México necesita menos tiktokeros y más estudiantes de carreras STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, por sus siglas en inglés).
De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en el 2030, las carreras STEM son las que predominarán en el mercado laboral. Mientras tanto, me preocupa que en nuestro país seguimos graduando estudiantes de carreras para las cuales no habrá un mercado laboral, ni local, ni global, ni significativo en el 2030.
Si aún no sabes cuáles son las carreras STEM o las carreras del futuro éstas son inteligencia artificial, ingeniería robótica, ingeniería ambiental, nanotecnología, análisis de datos, programación, aprendizaje automático o por computadora, desarrollo de software, por mencionar algunas.
Los estudiantes las eligen en un mínimo; los mexicanos, muy poco y las mujeres, todavía menos. Las licenciaturas con mayor número de egresados no coinciden con las profesiones de mayor demanda en México, ni hoy ni para 2030. Simplemente la pandemia provocada por el Covid-19 hizo evidente la falta de profesionales de la salud, técnicos e ingenieros.
Las profesiones STEM son, en promedio, las mejores pagadas y demandadas por las empresas. De acuerdo con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en 2018, el 40% de los jóvenes mexicanos no contaba con las habilidades y herramientas necesarias para poder ingresar en este ámbito laboral y el 80% no estaba interesado en estudiar alguna rama de estas ciencias.
¿No suena lógico alinear la oferta de la de carreras y los planes de estudio a las necesidades de México? ¿Y si empezamos a graduar más gente para la que sí va a haber trabajo en 2030?
México debería copiarle a India
¿Alguna vez te has preguntado por qué hay tantas personas de India en el sector tecnológico? Hace muchos años, el gobierno de India hizo que su oferta de carreras atendiera a las necesidades laborales futuras dentro y fuera del país. Incluyeron en sus planes educacionales carreras STEM con énfasis en tecnología.
¡No es casualidad que muchos de los desarrolladores fullstack, ingenieros frontend y codificadores Java sean de India! Todo fue planeado.
Si bien, desde hace tiempo, fue en India donde muchas empresas de Occidente tercerizaron servicios, fue posible gracias a dos factores: se habían preparado en carreras tecnológicas y hablaban inglés, como consecuencia de la influencia británica.
Además, la plataforma educativa de India es de las más sólidas y, culturalmente, India es un país donde la familia está muy involucrada en la educación de los hijos. Estudiar carreras tecnológicas tiene gran prestigio y el gobierno tiene diversos planes de becas, visas y apoyos.
El gobierno indio está enfocado en cumplir con los más altos estándares de formación profesional. En 2019 la India contaba con más de 6,200 instituciones de ingeniería y tecnología, las cuales contabilizaban alrededor de 2.9 millones de estudiantes inscritos y donde cada año se han registrado 1.5 millones de estudiantes que obtienen una licenciatura en ingeniería.
Elegir carrera STEM – el primer paso
A nivel global, según la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés) tan solo 30% de los estudiantes en el mundo realiza estudios superiores en campos de STEM; en países como México el número es más bajo y, si nos fijamos en las mujeres, aún más.
Más allá de sólo estudiar carreras STEM, necesitamos mecanismos que aseguren que los estudiantes cuenten con las herramientas necesarias para graduarse. El número de inscritos versus egresados es bajo. De nuevo, más cuando de mujeres se trata.
Paralelamente, debemos trabajar en la inserción temprana de los estudiantes al mundo laboral y en asegurar que tengan acceso a trabajos bien pagados, con incentivos que animen a más personas a entrar en STEM.
Generar empleos STEM – el segundo
India tiene zonas de desarrollo tecnológico y económico más avanzadas que el gobierno creó e impulsó. Las empresas de software o tecnología que deciden ubicarse ahí son acreedoras a ciertos subsidios e incentivos por parte del gobierno.
Lo mismo sucede en nuestro llamado “Silicon Valley Mexicano”, o sea Jalisco, cuna del mariachi y del tequila, donde se alojan empresas de alta tecnología. Es ahí donde podemos encontrar a más de 78,000 profesionales de tecnologías de la información. ¡Es cuna de la innovación mexicana! Ahí tienen casa empresas trasnacionales como Intel, Dell, Motorola, HP, por mencionar algunas.
Otro estado con gran relevancia para el enfoque STEM, es Querétaro, que destaca por la industria aeronáutica. Querétaro ya es el cuarto destino más relevante del sector después de Singapur, Dubái y Bangalore. Aloja a más de 80 organizaciones de la industria aeroespacial como GE, Safran, Interjet, Bombardier, Airbus, Boeing o como el centro de mantenimiento Delta-Aeroméxico.
No es casualidad
De las pocas cosas de las que estoy cierta post-pandemia, es que avanzar en educación significará que los alumnos tengan computadoras personales, banda ancha y plataformas digitales donde poder curar contenidos y aprovechar la tecnología en pro del aprendizaje.
Mi propuesta es que, como país, evaluemos cuáles van a ser los trabajos que México requiera en 2030 e ir preparando los temarios y planes de carrera en función a ellos. El 80% de los trabajos en los siguientes 10 años, demandará habilidades en matemáticas y ciencias.
Las carreras STEM y aquéllas relacionadas con los datos serán catalizadoras de un futuro prometedor.
Elegir una carrera STEM o alguna de las denominadas carreras del futuro, incrementará la probabilidad de éxito. Hablar inglés, también. Tener habilidades digitales, de igual forma. No es casualidad que los Chief Executive Officers (CEO) de Microsoft, Google, Adobe y MasterCard sean originarios de India.
Quizás sea necesario subir a Tik Tok una campaña publicitaria con la canción Savage Love – Laxed, Siren Beat (si crees que no sabes cuál es, búscala; sí sabes) para motivar a los jóvenes mexicanos a decidirse por estudiar carreras STEM.
Pensemos que ésta será la generación que llegue al frente de las instituciones y gobiernos cuando nosotros vayamos de salida. Asegurémonos de prepararlos para que puedan tomar las mejores decisiones por ellos, por nosotros y por el mundo que le dejamos a otros.
Las opiniones publicadas en esta columna son responsabilidad del autor y no representan ninguna posición por parte de Business Insider México.