Paul Alejandro Sánchez

Paul Alejandro Sánchez

Energía Circular

Ya se creó Litio para México (LitioMx), aunque no hay mucho que el decreto de creación nos puede decir sobre los alcances reales que tendrá la paraestatal.

De acuerdo con el decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación, LitioMx es un organismo público descentralizado de la Administración Pública Federal, el cual está sectorizado a la Secretaría de Energía y cuenta con personalidad jurídica y patrimonio propios.

La naturaleza de LitioMx será similar a la de otros organismos también sectorizados a la Secretaría de Energía tales como el Centro Nacional de Control de Energía (CENACE) y el Centro Nacional de Control del Gas Natural (CENAGAS). Además, tendrá como objeto la exploración, explotación, beneficio y aprovechamiento del litio, ubicado en territorio nacional; así como la administración y control de las cadenas de valor económico de dicho mineral.

Para la actual administración, los símbolos y narrativas políticas que permeen en las estructruas sociales es un punto fundamental de su agenda y, en ese tenor, ha retomado las raíces simbólicas del petróleo y el sector eléctrico donde el Estado era el único ente encargado de, por un lado, la explotación y transformación del petróleo y, por el otro, la prestación del servicio de energía eléctrica. 

Todo apunta a que la nacionalización del litio en México y la creación de LitioMx tiene como objetivo central la creación de un símbolo energético nacional como lo ha sido el petróleo en los últimos años. A través de este símbolo se construiría una narrativa de prosperidad y abundancia que los mexicanos deberemos aprender a administrar.

Solo hay un problema con este plan: en México existen recursos y muy pocas reservas de litio. La diferencias es que las reservas son cantidades comercialmente recuperables con un grado importante de certeza; en ese sentido, en el mundo de la minería y el petróleo, para tener reservas se deben cumplir con cuatro criterios: descubiertos, recuperables, comerciables y remanentes.

Por su parte, los recursos son los volúmenes que aún no han sido descubiertos que son estimados y se infieren que existen y podrían, en su caso, ser recuperables y ser comercialmente viables. Es decir, que su recuperación debe ser tecnológicamente viable y económicamente rentable.

De acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos, México no figura dentro de los principales países con reservas de litio, sino que cuenta en su mayoría con recursos prospectivos. En contraste, las principales reservas del mundo se encuentran en Chile, Australia, Argentina, China y Estados Unidos, países que, a su vez, son los principales productores del mineral.

El Servicio Geológico Mexicano presentó en 2020 que México tiene 243 toneladas de reservas de litio, las cuales se encuentran precisamente en Bacadéhuachi, Sonora y aproximadamente 1,800 millones toneladas de recursos prospectivos del mineral. En comparación, en el mundo se estima que hay más de 21 millones de toneladas de reservas y alrededor de 86 millones de toneladas de recursos prospectivos de litio. Esto implica que México representaría 1% del total de reservas y 2% de recursos prospectivos global.

En contraste, Chile tiene 9.2 millones de reservas y 9.6 millones de toneladas de recursos de litio, poseyendo más de 40% de las reservas globales y más de 10% de los recursos prospectivos del mundo. Por su parte, Australia posee 4.7 millones de toneladas de reservas y 6.4 millones de toneladas de recursos, lo que representaría cerca de 25% del total global de las reservas y poco más de 5% del total de los recursos del mundo.

Lo anterior significa que a LitioMx le queda un largo camino para lograr poner a México en el mapa de los grandes productores o tenedores de reservas de litio en el mundo.

El primer paso es emprender la titánica tarea de exploración, cuantificación y certificación para transformar los recursos de litio de México en reservas económicamente viables. 

Para darnos una idea de si este organismo podrá con esta tarea, deberemos observar con cuidado el proceso de presupuesto para 2023, pues dependiendo del monto que el Congreso le asigne a LitioMx podremos ver el grado de compromiso que tiene el gobierno de México con este mineral.

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Jonás Cortés / Business Insider México

Las opiniones publicadas en esta columna son responsabilidad del autor y no representan ninguna posición por parte de Business Insider México.

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