánto debes invertir en él.

Nunca vamos a tener en su totalidad el conocimiento financiero, porque las noticias cambian momento a momento; nos podemos acercar, pero de ahí a prometerte que lo sabrás todo, hay una gran diferencia”, finaliza el directivo.

¿Tienes dudas o quieres contarnos algo sobre cursos o academias de inversión? Te leemos en editorial@businessinsider.mx

AHORA LEE: Desde ir a «academias» para invertir hasta elegir un mal instrumento —estos errores costaron mucho dinero a inversionistas novatos

TAMBIÉN LEE: Estos son 16 conceptos de inversión que deberías conocer si estás a punto de entrar a este mundo

Descubre más historias en Business Insider México

Síguenos en FacebookInstagramLinkedIn y Twitter.