• Un informe de un organismo de control encontró casos de fuerza excesiva, negligencia y abuso en las instalaciones del Departamento de Seguridad Nacional en Arizona.
  • El personal de la instalación también utilizó agentes químicos y gas pimienta contra los detenidos, según el informe.
  • La instalación tampoco cumplió con las pautas de Covid-19, lo que puso en riesgo a los migrantes.

Una instalación de inmigración en Arizona utilizó fuerza excesiva, abusó verbalmente de los inmigrantes y descuidó sus necesidades médicas, según el inspector general del Departamento de Seguridad Nacional.

Un equipo de la oficina del inspector general inspeccionó el Centro Correccional de La Palma en Eloy, Arizona, entre agosto y noviembre de 2020. En él «identificó serios problemas con respecto al cuidado y tratamiento de los detenidos», según un informe.

El informe dijo que el personal de la instalación utilizó agentes químicos, incluido gas pimienta, bolas de pimienta y otros agentes, contra los detenidos que protestaban.

El informe incluye imágenes de video de vigilancia en la instalación, que está a cargo de la agencia de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).

Las fotos muestran al personal usando agentes químicos en los detenidos y sin hacer cumplir las pautas de Covid-19, como el uso de cubrebocas y el distanciamiento social.

También documentó varios casos de abuso verbal. Un oficial «usó lenguaje profano y abusivo para ridiculizar a un detenido»; otro usó un insulto racial contra un detenido y colgó su llamada telefónica con familiares.

El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas niega las acusaciones de abuso a inmigrantes

ICE no respondió de inmediato a la solicitud de comentarios de Insider; sin embargo, la agencia rechazó las acusaciones del informe en una respuesta formal al inspector general.

«ICE tiene preocupaciones importantes sobre la precisión de los hallazgos en el informe preliminar de la OIG», dijo la respuesta. Agregó que los hallazgos «se basan en acusaciones no corroboradas de los detenidos» y que el equipo de auditoría del inspector general no entrevistó al ICE ni a los representantes de las instalaciones contratantes involucrados en dos de los incidentes relacionados con el uso de la fuerza.

ICE también dijo que el informe «omite el contexto necesario en varios casos», incluidas las acusaciones de que la unidad médica no tenía suficiente personal. ICE dijo que a pesar del hecho de que solo 51 de los 72 puestos médicos tenían personal, el nivel de personal de 72 puestos fue diseñado para una población de detenidos mucho más alta de 2,340; la población diaria promedio durante la auditoría del inspector general fue de solo 1,542.

El informe se produce en medio de un creciente escrutinio sobre el manejo que hace el gobierno de los inmigrantes detenidos

Una reciente afluencia de niños migrantes no acompañados en la frontera entre Estados Unidos y México ha avivado las preocupaciones sobre la práctica y la moralidad de detener a menores en instalaciones administradas por el gobierno.

Los inmigrantes en las instalaciones de La Palma, sin embargo, son distintos de la ola actual de inmigrantes que se acercan a la frontera. Los niños en la frontera primero son detenidos por la agencia de Aduanas y Protección Fronteriza y esperan ser trasladados a refugios. Después son colocados con familiares o patrocinadores mientras se procesan sus casos de inmigración.

La instalación de La Palma alberga a detenidos varones adultos detenidos por ICE. Estros son considerados como ilegales en los Estados Unidos y pueden ser deportados.

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