- Según una encuesta reciente, 7 de cada 10 trabajadores tecnológicos están pensando en dejar sus trabajos el próximo año.
- Pero, cuando saltamos al siguiente trabajo, puede ser difícil saber si nuestro giro es movimiento o progreso.
- Evalúa estos cuatro aspectos para ver si estás pasando por una sensación de inquietud o si realmente vale la pena renunciar para perseguir esa nueva oportunidad.
Cuando trabajaba en Facebook, uno de mis carteles favoritos que recubren las paredes del campus era un llamativo tono de rojo brillante con la silueta de un caballito mecedor infantil. En negrita, todo en mayúsculas y letras blancas decía: «No confundas el movimiento con el progreso».
No puedo evitar pensar en esta línea cuando escucho sobre mis amigos, colegas y clientes que están pensando en pasar de un trabajo a otro. Especialmente durante lo que algunos han comenzado a llamar «La Gran Renuncia». De hecho, según una encuesta reciente, 7 de cada 10 trabajadores tecnológicos están pensando en dejar sus trabajos el próximo año.
Pero cuando saltamos al siguiente objeto brillante, puede ser difícil saber si nuestro giro es movimiento. ¿Estamos simplemente balanceándonos de un lado a otro sin dejar de estar quietos en un solo lugar, o realmente estamos avanzando significativamente en nuestra carrera?
Con una carrera tecnológica, y la alta demanda de trabajos como diseño de UX, ingeniería de software y desarrollo, muchos de nosotros tenemos la suerte de poder saltar a la siguiente oportunidad atractiva. Antes de renunciar, haz una pausa.
4 cosas que debes considerar antes de realizar un cambio de trabajo
Evalúa estos cuatro aspectos para ver si estás pasando por una sensación de inquietud o si realmente vale la pena renunciar para perseguir esa nueva y brillante oportunidad.
1. Recuerda lo que te entusiasmó de tu trabajo actual
Uno de mis clientes, llamémosle Chido, cambió de trabajo cada dos años. Trabajar en una empresa de hardware de realidad virtual le dio la emoción de desarrollar nuevas formas para que los humanos interactúen con la tecnología. Trabajar en Apple le proporcionó un equipo de liderazgo que estaba realmente obsesionado con la calidad y el diseño. Trabajar en una empresa de software empresarial le permitió apoyar a las personas que estaban motivadas para completar las tareas básicas del trabajo.
Para Chido, la emoción fue conquistar nuevos tipos de trabajo. Piensa en el día en que aceptaste tu oferta de trabajo y recuerda qué es lo que más te entusiasmó de la oportunidad. Considera no renunciar si esa emoción todavía existe. Y si se desvanece, busca un deseo similar en lo que sigue.
2. Concéntrate en las victorias
Es fácil para nosotros caer en un patrón de desfogue. Puede ser el resultado de la última reorganización o cómo el liderazgo está excesivamente enfocado en lograr métricas sin considerar la calidad o la cultura de la empresa. En cambio, haz una pausa para concentrarte en las victorias.
Realiza un seguimiento de lo que va bien con tu puesto, tu equipo y la dirección de la empresa. Busca maneras de hacer más de lo que va bien.
3. ¿Qué quieres aprender?
Muchos de nosotros nos enfocamos resueltamente en los resultados para nosotros y nuestros equipos. Nos preguntamos, ¿cuándo obtendré ese ascenso?, ¿cómo logramos esos objetivos de ventas?, ¿cuál es el camino hacia el lanzamiento de un producto? En su lugar, considera una pregunta diferente que esté más centrada en el proceso. Pregúntate: ¿Qué es lo que más deseo aprender en este momento? Luego, formula un plan de aprendizaje.
Cuando Chido se hizo esta pregunta, se dio cuenta de que quería ver un producto a través de muchos ciclos de iteración y comentarios de los clientes.
4. ¿Qué relaciones te dan energía?
Finalmente, piensa en tus relaciones laborales actuales. ¿Cuáles son las que te generan un sentido de comunidad, apoyo y entusiasmo? Puedes ser un líder inspirador, un jefe cariñoso o un miembro del equipo que brinda comentarios directos útiles.
Chido se dio cuenta de que se sentía más lleno de energía en el trabajo cuando los líderes multifuncionales de los equipos de ingeniería, productos y diseño trabajaban juntos en colaboración.
Al evaluar el próximo movimiento profesional, considera estas cuatro facetas y pregúntate si estás listo para dejarlas de lado y renunciar a puesto actual. Piensa en cómo podrían cambiar en el próximo trabajo. Considera si esa nueva oportunidad de ensueño cambiará significativamente las cosas para ti o si te mudas simplemente por moverte.
Después de que Chido contempló estas cuatro facetas, decidió renunciar su trabajo, pero no por un objeto nuevo y brillante. Eligió dejar de moverse hacia adelante y hacia atrás, explorando nuevas industrias pero sin progresar en su carrera. En cambio, regresó a un trabajo anterior con un gerente en quien confiaba.
Anhelaba la profundidad del lanzamiento y el aprendizaje a través de proyectos a largo plazo con un equipo de apoyo. Evitó las dificultades de los primeros 90 días con una nueva empresa y sabía que regresar a su lugar de trabajo anterior le daría un tiempo valioso para trabajar en sus proyectos creativos paralelos. Chido encontró una manera de lograr tanto movimiento como progreso en su carrera.
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