• La miel es comúnmente utilizada para fines nutricionales y para la salud de la piel.
  • A pesar de ser natural y tener grandes beneficios, consumirla en grandes cantidades es perjudicial para la salud.
  • También es usada como cicatrizante y antibacterial para algunas heridas superficiales.
 

Desde hace muchos años, la miel es uno de los ingredientes favoritos de la humanidad, utilizándose como un remedio natural para tratar diversas afecciones como la tos o quemaduras; también se usa en mascarillas faciales o capilares en la industria de belleza.

Al contener cerca de 181 ingredientes, como aminoácidos, antioxidantes, vitaminas A, C y E y proteínas, la miel puede ser benéfica en algunos casos. Sin embargo, no todos los beneficios que se le atribuyen a este alimento están respaldados por la ciencia. 

Estos son algunos beneficios de la miel de abeja, comprobados por la ciencia. 

La miel es una alternativa sana para endulzar

La miel y el azúcar de mesa tienen aproximadamente la misma cantidad de calorías; sin embargo, el azúcar carece de vitaminas o minerales. Al ser natural, la miel no contiene tantos químicos; sin embargo, hay que recordar que sigue siendo azúcar y comerla en grandes cantidades puede ser perjudicial.

Para saber en qué cantidad es sano consumirla, es importante consultar a un nutriólogo porque los requerimientos de cada persona son diferentes, señaló Karla Sainz, nutrióloga deportiva, en entrevista con Business Insider México.

Si eres una persona con diabetes no es recomendable que la consumas, según Sainz, ya que, al ser azúcar, tu organismo podría no reaccionar de manera correcta. Tampoco deberías comerla si tienes alergia al polen, pues la miel conserva propiedades de este que podrían desencadenar o empeorar otras alergias. 

Tiene propiedades cicatrizantes

Por sus compuestos, la miel puede servir para tratar heridas pequeñas, superficiales e incluso úlceras, debido a que favorece el crecimiento de tejido, aclaró la dermatóloga Ivonne Arellano.

De hecho, los egipcios, griegos y romanos la utilizaban para tratar heridas de la piel y enfermedades del intestino, según un artículo de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).

Sin embargo, aplicar miel no sustituye al tratamiento médico. Si la herida presenta enrojecimiento, ardor o dolor es importante suspender su uso y consultar a un médico. 

Es bactericida

Gracias a su alta concentración de azúcar, su bajo contenido de humedad y bajo nivel de Ph, la miel dificulta el crecimiento de casi cualquier microorganismo, de acuerdo con una investigación para la Revista Internacional de Microbiología de Alimentos (FIJM por sus siglas en inglés). 

Combinado con su contenido de prebióticos, puede ayudar a mejorar tu microbiota intestinal y, por ende, mejorar tu salud intestinal. Es una creencia popular que para tener este beneficio es necesario diluir la miel en agua tibia; sin embargo, no hay ningún estudio que la avale. 

Retrasa la aparición de arrugas

La miel contiene flavonoides (antioxidantes), aceites esenciales y aminoácidos —como la prolina, que está involucrada en la producción de colágeno— a los cuales se les atribuye el retraso en la aparición de arrugas. 

Si quieres hacer uso de mascarillas caseras, siempre hay que estar seguros que la piel donde será aplicada está completamente sana. Si tienes alguna alergia o piel delicada, considera consultar a un dermatólogo antes de colocarte cualquier sustancia. 

Es importante tener siempre en mente que el efecto hidratante de estos remedios no es a largo plazo ni sustituye un tratamiento dermatológico, señaló Arellano, en entrevista con Business Insider México.

Es un humectante natural 

La miel natural es comúnmente usada para hacer mascarillas reparadoras para la piel y tratamientos capilares por sus propiedades humectantes. Su uso para tratar problemas de la piel puede tener un efecto calmante y antiinflamatorio que mitigue algunas molestias; sin embargo, no es recomendable usarla de forma frecuente sin la supervisión de un dermatólogo.

Respecto a esto “es mejor, que si se quieren usar mascarillas naturales, comprarlas ya preparadas en tiendas naturistas donde estén registrados los ingredientes utilizados en una etiqueta, ya que esto permite saber la cantidad de vitaminas que contiene a diferencia de los caseros que debido a las variaciones en las cantidades usadas, es difícil saber la concentración de nutrientes”, explicó Arellano.

Por otro lado, estos son algunos otros beneficios que aún no han sido comprobados científicamente.

La pueden consumir los diabéticos

Si bien algunas personas pueden creer que la miel es un endulzante alternativo y que, por ser natural, no importa en qué cantidad se consuma o que esta no hace daño, lo cierto es que sigue siendo azúcar natural. 

Sustituir el azúcar por la miel no aporta ninguna ventaja para los diabéticos, lo que sí es cierto es que la miel es más dulce que el azúcar, de modo que algunas recetas podrían requerir una menor cantidad de miel, de acuerdo con el sitio web de la Clínica Mayo. 

Es por esto que el uso de este edulcorante natural no se recomienda a personas diabéticas y si se quiere consumir debe ser siempre bajo supervisión médica y con un plan alimenticio establecido por un nutricionista, mencionó Sainz.

Ayuda a aliviar problemas de acné

Se cree que por sus propiedades antimicrobianas, humectantes y cicatrizantes, untar miel o algún remedio que la contenga sobre las erupciones causadas por esta enfermedad puede servir como tratamiento alternativo para aliviarlo; sin embargo, no hay ningún estudio científico que avale esta creencia. 

“El usar productos como la miel para tratar problemas de la piel puede tener un efecto calmante y antiinflamatorio que mitigue algunas molestias; sin embargo, no es recomendable usarla de forma frecuente sin la supervisión de un dermatólogo”, puntualizó Arellano. 

Promueve el crecimiento capilar

Si bien hay muchas mascarillas capilares que recomiendan el uso de miel, no existe base científica sobre su eficiencia; sin embargo, es posible que su uso ayude a reconstituir la fibra del pelo por sus propiedades humectantes. 

Antes de colocar cualquier producto en el cabello, es mejor acudir con un dermatólogo para saber qué beneficios o consecuencias podría tener en ti el uso de productos naturistas o caseros, agregó Arellano. 

La miel es un producto natural, rico en nutrientes que puede beneficiarnos de múltiples maneras. Lo recomendable es optar por mieles orgánicas, ya que estas suelen conservar mayor cantidad de propiedades nutrimentales a diferencia de las industrializadas. 

Si todavía no consumes miel de abeja, este puede ser un buen momento para hacerlo ahora que sabes en qué te puede beneficiar.

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