• No tires el aceite de cocina por el desagüe, ni por el inodoro o en el jardín.
  • Puedes tirar el aceite de cocina frío dentro en determinados centros de reciclaje.
  • También puedes aprovecharlo más limpiándolo adecuadamente y refrigerándolo para utilizarlo nuevamente.

Cocinar con aceite de cocina de cualquier variedad puede transformar la textura y el sabor de los alimentos, pero cuando se trata de limpiar, deshacerse del aceite usado puede ser menos agradable. Y hacerlo correctamente es importante no solo para la salud de su hogar sino también para la salud de la comunidad y del medio ambiente en general.

«El agua que pasa por las tuberías de nuestras casas o restaurantes va a la planta de tratamiento, se trata y luego la bebemos. Así que la ingerimos», dice Jennifer Booker, becaria del Programa de Impacto de la Fundación James Beard en el marco de la iniciativa Waste Not.

«Si se añaden contaminantes como el aceite al agua, se crea lo que se llama FOG [sebo, aceite y grasa]», dice Booker. «Se necesita un proceso más largo [y] más productos químicos para tratar el agua para que luego podamos beberla. Se convierte en algo insalubre si añadimos mucho aceite [y] grasa vieja a nuestro sistema de agua».

Además, deshacerse del aceite de manera incorrecta puede atraer plagas y causar daños en su hogar. Siguiendo los métodos correctos te aseguras de sacar el máximo partido a tu aceite de cocina.

1. Contener y tirar

Contener y luego tirar el aceite de cocina con la basura normal es un método común y viable para eliminar el aceite. Después de cocinar, deja que el aceite se enfríe y ponlo en un recipiente bien cerrado. «Ese recipiente puede ser la botella de aceite en el que venía inicialmente o una bolsa Ziploc», dice Hill Booker.

«Hago otro paso, en el que me aseguro de que esté helado», añade Hill Booker. A menudo congela el aceite antes de tirarlo a la basura, especialmente «si es durante los meses más cálidos. Así no corro el riesgo de que el recipiente tenga fugas o se derrame».

Congelar con antelación también significa que puedes contener el aceite con un recipiente biodegradable, en lugar de plástico. El aceite en estado sólido no se filtra a través de los recipientes biodegradables como lo hace el líquido.

Un consejo rápido: para pequeñas cantidades de aceite, empápalo con papel de periódico, restos de comida, arena para gatos u otras sustancias absorbentes que se tirarán de todos modos.

2. Almacenar y reutilizar

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Si el aceite solo se ha utilizado una vez, puedes limpiarlo, almacenarlo y reutilizarlo en la cocina. Esto alarga su vida antes de que sea inevitablemente desechado.

En primer lugar, limpia el aceite frío colándolo a través de un filtro. Booker prefiere los filtros de café de papel: «[Son] muy asequibles y no dañan el medio ambiente».

Después de colarlo varias veces —Booker suele hacerlo tres—, pon el aceite en un recipiente limpio y hermético y guárdalo en el refrigerador. Nunca almacenes el aceite usado a temperatura ambiente, ya que se echará a perder rápidamente. El aceite de cocina refrigerado y bien almacenado durará 30 días.

Cuando llegue el momento de utilizar el aceite almacenado, saca la cantidad necesaria y déjalo templar lentamente durante 30 minutos o toda la noche. Este paso, explica Booker, es beneficioso porque «se necesita menos gas para calentar el aceite caliente que el aceite frío recién salido del refrigerador».

La mayoría de las veces, «puedes reusarlo dos veces», es decir, tres usos totales. Sin embargo, confía en tus sentidos para detectar signos de deterioro. Los distintos aceites se descomponen a nivel químico a ritmos diferentes, y esto da lugar a una cocina menos eficiente y menos saludable. Los tres principales signos de que el aceite no debe reutilizarse son:

  • Sedimentos en el fondo del aceite: Si el aceite bien colado todavía tiene sedimentos que parecen «polvo de carbón», ya no es bueno para su reutilización. Estos sedimentos, aunque son visibles a temperatura ambiente, pueden no serlo en el aceite enfriado.
  • Sustancias gelatinosas en el fondo del aceite: Si el aceite almacenado en el refrigerador, debidamente colado, parece tener sustancias gelatinosas en el fondo, tampoco lo reutilices. Esta sustancia aparece sobre todo en el aceite utilizado para cocinar proteínas animales y es más visible en el aceite frío.
  • Olor: Si el aceite usado huele un poco mal, mejor deshazte de él.

Ten en cuenta que el aceite adquiere el sabor y el olor de los alimentos que cocinas. «Si estás friendo pescado o cebollas, no necesariamente lo usarías para cocinar algo que es mucho más delicado; o con un sabor o aroma mucho más suave», dice Booker. «Si estás cocinando verduras para vegetarianos o veganos, no utilizarías un aceite usado para cocinar proteínas animales».

Toma también en cuenta la contaminación cruzada. Por ejemplo, el aceite usado para freír donas no debería usarse cuando se cocina para alguien con alergia al gluten.

3. Visita un centro de reciclaje

Algunos centros de reciclaje recogen el aceite de cocina y lo tratan para convertirlo en combustibles como el biodiésel o el biogás. Si no puedes encontrar información fiable sobre su reciclaje en la página web del centro Booker sugiere llamar a quien sea responsable de los servicios de saneamiento o agua. «Ellos sabrán dónde están los centros de reciclaje y qué tipo de artículos aceptan», dice.

También recomienda investigar en la comunidad. «Cada vez hay más gente que encuentra maneras de reciclar el aceite», dice. «Cuando enseñaba aquí en Atlanta, había un señor que venía a buscar nuestro viejo aceite de freír. Esto porque había convertido su motor para poder trabajar con todo tipo de aceite vegetal».

Cómo no deshacerse del aceite de cocina

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No lo eches por las coladeras de casa. «Si lo echas por el desagüe, se va a acumular», dice Booker. «Piensa en todo lo demás que viertes por ahí, podría haber restos de jabón; si lo tiras por el inodoro, puedes tener trozos de papel higiénico o residuos. Puede haber pelos en el desagüe procedentes de la ducha». Añadir aceite a la mezcla agrava esa obstrucción, provocando atascos y daños en las tuberías.

Limpiar el aceite con agua caliente no hace más viables las tuberías del hogar. El aceite «no llega hasta la planta de tratamiento de agua como un líquido caliente», dice Booker, por lo que en cierto momento contribuirá a la obstrucción del desagüe; incluso si ese atasco se produce fuera de su casa. Además, el aceite es perjudicial para el sistema de agua.

No lo eches en el patio. Independientemente del tipo de aceite y de lo que se haya cocinado en él, el aceite usado que se vierta en el jardín atraerá animales y plagas. Por ello, tampoco «debería formar parte de tu plan de compostaje».

Un desagüe pluvial tampoco es la opción. Estos, al igual que los desagües domésticos, no están pensados para echar el aceite. Al igual que tirarlo en el patio, «atraerás plagas como ratas y cucarachas», dice Booker, «y de nuevo, es malo para el sistema de agua».

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