• Desde el inicio de 2020, la industria inmobiliaria en México presentó una marcada fluctuación originada por la disminución de actividades y la incertidumbre sobre los precios del valor de cierre de los inmuebles.
  • A comienzos del año pasado, el mercado inmobiliario vislumbraba un crecimiento de al menos 4% .
  • La inesperada situación de la pandemia originó que la industria presentara una contracción real de hasta el 15% al cierre de 2020.
 

Desde el inicio de 2020, la compra y venta de vivienda en México presentó una marcada fluctuación. Esta fue originada por la disminución de actividades resultado de la llegada del Covid-19 a nuestro país. Otro factor a considerar fue la incertidumbre sobre los precios del valor de cierre de los inmuebles. 

Durante los últimos 12 meses estas oscilaciones han estado marcadas por dos grandes caídas y dos momentos de recuperación.

A comienzos del año pasado, el mercado inmobiliario vislumbraba un crecimiento de al menos 4% contra el cierre de 2019, según la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI); este panorama cambió radicalmente durante el primer trimestre debido al confinamiento.

Esta inesperada situación originó que la industria presentara una contracción real de hasta el 15% al cierre de 2020, según cifras de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi).

“Durante los primeros meses de la llegada de la pandemia a nuestro país, y hasta los meses de julio-agosto, la industria inmobiliaria se mantuvo en bajos niveles de operaciones, lo cual desencadenó una ola en la disminución del valor en la oferta”, afirma Edgar Erives, Country Manager de Mudafy México.

Según el experto, luego del levantamiento del semáforo rojo, en el segundo semestre de 2020, se mantuvieron a la baja las tasas de interés en instituciones financieras; esto impulsó a la industria a través de empresas de tecnología como las proptech. 

“Las operaciones se reactivaron de manera marcada, generando lo que llamamos el efecto embudo; que este fenómeno de que todos los compradores tuvieron que esperarse durante el confinamiento para concretar sus compras inmobiliarias”, agregó. 

El final de año significó un repunte en la compra y venta de vivienda en México

En septiembre, cuando compradores, vendedores e inmobiliarias aprendieron a convivir con la llamada “nueva normalidad”, el escenario del real estate mantuvo un alza en la industria. Esto ayudó a reducir el impacto del descenso de meses anteriores.

Así, lo que pudo ser el escenario ideal que gestara una crisis en el sector, se vio contenida; ello en gran medida por la creciente necesidad de los vendedores de contar con solvencia monetaria para afrontar el impacto a la salud que representó la emergencia sanitaria y la pérdida de empleos. Además, se sumó el incremento de movilidad hacia regiones menos pobladas. 

Con ello la industria llegó al cierre de año con una aportación del 6% al PIB nacional. De acuerdo a especialistas, desde 2019 el sector tradicional inmobiliario había mantenido una repercusión a la baja, lo cual se agudizó en 2020.

«En este escenario, las nuevas tecnologías aplicadas al real estate tomaron un papel fundamental, ya que brindan la oportunidad de continuar con la búsqueda de inmuebles de manera remota y conocer sus detalles desde la comodidad del hogar. Las proptech optimizan la utilización del marketing digital para poner en contacto de forma eficiente a compradores y vendedores, reduciendo sustancialmente traslados innecesarios y tiempos en adquisición de propiedades», agrega Erives.

Diciembre el mejor mes

Para la primera quincena de diciembre, el sector del real estate volvió a presentar un repunte. Esto gracias al aumento de liquidez en los compradores y urgencia en trámites de escrituración previo al cierre de notarías. “Desde Mudafy, en este periodo vimos un crecimiento de hasta el 30% en operaciones contra nuestro mejor mes”, señala el experto de Mudafy.

Lamentablemente, este avance no logró permear la segunda presencia de semáforo rojo en las principales ciudades del país. Se generó un nuevo descenso en el número de transacciones durante enero 2021.

Para 2021 los pronósticos son buenos

Actualmente, la compra y venta de vivienda en México presenta una aparente recuperación; ello gracias en parte a la disminución en casos de contagio, reinicio de la jornada notarial y plusvalía que representa una inversión a largo plazo como esta de hasta 17% en los primeros 5 años, según Expertos de Internacional de Inversiones (IDEI).

La incertidumbre generada por la inestabilidad en la industria durante los últimos 12 meses dio apertura para que compradores independientes tuvieran oportunidad de presentar montos de oferta de hasta -10%, cerrando negociaciones de entre 5% y 7% por debajo del precio de lista.

En cuanto a los inversionistas, se detectaron montos de oferta hasta 20% debajo del precio de lista, llegando a cerrar operaciones entre 10% y 13% por debajo del valor mercado.

Edgar Erives proyecta que a lo largo de 2021 los precios de vivienda se presentarán más estables y las ofertas menos agresivas. Esto se deb a factores como la disminución de la incertidumbre en compradores e inversionista, baja en niveles de contagio de Covid-19 y la llegada de vacunas a nuestro país. 

Esto denota que la industria inmobiliaria seguirá moviéndose al alza; adem cada vez necesitará mayor empuje tecnológico que eficiente, facilite y reduzca tiempos de adquisición de una propiedad.

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